Toda tu vida se te fue editando y publicando los libros de los autores prometedores del momento, este trabajo te ha traído reconocimiento y riqueza... Sin embargo, nunca fuiste genuinamente feliz, ya que cuando fue tu momento una editorial malvada c...
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-¿Enserio no me quiere vender?- Dijiste incrédula, era la tercera tienda que intentabas entrar para comprar cosas a tu bebecita tierna y dulce
-Ya te dije que no, no en esta tienda no le vendemos a humanos y mucho menos a horribles mestizos- Dijo el dueño de la tienda de manera tajante mirandote de manera despectiva a ti y a Aurora, quien inflaba los cachetitos en señal de protesta
-Ay por favor, no este es el segundo pueblo que me rechazan- Te quejaste sonoramente, el racismo contra los humanos que hay en este reino no es ninguna broma, con razón la mayor parte de la corte no te quiere -Mira de verdad necesito pañales, medicinas y biberones para mi bebé, por favor véndeme algo, no me iré hasta que lo hagas- Dijiste cruzándote de brazos decidida, acción que tu hijita imito, la pequeña Aurora juraba que en cuanto pudiera escupir fuego quemaría esta tienda
El dueño de la tienda parecía molesto e irritado, realmente se quiere deshacerse de ti rápidamente, así que con una sonrisa maliciosa ya decidió cómo hacer que te vayas.
-Bueno, si de verdad necesitas con tanta urgencia esas cosas, te las venderé- Tu ojos se iluminaron por unos segundos, creyendo que al fin encontraste alguien amable -Son 2,500 madols por todo- Y con eso tu cara perdió la sonrisa
-¡¡2,500 MADOLS!! ¡Pero si apenas tengo 500!- Exclamaste alterada
-¿De verdad? Que pena, pero es por eso que no le vendo a humanos, a los humanos les cobra un impuesto adicional del 35% sobre cualquier cosa que compren en el Valle de las Espinas- Explicó el tendero fingiendo sentirlo por ti -Con 500 madols solo te alcanzaria para los pañales y sabiendo como son el resto de las tiendas de este pueblo, seguro que soy el único dispuesto a venderte algo de mercancía-
"Eso del impuesto es una mentira" Pensó Aurora enojada y mirando con reproche al hada dueña de la tienda "No le agas caso madre, mejor vamos a otro sitio, este tipo te quiere estafar" Aurora intentó extender sus manos y lanzarle una maldición al hombre pero la presión que estaba haciendo solo causo que su cabeza doliera y llorara un poco, tu rapidamente consolaste a tu bebe y miraste al hombre con cierto odio.
-Bien no necesito los pañales de un muerto de hambre como usted, que se ve que no ha tenido ni un solo cliente en años - dijiste en tono serio mirando el lugar de reojo -Se nota que está por cerrar de todos modos, al final del dia yo sigo teniendo dinero y usted deudas- Replicaste segura de tus palabras
-¡Inmunda humana ¿Cómo te atreves a hablarme de esa forma? ¡Tú y toda tu raza con una plaga en nuestras tierras!- Exclamó el hada sumamente enojada
-Ja ¿Una plaga? Si usted y todas las hadas que abandonaron sus formas salvajes desciende de humanos, solo se insultó a sí mismo y su historia como especie- Dijiste alzando la frente -Pero bueno, yo me voy a hacer negocio en un sitio... más respetable y confiable -
"¿Y esa lengua mamá?" Pensó Aurora impresionada, dejando de lado su llanto, el abuelo cuervo tenía razón cuando decía que ella heredó su manera sofisticada y elegante de insultar de su madre.
-¡Tú... Tú...!- Ya el hada se salió de detrás del mostrador y se acercó agresivamente a ti -¡¡Te daré una lección para que aprendas a hablar delante de tus superiores!!- Dijo con la mano alzada
-Oh qué caballeroso, golpear a una mujer que carga una recién nacida, si que enorgullecen al Valle de las Espinas- Dijiste mirando al hombre a los ojos para provocarlo dejando a tu hija atónita y asustada ya que si lo hiciste enfurecer.
Justo cuando parecía que el tendero te hiba a golpear, miraste detras de él un soldado oscuro, tu mente pensó algo rápido y recordaste las cebollas cortadas sacando lagrimas de cocodrilo, recuerdas el juramento de honor de los soldados oscuros y como van con la línea de caballeros medievales clásicos que no dejan una dama desamparada independientemente de la raza decidiste usar esto a su favor -¡¡POR FAVOR SEÑOR NO SE ROBE A MI BEBE NO LO HAGAS!! - y abrazaste a Aurora de manera protectora.
-¡¡¿QUE?!!- Exclamó el tendero sin entender qué pasaba ¿Robar al bebe?.
Aurora mirando al gran soldado que acaba de llegar y las lágrimas falsas de sus madre entendió el show que estaba montando para salirse con la suya, así que ella ayudó empezando a llorar con fuerza y abrazándose a tu pecho, sus gritos eran desesperados y eran dignos de un Oscar en actuación, ya que también eran lágrimas de cocodrilo, fue cuando el caballero se acercó con paso firme a tu llamado de ayuda.
-¡¿Que esta pasando aqui?!- Dijo esta voz pesada desde detrás del casco de dragón, era un soldado realmente alto y hasta intimidante, tal vez un general.
-¡¡AYUDA, ESTE HOMBRE QUIERE ROBARSE A MI BEBE!! ¡¡YO SOLO QUERÍA COMPRAR PAÑALES PARA MI NIÑA, PERO LUEGO ME RETUVO Y ME EXIGIO QUE LE DIERA A MI BEBE!! ¡¡CUANDO ME NEGUÉ DIJO QUE ENTONCES SERÍA POR LAS MALAS!!- Gritaste siguiendo con actuación y Aurora te ayudaba con sus llantos
-¡¡QUE!! ¡¡NO!! ¡¡CLARO QUE NO!!- Gritó de vuelta el tendero -¡Más bien ella esta horrible humana es una ladrona, no quería pagar por mi mercancía y empezó con ese teatrito de hacerse la víctima! ¡¿Además yo para qué querría a una asquerosa mestiza con su sangre sucia...-
-¿Cómo le acabas de decir a la princesa?- Dijo ese soldado con voz aún más pesada y tanto tu como Aurora dejaron los lloriqueos de lado para prestarle atención al soldado, el dragoncito bebé reconoció esa armadura al acto -¿Acaso escuche mal o la llamaste sangre sucia?- Repitió el soldado causándole un escalofríos a los presentes
"Alto... Es cierto, la única máscara o casco que no se puede repetir en el ejército del Valle de las Espinas es la máscara del dragón... Porque solo los Draconia pueden usar esa máscara... Eso quiere decir... Que es el rey" Pensaron tanto tu como la bebé y las dos mentalmente pensaron "ME LLEVA LA..."
