Poisonous Rose (Larry Stylinson)

Capítulo 49

**Skylar Grey - I Know You

Capítulo 49

Se sentía sedado de todo el cuerpo a excepción de su cabeza. Estaba esposado a la cama por la mano izquierda. Sus ojos estaban tan hinchados que apenas podía ver. La máquina que controlaba los latidos de su corazón y su respiración agitada era lo único que podía escucharse en esa horrible habitación de hospital.

No era la primera vez que amanecía en ese lugar, sin embargo sí la más dolorosa. En la parte superior de su cabeza sentía un dolor aturdidor que amenazaba con desmayarlo, el resto de su cuerpo se encontraba completamente dormido a causa de todos los medicamentos que le habían inyectado.

El doctor le había pedido que durmiera, y a pesar de estar agotado mental y físicamente, le era imposible si quiera cerrar sus ojos e intentarlo.

Necesitaba saber sobre Louis, necesitaba que alguien le confirmara que estaba bien. Necesitaba hablar con él y que le explicara la cantidad de estupideces que le había dicho mientras los subían a las camillas, en el momento de ser rescatados de la gente de Aldo.

No dudó ni por un segundo de Louis, no creyó en nada de lo que éste le había dicho, era imposible. Estaba convencido de que sólo se trataba de alguna estrategia, que realmente él no estaba hablando en serio al decir lo que había dicho. Confiaba en él, confiaba plenamente en ese hombre y no dudaba ni por un segundo de que en cualquier momento se aparecería por su habitación vestido con su uniforme de doctor y comenzaría a repararlo, reparar sus huesos rotos, sus moretones, sus heridas, su dolor físico, pero lo más importante, su corazón.

Aún quedaban demasiadas cosas por vivir juntos, aún permanecían muchos sueños inconclusos que Harry estaba dispuesto a ayudar a Louis a cumplir. Intentaba no tener miedo, intentaba ser fuerte y mantener una idea positiva, sin embargo en su interior comenzaba a sentir un miedo asfixiante.

Miró el reloj que yacía colgado sobre la pared, eran casi las 10 de la noche, 5 horas después de que la policía lo había llevado al hospital, y Louis aún no daba señales de vida. Sus ojos se cerraban constantemente por el cansancio y todos los sedantes que le habían inyectado, pero él no se dormiría hasta haber hablado con Louis.

Una enfermera entró a su habitación con una nueva dosis de medicinas. Le dio una sonrisa amablemente y se acercó hacia el rizado. La puerta del lugar se había quedado abierta y Harry pudo distinguir dos hombres uniformados que escoltaban la habitación.

—Debes de descansar, estás muy débil. —Le dijo la mujer mientras revisaba que todo estuviera en orden con el chico—. ¿Quieres que te dé algo para que puedas dormir?

Tardó demasiado en responder, estaba demasiado débil y le costaba trabajo hablar. —¿No ha venido nadie a buscarme? —Susurró con un hilo de voz. 

La mujer negó al instante sin darle mucha importancia. —No, lo siento, pero nadie que no forme parte del personal puede entrar a esta área. Tienes las visitas prohibidas.

—¿Está segura?

—Completamente... —Miraba a Harry intentando ocultar la lástima que en realidad sentía por ese chico. En todas las horas que llevaba ahí no se había recibido ninguna llamada de algún familiar que quisiera saber cómo estaba—. Pero no te preocupes, estamos haciendo lo posible por contactar con tu familia para que estén enterados de que estás aquí.

Tragó saliva y se preocupó demasiado. Louis formaba parte del personal de ese hospital, podía haber ido a verlo en cualquier momento. —¿Sabe si el doctor Tomlinson está aquí?