Poisonous Rose (Larry Stylinson)

MARATÓN 2/2 (CAPITULO 18)

MARATON 2/2

CAPITULO 18

 

Louis salió del departamento y apresuró su paso para alcanzar al rizado junto con su amigo. No podía permitir que éste se fuera así de simple, sin dar alguna explicación sobre lo que habían dicho en la casa. La impotencia lo estaba matando, el coraje calentaba su cuerpo cada vez más, y al mismo tiempo la adrenalina se corría por toda su sangre poniéndolo como nunca antes se había sentido.

Llegó hasta la calle y buscó a Harry con la mirada, era de noche, y hacía demasiado frio, pero eso le importaba una nada en ese momento. Encontró al moreno junto a un auto, dentro de éste se encontraba el rizado, que al momento que cruzó miradas con Louis, su expresión se volvió tensa, preocupada.

—Más vale que ya dejes de molestar. —Mencionó casi gritando Zayn cuando miró a Louis acercarse hacia ellos desde lejos—. Él ha dicho que no quiere hablar contigo, no lo hará.

Louis pareció que no había escuchado si quiera un silbido, fue directo hacia la puerta de la parte donde Harry se encontraba sentado en el auto y trató de abrirla, estaba bloqueada. —Abre la puerta y sal de ahí. —Intentó mantener la cordura, dio un respiro hondo—. Abre la maldita puerta, Harry. —Volvió a intentarlo.

—¡Por qué mejor no te vas a la mierda! —Zayn ya estaba muy molesto y Louis parecía querer ayudarle a desquitar su coraje—. ¡Déjalo de una puta vez!

Harry sabía que las cosas se volverían aún más graves si no salía del auto, pero tampoco quería hacerlo, no quería tener que responder a las preguntas de Louis. Además de todo, él también tenía derecho a estar molesto, Liam lo había y Louis no había dicho absolutamente nada contra eso.

—¡SAL DE UNA MALDITA VEZ! —esta vez dio un golpe contra la puerta del auto con el puño, provocando que el rizado diera un brinquito gracias al susto que esto le había ocasionado.

—¡TE HE DICHO QUE LO DEJES EN PAZ! —Zayn volvió a intervenir, siendo más violento que antes, tomó a Louis del cuello y lo empujó contra el automóvil—. ¡DEJA DE INSISTIR!

El castaño trató de quitar las manos de Zayn de su cuello, sin embargo éste lo apretaba con fuerza casi inhumana, o al menos con alguna técnica con la que era imposible zafarse. El aire comenzó a faltarle y tosió por reacción natural.

Harry abrió la puerta apresurado y salió del auto. —Zayn, déjalo en paz. —Se acercó hasta los chicos y trató de separarlos.

—No, Harry. Vamos a demostrarle de una vez a este mojigato quienes somos y las razones por las cuales es mejor que se mantenga al margen con nosotros. —Le dio una sonrisa a Harry, como si disfrutara, como si lastimar físicamente a una persona fuera lo que le hiciera feliz.

—No, por favor, suéltalo. —Mencionó Harry tratando de mantener la calma para que Louis no entrara a pánico junto con él. Él conocía a su amigo, y sabía que todo lo que dijera siempre iba a ser en serio—. Zayn, te lo ruego, detente.  

—Deja de llorar, Harry, sólo será una pequeña demostración. —de una manera extraña lograba robarle todo el movimiento a Louis, lo mantenía acorralado contra el auto y con ambas manos apretando su cuello, mientras que con las piernas detenía las piernas del mayor, que no hacía otra cosa más que toser—. A ver si así se le quita lo arrogante. —Con cuidado, soltó una mano del cuello del mayor y la llevó hasta sus bolsillos traseros del jeans, sacó de ahí una navaja y después volvió su mano hacia Louis.

—¡NO! ¡Detente! —Harry intervino, lo empujó lejos de Louis tomándolo por sorpresa y provocando con esto que lo soltara, después fue directo hacia el mayor para asegurarse de que el moreno no volviera a acercársele.