Poisonous Rose (Larry Stylinson)

Capítulo 19

Capítulo 19

Dos semanas después.

Después de aquella noche lo único que pasó entre Louis y Harry fue tiempo.

Ninguno de los dos hacía el más mínimo intento por saber de otro, y eso no significaba que no lo necesitaran, sino, su orgullo era lo que se los impedía.

Harry era, aparentemente, el que mejor estaba llevando las cosas. Había querido cortar cualquier tipo de relación que lo uniera a Louis, inclusive la profesional. Contrató un médico de confianza que se hiciera cargo de los cuidados de su cicatriz sin que hiciera muchas preguntas. Le daban todos los medicamentos que necesitaba para estar levemente sedado y sentirse bien.

Ni él ni Zayn podían trabajar en esos momentos, pues desde el último trabajo que habían hecho las autoridades estaban muy estrictas e interesadas en cualquier persona que paseara con rosas por la calle. Estaban aparentemente desesperados por conseguir la más mínima pista acerca de la banda de sicarios que operaba con rosas envenenadas, y los retenes en florerías y viveros llegaban a ser excesivos.

Y a pesar de todo eso los chicos no estaban preocupados por la falta de trabajo. La discoteca que tenían para lavar dinero les daba las suficientes ganancias para sostener su nivel de vida de lujos y vicios excesivos. Tanto Harry como Zayn habían entrado en una etapa de fiestas noche tras noche, bebiendo alcohol hasta quedar inconscientes, o en el caso de Harry, que el dolor de la cicatriz o los mareos constantes que tenía gracias a eso lo detuvieran.

Zayn sabía que Harry estaba afectado, y que la ausencia de Louis en su vida era la principal razón por la cual el rizado había comenzado a tomar sin medidas. Pero tampoco sabía qué hacer o cómo ayudarlo. Louis daba problemas estando o no estando.

Por otro lado estaba Louis, que no tomaba la situación nada parecido al menor. Él, en cambio, no podía ocultar lo mucho que Harry le afectaba, pues después de aquella noche donde se habían visto por última vez no podía dejar de pensar en las palabras del rizado, y en lo mucho que le afectaba no haber podido ser más valiente y decir otra cosa, no haber sido más insistente y pelear por lo que realmente quería, retenerlo de alguna manera, hacerlo quedarse con él, tenerlo en esos momento.

No podía entender cómo fue posible que alguien a quien recién había conocido llegara a afectar su estado de ánimo incluso aún más que una persona con la cual llevaba años de relación. Se sentía como un verdadero idiota pensando en Harry en cada momento de su día. Era como si se hubiera apoderado de su mente y se negara a salir. Como un virus que  sólo podías controlar, pero nunca eliminar.

Estar en el hospital lo distraía, como siempre. Le hacía llevar su mente hacia otros lados, y concentrarse en cosas que realmente importaban como lo era la salud de sus pacientes. Sabía que la medicina le apasionaba, incluso más de lo que Harry lo hacía, y por eso había encontrado una salida en ésta.

Louis no era una persona que huía de sus problemas, pero en esa ocasión lo veía extremadamente necesario. Quería salir de la ciudad y ocupar su mente en algo útil como lo era su profesión. Tenía muchos meses queriendo hacer una maestría en la rama de neurología, y de ahí especializarse en la psiquiatría. Así no sólo tendría una especialidad, sino dos. Era obsesivo, y cualquier cosa que se proponía la cumplía sin importar lo que ésta implicara. En el fondo sabía que todo eso sólo se debía a la ausencia de Harry, pero tampoco quería hacer algo para recuperarlo.

Trataba de ponerse en el lugar de Harry y adivinar la situación por la que él probablemente estaba pasando. ¿Estaría peor a como estaba él? Harry había mencionado que estaba enamorado de Louis, y probablemente su rechazo le había roto el corazón. Probablemente Harry sufría su ausencia de la misma manera en la que él, y eso de alguna manera era reconfortante, pues muy en el fondo sentía esperanzas de que las cosas volvieran a ser las de antes.