Mi profesor es mi hermanastro!!!

CAPITULO 18

Cuando acabamos con nuestra sesión de besos seleccionamos unas cuantas películas y pedimos unas cuantas pizzas para pasar el día, por la pereza de volver a bajar al salón por lo que nos quedamos en la habitación de Alex, nunca había entrado en su habitación, estaba todo muy bien ordenado, tenia un par de estanterías llenas de libros y en su escritorio tenia montones de hojas, pero si no fuera por eso podría llegar a pensar que no vivía nadie aquí.

-¿Que miras tanto?

-Nada, solo que si no te viera todos los días podría llegar a pensar que no vives aquí-me acurruque un poco más en su pecho y volví la vista a la película.

-Me gusta todo tenerlo todo lo ordenado.

Ninguno de los dos dijo nada y seguimos viendo películas durante toda la tarde, pero llego un momento en el que el cansancio pudo conmigo y me quede dormida en los brazos de Alex, lo ultimo que sentí fue que una manta me tapaba y unos brazos rodeando mi cintura.

*******

Siento unos besos subiendo por mi cuello y una luz que da de golpe en mi cara.

-Levántate dormilona.

-Solo quiero dormir un poco más-me gire para que el sol no me diera de lleno y hundí mi cara en su pecho, pero sentí su pecho vibrar por lo que levante la cabeza y abrí mis ojos para verle sonriéndome-¿Que hora es?

-Son las diez en punto.

-¿Porque me levantas tan pronto?

-Por que ayer una chica me invito a pasar el fin de semana con ella y quiero empezar cuanto antes a pasar el día con ella-me dio un beso en la nariz y se levanto de la cama-levántate y vístete que nos vamos a desayunar.

Me levante de la cama con pereza y me arrastre hasta mi habitación, cogí unos vaqueros y una blusa sin mangas para ponerme cuando saliera de la ducha, cuando ya había acabado baje a la sala y espere a que bajara Alex, cuando bajo ya con todo listo salimos de casa y nos montamos en su coche.

-¿Donde vamos a ir a desayunar?

-A un pueblo que está aquí al lado.

El trayecto fue en silencio, cuando llegamos Alex me cogió de la mano y me llevo a una cafetería que estaba a poca distancia de donde habíamos aparcado el coche, era muy original ya que parecía de los ochenta con discos de vinilo colgados por las paredes y un tocadiscos al fondo de la sala, no sentamos en una mesa al lado de la ventana.

-¿Conocías este sitio?

-Sí, antes venia todos los días que me peleaba con mi madre aquí.

-Es muy bonito y por como huele seguro que la comida esta deliciosa.

-Ya veras como te va a gustar.

-Buenos días,¿ que desean pedir?

-Yo voy a pedir las tortitas de la casa con sirope de arce y un café con leche.

-Yo lo mismo, gracias.

Vi como la camarera nos trajo los platos en unos minutos y me alegre de haber pedido lo mismo que Alex ya que estaba buenísimo, pasamos el desayuno entre risas y anécdotas sin tener miedo de que alguien nos pudiera reconocer ya que este pueblo según Alex muy pocos lo conocen,cuando terminamos de desayunar salimos a la calle y decidimos dar un paseo por la calle.

-Este pueblo es precioso.

-Sabia que te gustaría y esto no es todo- me cogió de la mano y me llevo hasta un pequeño muelle donde te podías sentar y todo lo que se veía era el mar-¿Que te parece?

-Me parece precioso-me senté y me quite las playeras-siéntate conmigo.

Se sentó ami lado y hizo lo mismo que yo, pero el al ser un poco más alto taba el agua con los pies, nos quedamos en silencio durante un buen rato mirando al horizonte y pensar que cunado llegue a casa de mi padre pensaba que iba a ser un idiota egocéntrico y ahora estoy sentada a su lado viendo el mar y pensando que cada día me gusta mucho más, se que no me debo hacer ilusiones pero es que me encanta lo atento que es conmigo y como se preocupa por mi, creo que estoy empezando a sentir cosas muy fuertes por él.

-¿En que piensas?

-En lo maravillosas que son estas vistas.

-Haré como que te creo, pero pienso igual son espectaculares-me gire para darme cuenta de que me estaba mirando a mi haciendo que mis mejillas se volvieran rojas como tomates-me encantas cuando estas sonrojada.

-Eres idiota, no me puedes decir esas cosas y quedarte tan ancho-se acerco más a mi y me beso con lentitud hasta que nos quedamos sin aire- no creas que por un beso me voy a olvidar de lo has echo.

-Bueno creo que es hora de marcharnos si queremos llegar a tiempo a otra sorpresa que tengo para ti.

-¿Más?

-Para ti, mucho más-me lento y me llevo hasta el coche sin dejarme poner las playeras, cuando estábamos al lado del coche saco un pañuelo negro de la parte trasero de sus pantalones-tienes que ponértela,¿confías en mi?

-Sí-sentí cerré los ojos y espere a que acabara de atarme la cinta para girarme a donde se supone que estaba parado-¿Donde vamos?

-Es una sorpresa preciosa-me dio un pequeño beso y me subió al coche-¿preparada?

-Preparada.