El secreto de Mikyou-chan

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Se decidió que Mikyou-chan tendría un mes de prueba como miembro de nuestra organización secreta.

Durante ese mes, tendría que luchar contra la Oscuridad del Mundo utilizando un PSI drive y desarrollar relaciones reales con espers de verdad. Si dejara de decir cosas como «la humanidad debería morir» y «el mundo necesita un dictador», entonces genial. Incluso consideraría la posibilidad de trasplantar un fragmento de telequimúsculo a su mente y convertirla en una esper de verdad.

Sin embargo, si no mostrara ningún cambio al final del periodo de prueba, diríamos simplemente que su fuente de superpoderes había vuelto a quedar inactiva -después de todo, era tan débil que sólo podía activarla con la ayuda de un PSI drive- y la devolveríamos a su vida cotidiana. Existía el riesgo de que esto la enfureciera y de que fuera a exponer la verdad sobre Amaterasu y los superpoderes al mundo como venganza, pero no lo creía muy probable. Parecía amar demasiado a los espers como para hacerlo.

Tener sólo un mes para cambiar la visión del mundo de alguien puede parecer algo muy complicado, pero este plazo de un mes ya era en sí mismo un compromiso.

En primer lugar, tanto Kaburagi-san como yo habíamos determinado que Mikyou-chan no era apta para ser miembro de nuestra organización. Sólo porque Shige-jii insistió tanto en ello, le dimos a la chica esta única oportunidad. De ella dependía que esta oportunidad se convirtiera en una realidad o en un fracaso.

Mientras que la vida de algunas personas cambia a partir de una experiencia que dura apenas unos segundos, otras permanecen completamente inalteradas incluso después de diez años enteros. Desde esa perspectiva, un mes era largo y corto al mismo tiempo.

Pues bien.

Como Mikyou-chan vivía en el hospital y no podía salir fácilmente del lugar, Shige-jii tuvo que contarle todo lo relativo a la Oscuridad del Mundo y a Amaterasu allí mismo, durante esa primera noche. La chica entró en pánico al enterarse de que la persona de la que había hablado pésimamente era uno de los espers a los que tanto idolatraba, pero al final consiguió disculparse muy nerviosa.

Normalmente, lo primero que hacían los nuevos reclutas de la organización secreta era entrenar su nuevo superpoder. Sin embargo, como el de Mikyou-chan era un superpoder falso, no tenía que hacerlo.

La postura oficial de los que estábamos detrás era que el suyo era un caso único en el que, a cambio de que su poder estuviera completamente formado cuando despertó, sólo podía activarlo con la ayuda de un PSI drive. Siendo así, no había necesidad de esperar a que tuviera su primera batalla. Intentábamos sacar a Mikyou-chan del mundo cerrado en el que había vivido hasta entonces para presentarle muchas experiencias diferentes con la esperanza de que le hicieran replantearse varias cosas.

Tres días después del suceso paranormal en el hospital, una Oscuridad del Mundo real apareció a altas horas de la noche. Shige-jii pisó el acelerador con Shouta-kun en su coche, fue a recoger a Mikyou-chan al hospital y se dirigió directamente al lugar de los hechos. Los edificios oscuros observaban desde ambos lados mientras su lujoso coche de fabricación alemana atravesaba las calles casi desiertas.

Esta iba a ser también la primera batalla de Shige-jii, y Shouta-kun venía en calidad de asesor. Touka-chan se ausentaba porque no quería conocer a Mikyou-chan, ya que ella personalmente consideraba que el trabajo de montaje era una mentira y odiaba absolutamente las mentiras.

Desde su asiento en la parte trasera del coche, Mikyou-chan se aferró a su khakkhara PSI drive y se acurrucó como si temiera que alguien pudiera verla a través de las ventanas del coche.

«¿Aún podemos dar la vuelta, verdad? P-Papá dijo que no debería salir sin permiso y M-Mamá dijo que debería dormir por la noche porque afuera es p-peligroso...»

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