Capitulo 6: Un retorno momentáneo

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Issei abrió los ojos para ver el cielo aun nocturno y sus hermosas estrellas, luego de la charla que tuvo con la dragona la cual se sintió bastante amarga por lo contado por ella y su tragedia pero no podía hacer nada mas que cumplir la promesa que se hicieron. Miro su mano con esa esfera roja pero sin mostrar ese brillo que tanto la hacia destacar, tal parece que nuevamente la dragona volvió a tomar una siesta después de todo el poder que uso solo para llegar a el le pareció normal luego de ver por unos minutos la esfera roja la cual luego guardo, emprendió su camino para recuperar su arma y largarse de este lugar.

Caminaba lentamente mientras aun pensaba en todo lo que le había hablado Ddraig, sentía empatía por la chica dragona y su pasado trágico de desgracia pero por encima de todo su curiosidad se centraba mas en la portadora de la dragona y solo sabia que era una mujer.

Hasta ahora solo había enfrentado a las criaturas que habitaban esta isla desde prácticamente su llegada, seres que a su vista le parecían de poseer un gran poder y sin embargo ahora mismo se daba cuenta que todo eso no eran mas que patrañas que el mismo se había metido en su mente. Fuera de esta isla, había seres que solo lo verían como una simple mosca a sus ojos pero eso lo llenaba de emoción y un poco de miedo al pensar que tan lejos podría llegar.

Sus pasos empezaron a acelerarse, poco a poco avanzando mas rápido hacia su destino y con cada paso que daba mas emoción sentía sabiendo que cada vez mas estaba mas cerca de salir de este lugar, a pesar de haber pasado tanto tiempo sentía una pequeña esperanza de volver a ver a sus padres. Tal vez por eso invadieron su hogar en primer lugar, tal vez... tal vez...

...

Al llegar finalmente a donde había dejado su espada clavada vio que las serpientes que lo habían rodeado con anterioridad ya no se encontraban, se acerco y tomo del mango su katana y apunto al pilar negro el cual veía como su única salida para luego guardar su preciada arma en su vaina. Toco el enorme pilar con su mano derecha y cerro sus ojos, llenándose de calma para concentrarse para luego abrir sus ojos y vio con decepción que no había ocurrido absolutamente nada sin embargo repentinamente un circulo brillante de color rojo carmesí aparecía nuevamente como hace varios años.

Al entrar en contacto con este un gran resplandor blanco que le obligaron a cerrar sus ojos rápidamente para evitar dolor en estos y al abrirlos estaba nuevamente en ese mismo lugar de hace 5 años, el único cambio que había era que ya no estaba esa cuna algo que lo aliviaba en cierta manera. Sin embargo grata fue su sorpresa cuando una parte inferior de su kimono fue agarrada por unas pequeñas manos, al bajar su mirada vio aun niño de cabello rojo mirándolo con sorpresa con sus ojitos azules.

-... (Demonios... ¿por que tengo que lidiar con esto ahora?) -se pregunto mentalmente el castaño sintiéndose incomodo ante la mirada del niño.  

-... ¿Eres amigo de mi papa? ¡No sabia que mi papa tenia amigos tan geniales como el! -exclamo con emoción el niño intentando llegar a agarrar la vaina de la katana.

-... (oh dios... espera) pequeño eh-

-¡Millicas! ¡Millicas Gremory señor samurái! -exclamo con gran entusiasmo el chico de cabello rojo.

-... Ah, em si... ¿puedo saber donde esta tu padre?, quiero hablar -antes de terminar la oración, el niño rápidamente partió a saber donde tras las palabras de Issei

Este ultimo solo pudo suspirar de frustración para luego mirar los sillones y sin poder evitarlo se sentó en la comodidad de estos mientras esperaba, cerrando sus ojos por unos segundos solo para volver a abrirlos y mirar el techo del lugar.

-¿Quiere un te mientras espera? -pregunto una voz femenina tranquila a Issei.

Al voltear a ver a su lado, vio a una mujer de cabellos plateados sirviendo te en una pequeña taza de porcelana lentamente mientras le dirigía una mirada serena al castaño y este al verla no sentía esa tranquilidad que transmitía su mirada. 

Issei: La espada infinitaWhere stories live. Discover now