-Tranquila, nena. Si yo no estoy enfadado no lo estés tú- el comentario de Connor me tomó por sorpresa, pero sólo a mí, Ely parecía esperarlo.
-¿Qué?- pregunte cambiando mi expresión completamente. Me levanté y lo miré a la cara. -¿Qué cosa dijiste?.
-Yo sabía que vendrían los Baker.
-¡¿Qué?! ¡¿Tengo que recordarte que Ean en primer lugar fue quien ocasionó todo?! ¡Tu mismo dijiste que odiabas al doctor!.
-No te alteres- me dijo Ely. -Ya tuviste un ataque, no te voy a cargar si te desmayas.
-¡Tu también deberías estar alterado! ¿Qué les pasa? No puedo estar tan enojada sólo yo.
-No deberías estarlo.
1...2...3...1...2...3...1...2...3...1...2... Buenas Noches.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
Después de haber estado inconsciente no se cuanto tiempo, comencé a abrir los ojos débilmente y poco a poco.
Estaba recostada en lo que parecía ser mi cama, lo noté por el techo con estrellas pintadas en el.
Decidí quedarme un poco a escuchar disimuladamente lo que decían a mi lado.
Connor estaba sentado en la silla de mi escritorio, Ely lo estába regañando.
-¡Ya estoy cansado de esto! Tengo un tic nervioso por culpa de ustedes dos y sus planes.
-Por eso llamé al doctor, para poder hablar aquí con él sin que pareciera raro. Le diré que debemos terminar con todo esto y simular la operación. -¿Dijo "Simular"?.
-¿Otra mentira? No, Connor, basta de eso.
-Así todo acabará y volverá a la normalidad.
-Tu no quieres eso, sabes que si todo vuelve a la normalidad y dejamos atrás las mentiras, también ella volverá a tratarte como lo había hecho desde que nacimos.
Connor se levantó de la silla y, sin ningún problema, caminó hacia el closed y sacó una manta sólo buscándola con la vista y después la puso sobre mí. La furia me invadía y tenía ganas de saltar de la cama y golpearlo.
-Espero que sólo nuestro noviazgo no cambie- dijo.
Me arropó y levantó su rostro hasta el mío, cuando se dio cuenta de que mis ojos están abiertos, palideció.
-Nena...
No hay duda, él me está viendo.
-¿Cómo?- pregunte en voz casi inaudible.
-Demonios- se lamento Ely.
Me incorporé y quité de un jalón la manta que me cubría.
-Son una basura.
-¡Nina!...- no los deje decir nada, porque sabía que sólo me harían enfadar más de lo que ya estaba y me lastimaría más saberlo.
-¡¿No estas ciego?!- grite y rápidamente Connor me cubrió la boca.
-No lo grites, los demas aún no lo saben- trate de irme pero me sostuvo quedando en mi espalda sosteniendo mi cintura y cubriendo aún mi boca.
-¡Sueltala, tiene derecho a enfadarse!- le gritó Ely.
-No conmigo- el bajo un poco la voz y me comenzó a hablar más calmado. -Nena, se que estás enojada, tanto que tengo miedo de que te desmayes de nuevo así que por favor respira y no te alteres...
Le dí un pisotón fuerte, él me soltó y le dí un codazo en el estómago para después darle un rodillazo en su zona baja aprovechando que estaba doblado por el golpe en el estómago.
-Mientras más me digas que me calme, más me voy a enfadar- le advertí señalándolo en el suelo.
-Pordoname- me dijo apenas con un hilo de voz.
Suspire.
-Yo...yo me sentía culpable por comenzar a llevarme mejor contigo sólo porque te veías muy mal...por que te tenía lástima pero...pero tú también tenías tus propios planes, ¿No?.
-Nena...
-¡Hice un plan para hacerte sentir mejor haciendote creer que te amaba y terminé enamorandome de verdad!- subí la voz y hablé con desdén. -¿¡Tienes una idea de lo que siento ahora, Connor!?.
Suspiró y se pasó una mano por el rostro.
-Ely me lo dijo. Lo sabía desde el principio...
-Entonces decidiste aprovecharte de eso, ¿Verdad? ¡Claro, es lo que haces siempre!.
-Tienes que calmarte, yo...
-¡¿Qué?! ¡¿Vas a decirme que lo puedes explicar como en los libros?! De acuerdo, te escucho...- me miró y en su cara ví que no lo haría.
-No puedo- se levantó lentamente.
-¡¿Por qué?!...
-¡Por qué no se como decírtelo sin que suene egoísta, Nina!.
Ah, no. A mi no me gritas, patán.
Cerre mi puño y con todas mis fuerzas, lo golpeé en el rostro, justo en la nariz.
-¡¿Estas loca?!- gritó Ely cubriéndose la boca.
-¡Callate! ¡Callense ambos! ¡Además de mentirme, te das el lujo de gritarme y ponerte a la defensiva por que te pido explicaciones, imbécil!- comencé a gritarle. -¡Pues no me expliques nada ahora!.
Connor se giró de nuevo a verme después de estar mirando a su costado por el golpe.
-Carajo- dijo viendo la sangre. -Nina, yo se que estás enfadada. Perdoname, no hay razón para que hagas esto...
-Creí que sabías que no soy la típica chica delicada que llora cuando le mienten...NO LO SOY- dije resaltando cada palabra. -Supongo que estarás feliz ahora que me recordaste por que no habíamos sido más que enemigos.
-No digas eso, jamás lo fuimos y aunque me rompas la nariz millones de veces no lo seremos jamás...
-Vale la pena intentarlo- me acerqué a él con mi puño cerrado en un costado pero él solo me miró a los ojos sin moverse.
No tenía caso volver a hacerlo y me partía el corazón ver su mirada y saber que todo este tiempo en realidad sólo fingió necesitarme.
Me giré con toda la furia acumulada y mire a mi mellizo en el marco de la puerta con cara de susto.
-No vas a golpearme, ¿Verdad, Nina?- dijo temeroso.
-No me tientes, Ely.
Su mirada se llenó de angustia. Acababa de ver que en realidad estaba destrozada.
-Hermanita...- no pude contener las lágrimas entonces.
Me cubrí la boca con ambas manos y comencé a llorar mientras salía lo más rápido que pude de esa habitación.
YOU ARE READING
Que Seas Mis Ojos
RomanceLa familia de Nina Stobbe y Connor Bosh han hecho todo lo posible para que sus hijos se traten como hermanos, ya que desde hace muchisimo tiempo, ambas familias conviven como una sola. Pero el fallo para su harmónica convivencia es presisamente ese;...