Capitulo 8

175 25 2
                                    

―Es extraño que durante la hora de estudio libre no estés estudiando
―Taehyung giró hacia su mejor amigo, quien lo miraba con curiosidad.
―Dime, ¿quién es tan impresionante para que te haga despegar la mirada de los libros un momento?―Es extraño que durante la hora de estudio libre no estés estudiando

Taehyung sonrió, ligeramente avergonzado por las palabras de Jimin. La verdad era que nunca había sido un estudiante de lo más destacado, pero desde que llegó a ese instituto no hacía más que estudiar como un desquiciado. ¿La razón? Seokjin, por supuesto. El joven sabía que la única forma de estar cerca de su amor platónico era estando en el mismo escalón que él y no había dudado ni un segundo en dejar a un
lado sus videojuegos y comics, remplazándolos por libros de álgebra,
literatura, ciencias e historia.

―Hace unos días le he mandado un mensaje a alguien sin querer ―Confesó. ―Resultó ser un chico simpático, así que hemos seguido hablando un par de veces ―Sonrió naturalmente. Ciertamente, hacer el tonto con el chico de los atrasos le venía bien para liberar el estrés debido a los estudios.

―Un chico simpático ―Jimin alzó sus cejas sugerentemente, la sonrisa ladeada plantándose en su boca. ―Es guapo, ¿cierto? Encontraste a alguien más atractivo que Seokjin hyung, ¿no es así?

―¡No existe nadie más atractivo que Seokjin hyung! ―Mordió su lengua, encogiéndose en su asiento tras sentirse avergonzado. Agradecía infinitamente que ninguno de sus compañeros le estuviese prestando atención en ese instante. ―Yo... ni siquiera sé cómo es él

―Revisa su perfil

―Ya lo hice, él ni siquiera tiene una foto ―Hizo un mohín con los labios,
revisando con tristeza el perfil vacío del menor.

―Hey, ¿y qué pasa si alguien te está jugando una broma? ¿No has pensado en eso? ―El pelirrojo le miró de reojo. ―Oye, ¡que hasta podría ser un pedófilo!

―Te estás montando una buena película, ¿sabes?

―Te ha pedido fotos, ¿cierto?

―¡No lo ha hecho! ¡A él ni siquiera le interesa saber de mí! ―Una mueca
de tristeza se dibujó en labios del pelinegro, quien con dramatismo llevó una mano hasta su corazón.

―Ah, el dolor, el chico sin rostro no está interesado en mí. Vida, ya llévame, no puedo vivir así

―¡Estás siendo un payaso! ―Se quejó, sin evitar soltar una risa luego.

―Vamos, ¿sabes algo de él al menos?

―Dice que tiene 16...

―¡16! Bien, bien ―Sonrió, señalando el celular. ―Ahora pídele una foto

―¡No voy a pedirle una foto!

―¿No tienes curiosidad?

―Sí... un poco. Pero lo espantaré si pido una foto de improviso

―Taehyung, no te recordaba siendo tan aburrido ―Frunció el ceño. ―Ah, espera, tú te volviste aburrido después de conocer a Seokjin hyung, ¡cierto!

―De todas formas ―Se enderezó en su asiento, dándole una mirada filosa a su amigo. ―No me interesa, no es para tanto, preferiría tener fotos de Seokjin hyung

―Oh, y aquí vamos de nuevo ―Jimin se puso sus audífonos, apoyándose contra el escritorio para descansar.

¿Y es que qué más podía hacer? Su mejor amigo lo único que sabía hacer era hablar del guapo e inteligente Seokjin. Está bien, entendía que el chico tuviese un flechazo con el mayor, no obstante, ¿no se cansaba de babear por él? El pelinegro estaba seguro de estar a un paso de comenzar a odiar al presidente del centro de estudiantes sólo porque su amigo no podía callarse un instante su devoto amor por él.

Taehyung, en tanto, se limitó a hacer un puchero, decepcionado de que Jimin le haya ignorado. Volviendo su vista al frente, sus ojos brillaron al encontrarse con la segunda delegada de la clase.

―¡Jisoo! ―La llamó. La muchacha que caminaba en dirección a una compañera, se detuvo de inmediato para voltear hacia él.

―Oh, Taehyung ―Sonrió con amabilidad, acercándose. ―¿Sucede
algo? ¿Tienes alguna duda?

―No, nada de eso. Tan sólo... el número que me has dado la otra vez...

―¡Es cierto! ―La muchacha llevó las manos a su rostro, cubriéndolo avergonzada. ―Lo siento, lo siento, ¡lo siento tanto, Taehyung! Justo ayer
me enteré de que Seokjin oppa hace tiempo ha cambiado su número, realmente no lo sabía

―Oh, no te preocupes, no ha sido culpa tuya ―Le sonrió para tranquilizarla. ―Entonces, ¿de casualidad...? ―La pelinegra negó con la cabeza antes de que él pudiese terminar de hablar.

―Lo siento, Taehyung. Aunque he intentado conseguir su nuevo número, parece que sólo la vicepresidenta tiene acceso a él

―Ya veo... ―Suspiró. ―Muchas gracias de todas formas, Jisoo

―Siento no haber sido de mucha ayuda, Taehyung ―Volvió a disculparse antes de retirarse.

Taehyung volvió a suspirar, entristecido. Jimin, quien no había perdido detalles de la conversación, se quitó los audífonos mientras miraba a su mejor amigo.

―Así que... el chico con el que estás hablando... ¿vendría siendo el
nuevo dueño del antiguo número de Seokjin?

―Aparentemente... ―Jimin chasqueó con los dedos.

―¡De película! ¡De seguro es el destino! ―Taehyung entornó los ojos, deteniendo su mirada en la pantalla de su celular que se había iluminado. Su rostro cobró vida súbitamente cuando al desbloquearlo se encontró con un nuevo mensaje del chico que no era Seokjin.

Una foto. El menor acababa de enviarle una foto del majestuoso cielo azulado lleno de nubes que parecían algodón y un pequeño mensaje que decía "es un bonito día".

Jimin apoyó su mejilla contra su palma, absorto.

―Él... parece ser dulce, de alguna manera ―Taehyung asintió, sin quitar la sonrisa de sus labios mientras escribía.

Kim Taehyung

Tienes razón, chico de 16 años

Es un hermoso día

No Soy SeokjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora