Capítulo 22

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Capítulo 22

Dedicado a @HiOops_HL

Despertó alterado, de golpe. Se había quedado dormido sin darse cuenta. Tras la sesión de sexo con Harry había quedado completamente agotado. Miró todo a su alrededor y se levantó quedando sentado sobre la cama. Junto a él dormía el rizado, ambos se encontraban desnudos, y la habitación seguía manteniendo ese tedioso olor a sexo.

Dio un suspiro agotado, y se estiró un poco para relajar los músculos, se levantó de la cama y fue directo hacia su pantalón para sacar del bolsillo su móvil. Eran apenas las 10:20 pm, lo que significaba que aunque hubieran dormido gran parte de la tarde, tenía tiempo de llegar al hospital y cubrir su ronda nocturna.

—¿Qué hora es? —Escuchó una voz adormilada a sus espaldas. Se giró hacia la cama y se encontró con el menor tallando sus ojos y tratando de despertar por completo.

—Las diez. —Mencionó Louis y pronto comenzó a buscar su ropa. Le era un poco vergonzoso mirar a Harry después de lo que habían hecho esa tarde.

—¿Ya te vas? —Notó la prisa con la que el chico buscaba sus pertenencias—. No tienes que irte, Louis. Puedes quedarte aquí esta noche. —Se sentó sobre la cama cubriéndose con las sabanas hasta el cuello, para él, de igual manera, era algo vergonzoso estar así frente a Louis. Hablaba con una inocencia aterradora y cínica, hablaba con un tono que lograba convencer a cualquier persona de que era un santo, alguien incapaz de dañar a nadie.

Se quedó mirándolo en silencio, qué cobarde era al estar con Harry en esos momentos. Sabía que su amor hacia el rizado estaba lleno de cobardía, nada más que cobardía, y no era relacionado con que éste fuera un hombre, sino a que estuviera con él a pesar de lo que sabía sólo por el miedo a sufrir por su ausencia. 

—No puedo. —Le dijo desviando la mirada. Dejó su móvil sobre la cama y recolectó toda su ropa.

—¿Por qué? Ya es tarde, no quiero que te arriesgues yéndote a esta hora. —Mencionó el pequeño, rogaba en su interior porque Louis aceptara quedarse junto a él toda la noche. Sentía el estómago revuelto por la emoción de la situación que acababan de vivir.

Louis comenzó a reír irónicamente y a negar con la cabeza, no lucía muy feliz. —¿Qué sería lo peor que me podría pasar? ¿Encontrar a su sicario que tenga la orden de matarme? —Mencionó alzando las cejas y mirando a Harry—. Me estoy follando a uno, qué más da si me encuentro con otro. —No quería ser agresivo con él, pero aun sentía mucha frustración dentro de su cuerpo que deseaba liberar.

Su estómago se hizo nudo y bajó la mirada. Podía esperar cualquier respuesta menos algo parecido a lo que Louis acababa de mencionar. Tenía que ser paciente con Louis y darle tiempo para aceptarlo completamente. —Bien. —Se levantó de la cama y de igual manera buscó su ropa para vestirse—. Al menos deberías tomar un baño, apestas a fluidos. —Le dio la espalda y comenzó a reír tratando de evitar que Louis lo notara.

El mayor miró su propio cuerpo y  al instante se dio cuenta que su abdomen estaba manchado con semen. Sonrió y miró al rizado, éste le regresó la sonrisa al mismo tiempo que guiñaba un ojo. Qué poder tan inmenso tenía ese chico, que con una sola sonrisa lograba cambiarle por completo el humor.

—Creo que tengo tiempo para un baño rápido. —Se acercó hacia Harry mirándolo fijamente, y cuando estuvo lo suficientemente cerca lo tomó de la cintura y lo acercó hacia él. No había sensación más placentera que sentir sus pieles desnudas rozarse—. Si no me quedo esta noche es porque tengo que trabajar. —Le explicó mientras que con una mano enredaba sus dedos en los rizos del menor. Harry sonrió, con aquella inocencia enfermiza que solo lograba volver loco al mayor. Juntaron sus labios y se besaron durante largos segundos. Louis besó su frente—. Me ducharé. —Le dijo separándose de él y yendo hacia el cuarto de baño dentro de la habitación.

Poisonous Rose (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora