19. El gigante

321 31 1
                                    

Era de noche, Wiss estaba muy preocupado por Daykin, seguía buscándola volaba, pronto llego a un gran árbol, se detuvo y observaba si la veía. 

--- ¿Donde esta?, mi hija, mi Daykin. Bills, soy un tonto --- golpeo al árbol, causando que lo rompiera y cayera la copa de este al suelo --- es mi culpa, debí decirle la verdad, solo quería protegerla snif, solo eso.

Caían sus lagrimas por su rostro, pronto una luz comenzaba a brillar, aquella luz blanca se tornaba en una luz morada que comenzaba a tomar forma, al fin se vi que era Bills.

--- Bills, mi amor.

--- Wiss no te culpes, te diré donde esta nuestra Daykin --- se acerca y lo abraza, coloca su frente con la Wiss.

En ese momento vieron los kaioshin y kaiosama, quedaron sorprendidos al ver a Bills besando a Wiss, estaban abrazados, poco después veían que se separaban y se abrazaban más, luego desapareció. No podía creer todo lo que habían visto, no había una respuesta, fueron volando hacia Wiss, este sonreía.

--- Tenemos que irnos, ya se donde esta mi hija --- volteaba a ver la luna --- gracias mi amor, mi Bills.

Después se fueron volando, seguían confundidos pero nadie se atrevía a preguntar, Wiss mostraba una sonrisa en los labios, ese camino fue silencioso. Unas horas después, amanecía, Daykin pronto salio la cueva, camino todo el día, vi una gran selva.

--- Vaya que he caminado por mucho tiempo, estoy cansada y hambrienta --- se escuchaba los gruñidos de su estomago --- necesito buscar comida.

Comenzaba a recolectar comida, fue al río que saco un gran pescado, gracias a que Wiss le enseño a cocinar, lo preparaba y encontró fruta, comía mientras pensaba en lo que dijo su padre Bills.

"Fuiste muy injusta, debiste escuchar a tu papá Wiss"

--- ¿Porque mi papá Bills me dijo eso? --- mientras que comía un plátano --- mi papá no me dijo nada, pero en fondo me siento mal, creo que debo de llegar pronto a la ciudad del tiempo.

Seguía comiendo, después de comer siguió con su recorrido, caminaba entre la selva, luego se volvió silencioso ese lugar.

Narra Daykin

Hubo mucho silencio, entre las hierbas se escuchaba pisadas y movimiento. Trataba de ver quien era, pero cuando camine, salio de la nada, una red que me atrapaba, pronto la rompí usando mis garras y salí.

--- Intrusa --- escuche y comenzaron a lanzar flechas, estas al chocar liberaban un gas color rosa, rápido cubrí mi nariz y fingí que me desmayaba para ver quieres me atacaban, escuchaba pasos.

--- ¿Quien ser?

--- No lo se, no luce aquí.

Pronto me levante y aquellos seres me iban atacar con sus lanzas, pero se las quite rápido.

--- ¿Por que me atacan?, así reciben a la gente --- los miraba era ogros de color verde y pronto me miraban a los ojos.

--- Creímos que ser enemigo --- dijo uno de ellos --- ¿como aguantar gas rosa?

--- Digamos que no me afecta gas, digo, el gas no me afecto --- vaya empiezo hablar como ellos, pensé seguir hablando como ellos --- escuchen, yo no ser enemigo, yo ser viajera.

--- Ahh, ¿porque no dicho antes? --- me decían --- acompañar a tribu, sigue.

--- Yo agradecer mucho.

Me sentía rara al hablar así, eran muy simpáticos, pronto vi un pueblo con varias chozas de paja, vi algunos habitantes, me veían muy raro, pues mi piel no era verde.

Wiss y la diosa del futuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora