Capitulo 1

4K 51 9
                                    

—¡No, mamá! ¡Por favor, no! —rogó Ashton apunto de tirarse al piso y patalear—. Haré lo que sea, lo que sea, pero no...

—¿Tú piensas que te vamos a estar perdonando todas tus estupideces y que puedes andar por la vida haciendo lo que te plazca? –lo interrumpió mi mamá, hablando con esa voz irónica suya y estaba segura de que estaba mirándolo como si estuviera estúpido. Me tapé la boca para contener una carcajada. No vas a ganar esto, Ashton. 

—Todo esto porque no soy como tu bebita consentida, claro, ella siempre hace lo que su mami le ordena y yo sólo soy el rebelde no deseado —lloriqueó, haciéndose la víctima de nuevo. Desde que a mi mamá se le salió decir que él fue una "sorpresa" ha estado repitiéndoselos de este modo cada vez que le dan la oportunidad. 

Me asomé para ver la reacción de mi mamá, ella lo estaba mirando con ojos llenos de rabia a punto de desencajarle la cara de una cachetada, que sinceramente ya se tenía muy bien merecida. Sé que sólo se contuvo al ver los ojos llorosos de Ashton. Pero esta vez no estaba dispuesta a cumplir todos sus caprichos, al menos esperaba que no. 

Sacó de su bolso un sobre y se lo entregó al asno, salí corriendo a mi habitación cuando mi mamá se levantó de la cama. Esperé unos minutos y fui lo más rápido que pude a la habitación de mi hermano. 

—¿Que demonios quieres? —preguntó enojado, leyendo los papeles con un ceño demasiado fruncido. Me senté a su lado y me estiré lo máximo que pude tratando de leer pero movió los papeles y me miró mal.

—Calmado hombre, no te desquites conmigo por algo que tú solo te buscaste.

—Esto es pura mierda. Pura maldita mierda —se quejó aventando los papeles a la cama con furia. Puse los ojos en blanco y me recosté recargando mi peso en mis brazos—. No entiendo por qué me quieren mandar tan lejos, que me metan a la puta cárcel y así no gastan tanto. 

—Recuerda que eres el no deseado, tenerte en un colegio caro es mejor visto por la sociedad —me reí cínicamente ante su cara, le arrebaté los papeles y le di una mirada rápida a la primera hoja rápidamente—. Espera... ¿Inglaterra? ¿Te van a mandar a Inglaterra? 

—Norte de Inglaterra, idiota —me corrigió Ashton, pero yo estaba demasiado conmocionada. 

Ir a Inglaterra siempre había sido mi mayor sueño, el único, y que mi estúpido hermano descarrilado del buen camino fuera como castigo era algo muy injusto. Muy, muy injusto, tomando en cuenta de que yo me he portado muy malditamente bien desde que tengo memoria para que me regalen un viaje.

—Dime a quien le tengo que pegar para que me manden a mi también. Quiero ir.

—Es para puros hombres ¿No sabes leer?

—Si puedes entrar tú, excusa de hombre, puedo entrar yo también. 

—No, no, no... que seas marimacha no te hace hombre —se agarró su asquerosa entrepierna y se rió—. Te faltan estos. 

—Ya, es enserio Ashton, tú sabes que siempre he querido ir a Inlgaterra. 

—Y tú sabes que siempre me he querido tirar a tu mejor amiga, pero eso tampoco va a pasar. 

—Mira, cierra la boca un segundo y escúchame: Voy a ir contigo, y tú me vas a ayudar a engañar a mis padres —ordené decidida. Ashton me miró confundido y luego soltó una carcajada.

—¿Y qué pretendes, niña estúpida? ¿Piensas ponerte un bigote y arrancarte tu busto falso? Escuela para HOMBRES —remarcó la última palabra.

—Por favor, como si fuera tan difícil hacerse pasar por hombre. Me pongo un calcetín en el pantalón, un gorro que cubra mi cabello, pongo cara de idiota, y nadie se dará cuenta.

—Mira que la cara de idiota ya la tienes —se burló. Después de un segundo dejó de reír e hizo una mueca. yo estaba totalmente decidida y él sabía que no iba a cambiar de opinión. Se acercó a mí y estrujó mis cachetes –¿Estás hablando en serio?

—Claro que sí, sabes que yo no me ando con rodeos –me quedé pensando un segundo. Era una idea demasiado tonta y arriesgada, lo sabía. Pero el que no arriesga no gana —me voy a Inglaterra contigo y eso es seguro.

The Perfect PlanWhere stories live. Discover now