5. El volar de los hijos

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Han pasado muchos años, durante ese tiempo, Bills y Wiss tuvieron más hijos, dos hermosas gemelas, de nombres Saki y Lilet, la única diferencia era su cabello rosa, todos juntos con sus primos, eran jóvenes, casi alcanzando la edad adulta.

Bills, Wiss, Champa y Vados no habían envejecido ni cambiado, seguían igual, sabían que pronto sus hijos comenzarían asumir sus deberes de dios, les asignarían su lugar en otros lugares del universo. En ese momento, Wiss estaban terminando de entrenar a sus hijos.

--- Bien terminamos el entrenamiento --- dijo Wiss bajando al piso.

Bajaron los cuatro, algo cansados.

--- Les falta entrenar, Margarita nunca pierdas de vista a tu oponente. Ron falta velocidad. Saki necesitas más fuerza en tus ataques y Lilet falta que te muevas rápido. Aun deben de entrenar.

--- Creo que nunca te vamos llegar a tu nivel, papá --- decía Margarita.

--- Con práctica lo van a logar --- decía Bills, quien se acercaba a ellos.

--- Hola papá Bills --- se acercaban y lo abrazaban.

--- Esperen, cuando se ponen así quieren algo --- decía serio.

Los cuatro le sonreía --- es que ..........., ¿podemos ir a una fiesta con los primos Mez y Vilka?, por favor.

--- ¿Ya le pidieron permiso a Wiss?

--- Si papá, pero falta tu permiso --- decían los cuatro muy ansiosos.

--- No sé --- los miraba --- esta bien, pueden ir.

--- Si, los queremos mucho.

Se fueron arreglar, los cuatro lucían radiantes para la fiesta. Se despidieron de sus padres y partieron.

--- Wiss, ¿a que hora van a volver?

--- Hasta mañana, cercas por el medio día. Me dijeron que se iban a quedar a dormir  en la casa de unos amigos.

--- Eso significa --- mientras levitaba y abrazaba a Wiss por los hombros --- tenemos el día para nosotros --- susurrando al oído en tono seductor, asiento sonrojar a Wiss.

--- Si, eso parece.

Bills aun levitando, se pone al frente de Wiss, quedando a la altura de su cabeza, lo abraza y comienza acercarse a sus labios, comenzando un beso dulce, tierno y lento, poco a poco aumentaban la intensidad de aquel beso, pronto se separaron por falta de aire.

--- Vamos, mi lindo esposo Wiss.

--- Vamos mi querido esposo Bills.

Ambos se fueron al castillo, decidieron ver una película. Wiss se encontraba en la cocina, preparaba algunos bocadillos, Bills traía algunas almohadas de su habitación y otras cosas, llevándolas a la sala. Decidieron ver una película de terror, comían mientras veían la película, Wiss estaba abrazado de Bills y este como si nada, luego se asusto y abrazaba fuerte a Wiss. Después del pequeño susto que tuvieron, Bills se levanto y coloco otra película.

--- Wiss, vamos a quitarnos el miedo con otra película.

--- Bueno, pero que ya no sea de terror --- decía Wiss abrazando una almohada.

--- Te aseguro que te va a gustar --- mientras decía maliciosamente, tomo el control y le puso play.



Wiss y la diosa del futuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora