Capítulo cincuenta y nueve

7.6K 509 93
                                    

Venus

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Venus

Atravesar una puerta podía significar muchas cosas, en este caso, descubrir la verdad.

Me quedo en un silencio absoluto cuando veo en un rincón de la choza a Mia, encadenada. Ella rompe en llanto. Sorprendida. Asustada. No siento miedo hasta que empieza a negar con la cabeza, temiendo más por mi vida que por la de ella.

—No debiste intentar escaparte con él —susurra mi padre.

En las paredes, detrás de Mía, hay dibujos colgados. Parecen que llevan  ahí.

—¿De quien es todo eso? —le pregunto a mi padre, con los ojos aguados —. ¿Aquí también la tuviste a Lency?

—Ella tuvo otro destino, ni siquiera tuve que convencerla demasiado para que se tire.

Empiezo a temblar. Siento mucho miedo. Niego con la cabeza, mirando a mi al rededor. Escucho un ruido que viene desde el baño.

—¡¿Quien más esta aquí?! —le grito, y de repente se escucha el llanto de un bebé. Me quedo en silencio, miro a mi padre y luego a Mía —. ¿Y eso?

Mi padre entra al baño y cierra la puerta, Mia empieza a llorar más fuerte y tensa su mandíbula.

—¿Es tuyo?—le pregunto.

Mia dice que no ante mi pregunta y agacha la cabeza. Miro nuevamente los dibujos de la pared, me acerco a ellos cuando veo el nombre de Elizabeth junto a un dibujo de una chica sosteniendo a un bebe en brazos. Elizabeth siempre tuvo una particularidad, sabia dibujar muy bien. Hay varios de ese estilo, uno de ellos lleva mi nombre. O el nombre que solo Elizabeth usaba para llamarme a mí.

—Elizabeth no murió esa noche, tu padre la tuvo cautiva todo este tiempo y dio a luz aquí a su bebé—susurra Mia con la voz temblorosa.

Algo de mí hace que mis piernas se aflojen. Niego con la cabeza sin poder creerlo y rompo en llanto desgarradoramente. Siento miedo e ilusión. Solo por un segundo.

—¿Cómo puede ser posible? Yo la vi...—Tengo muchas preguntas. Estoy volviéndome loca—.  ¿Y en donde esta ahora?

Mia traga grueso y responde:

—Un mes después de tener a su bebé Elizabeth intento escapar, tu padre la siguió y volvió al otro día, pero sin ella. Dijo que Elizabeth se había ido para siempre...

Niego con la cabeza. Caigo al suelo, llorando como nunca antes lo había hecho. Maldigo a gritos a mi padre.

Ella estuvo aquí, estaba viva mientras yo hubiera dado lo que fuera para verla aunque sea por ultima vez.

Mi padre sale del baño y se para delante de mí. Le grito hasta que siento que me quedo sin voz.

—¡¿Por qué?! —Intento golpearlo pero no tengo fuerzas —. ¡¿Por qué hiciste todo esto? ¿Maria te incentivo? ¿Ella fue, no?!

¿Qué pasó con Elizabeth Parker?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora