OBLIVIATE || Hyunlix✔

ღ23

[HYUNJIN]

Soy un maldito imbécil.

Ha pasado una semana y no le he dicho a Felix que he recuperado la memoria. He estado fingiendo que nada ha cambiado. Que todo está bien. Bueno, mejor que bien porque Felix y yo hemos sido inseparables de todas las maneras posibles en los últimos días. He intentado mantenerlo a distancia mientras averiguaba cómo decirle la verdad, pero entonces, en mi cabeza más despejada, recordé lo que hacía mi marido en nuestro tiempo de separación, y desde entonces me siento posesivo.

Maldito Eric.

Sólo quiero un tiempo con él antes de decirle la verdad. Una verdad que me llevaría a tener que desenterrar todo lo que pasó mientras estuvimos separados. Sabía que hablar de Haneul,  lo heriría, y era lo último que quería hacer. Haneul había sido realmente un error. Una mujer con la que me acosté en un momento de debilidad.

Más de una vez, mi subconsciente se burla.

Después del momento inicial, que puso en marcha nuestra separación, estaba devastado por la pérdida de Felix y Haneul estaba allí. Me dejó utilizarla para intentar llenar el vacío. Estuvo mal, fue estúpido y patético, y ocurrió muchas menos veces de las que estoy seguro de que Felix imagina, pero me ahogaba en el odio a mí mismo, en la lástima y en la frustración, además de seguir llorando nuestros abortos, sólo quería un momento en el que no me odiara a mí mismo o a mi vida.

Haneul sí proporcionó ese momento de paz.

Antes de que la vergüenza que me producía acostarme con ella me abrumara aún más.

No estábamos saliendo ni viviendo juntos. Nunca le prometí nada más. La llamé cuando estaba borracho y solo, me escuchó hablar de Felix. Me escuchaba llorar por estar alejado de mi otra mitad. Me dejó estar triste por todo lo que habíamos pasado el año pasado. Pero había sido transparente con ella, por lo que me enfurecía escuchar lo que tenía que decir sobre Felix.

¿Sin mencionar el hecho de decir que la amaba?

Y claro, como soy una nenaza, no he podido refutar todo esto todavía.

Intenté decírselo una vez hace unos días. Acabábamos de hacer el amor y el estaba dormido y calentito, acurrucado a mi lado bajo la escasa luz de nuestra habitación. Tenía las palabras "recuerdo todo" en la punta de la lengua cuando lo oí susurrar mi nombre y luego el suave sonido de su respiración.

Pensé en despertarlo y confesarle todo, pero no me atreví a hacerlo. Sabía que había muchas cosas que teníamos que solucionar una vez que le dijera que lo recordaba todo y, después de seis meses de estar separado de mi otra mitad, estaba deseando volver a conectar.

Me paso una mano por el cabello mojado de forma agresiva mientras la tensión se acumula en mi cuerpo. Empiezo a enjuagar el resto del champú de mi cabello cuando percibo que no estoy solo. Abro los ojos, parpadeando varias veces, y veo una figura al otro lado del cristal. Al instante siento que la tensión abandona mi cuerpo. Limpio la condensación del cristal, despejando parte del vaho para ver a Felix apoyado en el lavabo, dedicándome una sonrisa pecaminosa.

Todavía lleva la ropa del trabajo, un pantalón ajustado que me hizo frotar la polla nada más salir esta mañana y una camisa azul claro que hace que su piel brille. Sus labios están desnudos, pero pintados con algo brillante que me hace desear meter mi polla entre ellos. Abro ligeramente la puerta y le dedico una sonrisa lasciva mientras el hace lo mismo con mi cuerpo desnudo. 

—¿Por qué no dejas de mirar y traes tu precioso culo aquí? —le pregunto mientras paso la mano por mi polla.

Sacude la cabeza mientras se muerde el labio.