Cap.40

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Mediados de Octubre de 2023.

Rivelazioni.


Me encontraba algo perdida entre los pasillos del hotel, llegaba un punto en donde se bifurcaban los caminos y no lograba dar con la habitación correcta. Tuve un pequeño mareo y me apoyé en la pared hasta sentir una leve mejoría, casi por inercia levanté la vista y ¡bingo! había llegado a mi destino.

Golpee la puerta dos veces antes de que Charles abriera, detrás suyo se podía apreciar a Joel mirándose en un espejo, Carlos Sr en una llamada y a Carlos Jr teniendo problemas con la corbata.

— ¡Buen día mon amour!—el monegasco me tomó por las mejillas.
— Ya nos vimos esta mañana—reí y luego lo bese— ¿Puedo pasar?— asintió.

Al percatarse de mi presencia, Sainz levantó sus cejas, mientras que Joel volteo a verme un microsegundo y luego volvió a la suyo.

— ¿Isa también te deportó?—bromeó Carlos aludiendo a una pequeña discusión que Isa y Reyes tuvieron apenas comenzó el día.
— No, yo me deporté por mi cuenta—sentí las manos de Charles sobre mi cintura— La novia me mandó por el padrino—elevé la voz para llamar la atención de Joel.

— Creo que me llaman—respondió mi hermano al terminar de acomodar el cuello de su camisa— ¿Cómo me veo?—me preguntó mirándome a través del espejo.

— Como un completo imbécil—me crucé de brazos.
— Habló la que tiene pinta de ir a un velorio—volteó a verme— ¿Acaso no habia más colores que te vestiste de negro?
— El negro es clasico, elegante y por lo menos mis ojeras no están en el subsuelo de este hotel— elevé una ceja en señal de reclamo.

— Era seguir la joda hasta los 35 hermanita, pero elegiste hacerme tío y ahora tengo que divertirme por los dos—hizo un pequeño puchero.
— Sos un boludo—mordí mi labio mientras negaba.
— También te amo reina— se colocó sus gafas  y luego se encaminó a la puerta.

El padre del novio lo detuvo antes de que se marchara, le habló al oído y salieron juntos.

— ¿Te sientes bien? te veo muy pálida—Charles me abrazó pegandome a su cuerpo y me arrastró hasta quedar frente al espejo— ¿Y Hope?
— Sam y Arthur  lograron que se quedara con ellos en el vestíbulo—noté un pequeño gesto de disgusto al escuchar el nombre de su hermano.
— ¿Estás bien?—insistió.
— Deberías hacerle esa pregunta a Carlos—traté de desviar su atención hacia el otro piloto.

Sentado al borde de la cama, Sainz se había dado por vencido con su corbata. Tomé la mano de Leclerc y ambos nos acercamos al madrileño.

El otro Ferrari lucía un diseño exclusivo de Armani, la casa de lujo italiana había estado hasta en los más mínimos  detalles, desde la ropa interior, hasta el par de gemelos de oro con las iniciales CS grabadas. Era un atuendo de gala y a decir verdad, parecía digno de la realeza, con un pequeño arreglo floral en tono marfil que le aportaba un toque de delicadeza al total look.

— ¿Nervioso mate? Ni que te fueras a casar—bromeó Charles  arrebatándole la corbata de las manos.
— Gilipollas— chilló entre dientes el español— ¿Isa aún está alterada?
— Lo normal, un embarazo te da vuelta las hormonas y un casamiento te da vuelta la cabeza, no es una buena combinación—le sonreí gentilmente— pero ya veras que después de la iglesia se pasa todo—intenté darle ánimos.
— Solo quiero que el día se termine cuanto antes—pasó sus dedos por su cabello.
— En cuanto más lo desees, más lento será, así que trata de disfrutar…

— ¿Puedo?—interrumpió Charles. El español asintió.

El monegasco se colocó frente al piloto y levantó las solapas de su camisa con delicadeza,  colocó la corbata y fue ajustando con suavidad hasta que quedó perfecta.

VOLTAJE ⚡ - Charles Leclerc | Antoine Griezmann Where stories live. Discover now