Issei: La espada infinita

Capitulo 15: Aberración

...

El decepcionarles nunca puede ser una opción para Sona a la hora de mostrar todo su ingenio y poder ante sus padres y muy en especialmente ante su hermana mayor. Estaba en el camino de perfecciónar su dominio con la magia elemental del agua y no era para nada un camino fácil, pensó que tal vez al ser considerada una de las prodigios de su generación sería más fácil pero la realidad le golpeo fuerte.

Los Sitris llevaban generaciones siendo quienes portaban el título de Leviatan o también conocido como "El Rey de los Arrogantes", ella al igual que su hermana y padre ocuparía ese título, era su deber como... pero su sueño.

-Sona... ¡Sona!

La joven de 13 años salió de sus pensamientos y miró que quien le llamaba era la joven Gremory.

-¿Ocurre algo Rias?

-¡Miko-sama nos dijo que podemos salir a explorar la ciudad! -exclamó con entusiasmo la pelirroja.

-Pe-pero los estudios-

-¿No quieres conseguir ese peluche de la chica mágica de edición limitada que vimos cuando llegamos al mundo humano? -pregunto con un tono de burla.

-Yo... -ocultando su rostro enrojecido por la vergüenza- si lo quiero-

La pelirroja la tomo de la mano y la levanto para llevársela a su habitación y vestirla con ropa casual para salir a pasear por la ciudad, sin ambas saberlo estaban siendo vigiladas por Issei el cual las seguía en silencio.

La propia Miko apesar de dar luz verde a que ambas chicas salieran a conocer más la ciudad, obviamente no las dejaría marcharse así de fácil. Issei en un principio se negó a salir a vigilarlas confiando en las habilidades excepcionales de los pequeñas diablos, sin embargo por la simple mención de la Monja oscura y ángeles caídos fue más que suficientes para convencerlo.

Sin embargo algo más le preocupaba y era la joven Sitri, pese a parecer bastante calmada ante su presencia, la de Rias y la de la Sacerdotisa parecía que en cualquier momento un estallido iba a ocurrir. Podía notar que en sus ojos se podía ver cierto desinterés pero supo ocultarlo a su amiga.

...

Al rato ambas chicas salieron del santuario despidiendose de su maestra y saliendo a visitar la ciudad por segunda vez, siendo seguidas discretamente por el castaño ocultándose entre la multitud y detrás de objetos que no lograron detectarlo.

Ambas amigas estuvieron dando un largo paseo hasta llegar al frente de un puesto de helados, y fue Rias la quien fue a pedir los helados mientras Sona estaba sentada esperando pensativa.

-Señor... ya se esta ahí, no hace falta esconderse -dijo la pelinegra, mirando aún lado esperando a que saliera Issei de detrás de una pared.

-A diferencia de la otra chica, tu eres difícil de engañar, pero aún te falta

La Sitri subió su mirada, sorprendida de que el castaño este subido encima del techo de la heladería.

-... *trago saliva* Señor, no hace falta que este protegiendo a las dos, podemos cuidarnos solas

- En un principio pensé en no venir a cuidarlas... pero luego pensé que al fin podría encontrar a uno de esos tipos -dijo Issei mirando a la chica.

-¿Esos tipos?¿se refiere a los ángeles caídos? -pregunto curiosa.

-Así es, no pretendo dejar escapar información valiosa... de mientras, sigan tranquilas y disfruten de su salida -alejándose de la vista de Sona.