Poisonous Rose (Larry Stylinson)

Capítulo 27

Capítulo 27

 

Los días comenzaron a pasar y por una extraña razón, pasaron tranquilamente, sin muchas preocupaciones para los chicos. Harry y Louis pasaban la mayor parte de su tiempo libre juntos, sin embargo siempre se ocultaban en el departamento de Louis, pues era probablemente el único lugar donde podían estar completamente seguros de que no había nadie vigilando al rizado. Charlaban, comían, dormían, peleaban y arreglaban sus discusiones teniendo relaciones como cualquier otra pareja común. Entre ellos las cosas marchaban bien, y por cada día que pasaba, se sentía como si algo dentro de ellos creciera más y más, ninguno de los dos tenía duda alguna, estaban irracionalmente enamorados del otro, y sin embargo ninguno de los dos se había atrevido a mencionar aquella importante frase que significaba tanto.

Por otro lado, Zayn se hacía cargo del negocio tratando de ser lo más discreto posible para evitar que Louis se diera cuenta que Harry continuaba operando junto con él. Eran razones sencillas, el rizado necesitaba dinero y si quería mantener su nivel de vida tenía que continuar trabajando junto con Zayn a espaldas de Louis. Lo hacía en menor cantidad, y el moreno era el que en mayoría se encargaba de los asuntos, sin embargo él participaba en algunos casos. No quería mentirle a Louis, pero sabía que éste nunca aceptaría su realidad, no podía dejar el negocio de manera tan simple, tenía que salirse poco a poco hasta lograr que sus clientes no le dieran mucha importancia y se olvidaran de él.

Niall había hecho hasta lo imposible por hacer contacto con Louis, pero éste lo evitaba con pretextos estúpidos como lo eran el trabajo excesivo y falta de tiempo para atenderlo. Sus superiores comenzaban a presionar más y más sobre el caso del sicariato con envenenamiento y él por más que buscaba no encontraba pista alguna.

Era un viernes por la tarde, Louis y Harry se encontraban en el departamento del mayor, que acababa de llegar después de desocuparse de su ronda matutina y por lo tanto tenía el día completamente libre para pasarlo con su novio.

—¿Qué quieres hacer hoy? —Preguntó Louis al mismo tiempo que se echaba sobre la cama y aflojaba su corbata. Normalmente al salir del hospital terminaba exhausto e intentaba hacer su mayor esfuerzo por verse energético frente a Harry—. Podemos ir al cine si quieres, a cenar, o a donde quieras. —Le dijo con una sonrisa.

El menor se acercó hacia la cama y se recostó sobre Louis regalándole un largo y húmedo beso de bienvenida, no estaban viviendo juntos, pero el pequeño tenía llave del departamento para entrar cuando quisiese estando o no estando Louis. —¿Ya comiste? —Preguntó al terminar de besarlo.

—No, ¿Tú? —Harry negó mirándolo con una sonrisa—. ¿Quieres que te lleve a comer algo?  —Volvió a negar de la misma manera—. ¿Entonces qué quieres, amor? —Louis no era la misma persona que había sido meses antes. Su rostro lucía con vida sin importar que estuviera cansado. Miraba con amor a Harry, y trabajaba con más ganas que antes, pues buscaba reunir la mayor cantidad de dinero posible que les permitiera irse de Londres juntos.

—¿Qué te parece si preparo algo mientras tú tomas una siesta? —Durante el poco tiempo juntos había aprendido a reconocer cuando Louis se encontraba cansado, y le era totalmente comprensible, sus rondas comenzaban a las 5am y terminaban a las 3pm. Regresaba exhausto y a Harry no le gustaba quitarle el privilegio de descansar, aunque fuera un poco.  

—Hoy no estoy tan cansado como otros días. —Mentía, pero quería ser el mejor para su pequeño—. En serio, puedo llevarte al lugar que me pidas para comer algo.

—¿No confías en la comida que pueda prepararte? —Mantenía la sonrisa en su boca.

—No mucho. —Le dijo y al mismo tiempo besó su cuello con diversión.