Capítulo 16

183 24 2
                                    

Seokjin suspiró mientras caminaba hacia la sala de juntas. La jornada
escolar había terminado y aún había papeles sobre su escritorio que necesitaba revisar. Una parte de él deseaba saltarse sus responsabilidades e irse a casa, dejándole su trabajo a otros, pero le era difícil pedir ayuda aun cuando se trataba de algo tan pequeño.

La puerta de la sala se abrió antes de que él pudiera hacer algo y una de las delegadas de primero apareció, alzando la mirada con sorpresa antes de sonreír.

―Oh, presidente, buenas tardes

―Buenas tardes, Rosé. ¿Necesitabas algo? ―Era extraño que los delegados se presentaran si no se había fijado una reunión.

―¡No, no! Sólo olvidé algo el viernes pasado ―Golpeó ligeramente su cabeza, sintiéndose tonta. ―Te dejo trabajar ―Agregó luego, haciendo una pequeña reverencia para finalmente pasar por su lado y comenzar a alejarse.

Seokjin la miró con atención, su mente iluminándose en un instante. ¿Y sí...?

―¡Rosé, espera un poco! ―La llamó, la muchacha giró a verle con curiosidad. ―Eres amiga de Lalisa Manoban, ¿cierto? ―La pelirroja asintió automáticamente. ―Ella es amiga cercana de Jungkook, ¿no?

―Oh ―Sonrió con entendimiento. ―¿Quieres hablar de ella sobre Jungkook, Seokjin oppa? Justamente me está esperando ahora, si quieres puedo llevarte hasta donde está ella

El rubio se quedó un minuto en silencio, pensativo. Buscando su teléfono, terminó por hacerle una señal a su joven compañera para avisarle que haría una llamada.

―Seokjinie, ¿sucede algo?

―De hecho, sí ―Presionó sus labios. ―Discúlpame, Jennie, ¿podrías hacerte cargo del papeleo que ha quedado en mi escritorio? Sé que probablemente estoy pidiendo mucho pero...

―Seokjin-ah ―Le interrumpió, riendo suavemente. ―Soy tu mano derecha, se supone que mi papel es cubrirte en caso de un inconveniente. ¿Ha sucedido algo? ―Su voz denotaba preocupación.

―Me ha surgido un asunto familiar... o algo así ―Murmuró. ―¿Lo puedo dejar en tus manos entonces?

―Por supuesto

―Gracias, Jennie, de verdad te debo una

―¡Hmm! Entonces te la cobraré, ¿vale? ¡Ten una buena tarde!

El rubio cortó, soltando un breve suspiro. Ciertamente, odiaba pedir
ayudar, pero por una vez quería ordenar sus prioridades. Y Jungkook
definitivamente era su prioridad ahora, por eso es que no vaciló al momento de pedirle a la pelirroja que por favor lo llevara hasta donde estaba la amiga de su hermanito.

―Ah, Seokjin-ssi, ¿le ha sucedido algo a Jungkookie? ―La rubia se sintió inquieta cuando vio al hermano mayor de su amigo dirigirse a ella.

―Oh, no, él está cumpliendo su servicio comunitario, hasta ahora no ha habido problema ―Sonrió de manera apacible.

―Tan sólo... ―Aclaró su garganta, intentando sonar calmado. ―Me he enterado de que han tenido problemas con unos cachorros, ¿es así?

―¿Hablas del cachorro sin hogar? Hmm, Jungkookie y Yoongi-ssi han
salido todos los días para buscarle una familia, pero no ha habido resultados ―La menor hizo una mueca en sus labios, casi como un puchero. ―Jungkook se veía realmente triste porque no podemos seguir manteniéndolo en mi casa, tampoco queremos que vaya a parar a un refugio

―Ya veo... ―Desvió la mirada, tanteando sus opciones. ―Tú... uhm... ¿me dejarías verlo?

―¡Por supuesto! Tendríamos que ir a mi casa. No hay problema, ¿cierto?

No Soy SeokjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora