Miraculous 1: La Desaparición de Ladybug

Pasado Futuro-Parte 1 : El gato marioneta

-Bravo, Chat Noir. Claramente has heredado la magnífica parla de tu padre. La maravillosa verborrea que acabas de regalarnos, casi lo libera también. Pero bueno supongo que hasta aquí nada más debo permitirte extender tu monólogo y me temo que tendrás que formar un dueto conmigo.

Apenas lo ví sentí un escalofrio recorrerme la espalda y con un rápido movimiento me puse entre él y Marinette, así fuese mi padre, nadie la volvería a lastimar, pero él solo se limitó a aumentar el tamaño de su irritante sonrisa y prosiguió.

-No tomes cuidado en mí, aunque quisieses no podrías defenderla de lo que haré, puedes intentar asesinarme si gustas Chat Noir, pero me temo que las ideas son aprueba de balas, algo mucho más poderoso que cualquier ataque, algo más mortífero que la muerte y tan imparable que no importa si la cubres con un escudo de acero. Las ideas por sí solas pueden quebrar el alma de cualquier persona, despedazar sus sueños y traer a la superficie sus pesadillas.

- Está no es cualquier chica...-repliqué con tono amenzador, con una confianza que se basaba únicamente en al fin haber encontrado a Marinette, e incluso más que eso, en que finalmente había encontrado lo más cercano al amor.

-Cierto - dijo con una sonrisa burlona y sin inmutarse prosiguió- Está joven es nada más y nada menos que la poseedora del Miraculous de Ladybug. Ni yo con todo mi poder y perspicacia podría haber quebrado la fe de la persona que la simbolizaba por antonomasia. Almenos no solo....

Y se quedó mirándome en silencio, era confuso, como si me viese y no al mismo tiempo.Para una persona que había asesinado tantas y diariamente torturaba más, tenía una mirada pura, inocente, sosegada, como si no sintiese nada en lo absoluto. Aquel no era un ser humano, aquel no podía ser mi padre...

-Es inútil que intentes descubrir algo en mí- volvió a burlarse como leyendome la mente- Pero bueno no es hora de dilatar más lo inevitable. Gracias por ayudarme a destruir a Ladybug sino fueras tú que eres su última esperanza, ¿Quién sería?...

-¿A qué te refieres?

Mi desconcierto aumentaba en cada  segundo, pero la certeza, o el anhelo, de que aquel no fuese mi padre crecían cada vez que aquel tipo seguía abriendo la boca.

-Así que aún no lo notas. Dime... ¿Creíste que está era una historia donde un escritor dejaba al héroe avanzar libremente como por obra del azar o algún giro de tuerca, abusándose de su calidad de Dios omnipresente? Pues no estabas tan equivocado, sí pasó algo así. PERO ESE DIOS FUI YO. Dejar que Nathaniel se liberase de mi control justo cuando estaba apuntó de matarte, ¿Creíste que fue un milagro? Mi querido niño si yo te quisiese muerto ya lo estarías. Aunque debo reconocer que sí lograste liberar al final a aquel impertinente. Felicidades, puedes ir a recoger su cuerpo al pasillo, creo que aún respiraba cuando le extraje el akuma de su pecho.

Me quedé helado, tanto sosiego en su rostro tras decir lo que acababa de decir me parecía abominante, pero lo que seguiría hacía ver mi camino hasta aquel cuarto de mármol blanco como un paseo de niños... ¿U-Un paseo de niños? A pesar de los cientos de akumas que el poseía había llegado a aquel lugar sin cruzarme con más de veinte... Hasta ese momento no lo había notado. No podía ser que estuviera acorralado, pero mis opciones se acababan y mi pulso se aceleraba agresivamente.

-¿Que pasa gatito, te comieron la lengua los ratones? O es que al fin te das cuenta que ha sido muy sencillo llegar hasta aquí. Pasar por las alcantarillas y que solo te topases con cuatro de mis esbirros ¿Recién te resulta sospechoso?. Él que a pesar de que derrumbaste una pared, por muy escondida que estuviese, y solo fueras recibido por un akumatizado. ¿No te resultó extraño que Alya llegase de la nada y te mostrase un Miraculous sin Kwami? Claro que en esto si no puedo menospreciarte tanto, manipulé sus recuerdos y la hice creer tan fielmente que era una heroína, que te transmitió esa falsa seguridad. Pero superaste mis espectativas cuando te dignaste a dejarla atrás y la hiciste enfrentarse al primer chico que le llegó a interesar, sí que tienes algo de mí. Sin embargo finalmente el pelear contra Nino la liberó momentáneamente de mi control, lástima que vaya a correr el mismo destino que Nathaniel.

Mi cabeza empezó a unir las piezas, todo encajaba perfectamente, cada paso que di había sido calculado por este sujeto. El miedo me inundaba, no podía pronunciar palabra alguna, no había nada que hacer, había sido derrotado...

-Pero claro que tu también contribuiste con tus acciones a que llegasemos a este punto, no pudiste coger a Marinette e irte de aquí, tenías que  quedarte a tranqulizarla... Quizás en cierto modo era claro que lo harías, después de todo eres mi hijo. En un inicio pensé que notarías que era extraño que en vez de ocultar a Marinette en mi hermoso complejo subterráneo, la dejase en la superficie expuesta, pero claro que te dejaste llevar por la oportunidad y el incentivo que te di.

Cuando finalmente terminó retrocedí. Algo no tenía sentido, aún con todo lo que decía, simplemente el capturarme y traerme hasta aquí hubiese bastado. No había necesidad de hacer todo esto. ¿Qué se traía este tipo entre manos?...