OBLIVIATE || Hyunlix✔

ღ08

[FELIX]

Las palabras de Chan resuenan en mi cabeza mientras me alejo del hospital. Me tapo los ojos con las gafas de sol para ocultarle mis emociones a Hyunjin, que siento que me estudia desde el otro lado del auto.

—¿Estás bien? —me pregunta, y yo asiento con la cabeza.

—Estoy bien. ¿Tienes hambre?

—Comí en el hospital.

—¿Entonces eso es un sí? —Se ríe.

—Puedo comer, pero no quiero interrumpir tu día.

—Está bien, saben que trabajaré desde casa el resto de la semana.

—¿Está... bien?

—Sí. También he llamado a BHS y les he contado lo que pasa.

—¿Qué ha dicho Jay?

—Bueno... nada porque Jay no trabaja para BHS —le digo y puedo sentir su mandíbula cayendo en mi periferia.

—¿Qué has dicho?

—Bueno... como que le has quitado el trabajo.

—Me estás jodiendo. Él... era mi mentor.

—Sí, bueno... —Me encojo de hombros.

—¿Qué me pasó? Lixxie, ¿en qué clase de idiota me he convertido? —Me río a carcajadas ante su tono aprensivo.

—¿Cómo que en qué te has convertido? Hace dos años eras un idiota, así que no sé por qué estás confundido. —Se queda en silencio y le echo una mirada de reojo y se queda mirando por la ventana. —Estoy bromeando... han ascendido a Jay. —Le doy una media sonrisa cuando se gira hacia mí y puedo ver el alivio en sus ojos—. Ahora trabaja en la oficina de Suwon —le digo y él asiente con la cabeza antes de soltar un suspiro.

—Podrías haberte adelantado con eso.

—Lo siento, pero era demasiado fácil. —Me río.

—Gracias por utilizar esta situación en mi contra —refunfuña—. ¿Quién es el idiota ahora? 

Me muerdo el labio ante su comentario. Van a ser tres semanas muy largas si así iban a ser las cosas. Avanzamos por las calles hacia mi apartamento en el SoHo y en cuarenta minutos estoy entrando en el garaje de la base del edificio. Me desabrocho el cinturón de seguridad y miro fijamente al frente mientras me preparo para lo que he estado practicando en mi cabeza durante los últimos veinte minutos.

—Lo siento –exhalo—. Por ser insensible —Lo miro y él me sonríe.

—Sé que puedo ser un poco idiota. Es que... nunca he sido así contigo. Tú siempre has sido la única excepción. —Se desabrocha el cinturón de seguridad y hace un movimiento para salir antes de detenerse y mirarme.

>>Tú... y Chan... y mi madre, todos pueden decirme lo que hice, pero todavía no puedo asimilar el hecho de que ocurrió. Que te haya hecho daño... de esa manera. Dicho esto, sé que tienes una opinión muy diferente de mí de la que yo recuerdo haber tenido de ti, así que me va a costar acostumbrarme... a que ya no me ames. —Me dedica una sonrisa triste y luego se va.

Abro la boca para refutar su afirmación cuando recuerdo que es más fácil para todas las partes si él cree que no lo amo.

¿Y qué pasa si lo amo? ¿Cambia eso algo?

Salgo de un salto y me dirijo hacia el auto, donde lo veo sacar las bolsas. Se las quito. 

—Yo me encargo.