Una Nota Para Dos

3.

Ya había llegado al parque y empecé a caminar y a pensar en lo que me había pasado, tenía que superarlo, dar por hecho que él ya no volvería y cumpliría esa promesa que alguna vez hizo, pero no podía, simplemente me quedé con ese recuerdo, aunque intenté superar esas cosas, esos momentos, esos traumas, no podré ya que siempre estarán allí para atormentar me ya sea en pequeños fragmentos pero seguirán allí.

Hoy era él día donde se cumplían esos 10 años sin él, lo sé ha pasado mucho pero simplemente me hacía falta sus malos chistes, sus consejos, era mi mejor amigo y se fue, se suponía que sería la misma rutina de siempre pero vi en mi madre un destello de esperanza, una mirada que decía hoy será distinto, hoy todo cambiará, pero simplemente no se podía, siempre habrá algo que nos haga volver al pasado y recordar todo de nuevo.

«Tranquila ya llegara alguien que cambie tu vida, que nos devuelva la alegria que te arrebataron y que te ayude a olvidar todo.»

Decía mi conciencia, pero yo ya no quería a nadie más en mi vida, ya no quería aferrarme a alguien y que después de un tiempo la vida me lo arrebata sé.

A veces pensaba en que hubiese pasado si todo eso nunca hubiese pasado, quizás ahora tendría una vida un poco chicle, tendría una familia feliz, muchos amigos, a una enemiga que me tratase mal, un novio... En fin una vida un tanto chicle, pero el destino no lo quiso así, simplemente me tocó lo malo, lo doloroso y un tanto difícil, pero si así lo quiso la vida es por algo ¿no?.

Después de casi una hora y media pensando y asimilando todo me dispuse a caminar para ir a mis clases de violín, era lo único que me ayudaba a olvidarme de todo aunque solo fuese un rato pero me ayudaba, me hacía recordar a mi padre pero a la vez me olvidaba de ese día y solo recordaba los momentos donde mi padre y yo nos poníamos a tocar el violín felizmente.

(...)

Al llegar al estudio saludé a Eduardo mi profesor de violín y al igual que todos me saludó un tanto sorprendido pero luego dio inicio a la clase, sería lo mismo que en el estudio de ballet, solo que no improvisaremos sino que expondremos lo que cada quien escogió.

Lo mismo de siempre, todos habían pasado, algunos realmente tocaron genial y sus melodías era magníficas hacían arte tocando sólo unas cuerdas de un simple objeto era lo que más me encantaba, cada melodía, cada expresión, cada sentimiento encontrado, me gustó cómo cada quien se expresaba de acuerdo a su personalidad o sentimiento.

Ahora seguía yo, última como siempre, me puse un poco nerviosa ya que habían grandes melodías y las mías no sabría si eran buenas.

Pase al centro, saque mi violín de su estuche, lo ajuste de acuerdo a como lo tomaría, afine un poco las cuerdas, lo puse sobre mi barbilla, tome del arco y empeze a tocar suavemente hasta que cada vez subía más el tono estaba tocando una de mis canciones favoritas Clóset Don't Let Me Down.

Cada nota, cada tono y melodía me encantaban​, realmente lo disfrutaba y recordaba cada fin de semana con mi papá tocando el violín a nuestro estilo, sentía que solo era yo y nadie más estaba y me sienta un tanto​tranquila, sin recuerdos malos solo buenos, disfrutaba cada momento en el que tocaba el violín y no podía mantener mi pie derecho quieto y en eso vino un recuerdo.

°°Flashback°°

La pequeña disfrutaba ver a su padre tocar del violín tan tranquilo, tan relajado ella se preguntaba ¿como? Cómo podía estar tan quieto con tan maravillosa melodía.

—Te toca Sarah. — Dijo su papá al terminar de tocar el violín. — Es tu turno pequeña, sorprendeme.

La pequeña asintió y paso al centro de la sala, ajusto el violín y seguido lo posó en su barbilla y empezó a tocar su melodía favorita en eso llega su madre y se posa alado de su esposo disfrutando de tan grata melodía.

La pequeña no pudo estar tranquila por tan maravillosa melodía y empezó a bailar ballet al compás del violín, tocaba y bailaba al mismo tiempo, puso en práctica algunos giros de ballet hasta que dio por último la última nota e hizo una reverencia y así empezaron a aplaudir sus padres.

—Esa es mi pequeña estrella siempre sorprendiendo a uno y brillando como nunca. — La halagaba su mamá y la pequeña solo sonreía satisfecha ante tal arte que ella había hecho.

—Fue hermoso luz. — Su papá la llamó por aquel apodo que a ella le encantaba. — Me dejaste sin palabras pequeña, siempre rompiendo las reglas de estar quieta pero esta vez me sorprendiste. — Decía tocando la punta de la nariz de la pequeña.

Su papá cargo a la pequeña entre sus brazos y su mamá la llenaba de besos y halagos y ella solo reía.

°°Fin Del Flashback°°

Una lágrima se me había escapado al recordar tan hermoso recuerdo pero no deje de tocar, ya no era la misma ahora me quedaba quieta cada vez que tocaba, pero esas ganas de moverme al compás de tal melodía no faltaban, pero no salía, simplemente no me encontraba segura de hacerlo y el resultado era mover mi pie derecho al son de la música.

Al terminar, el estudio se llenó de aplausos, no entendía el porqué si no lo había hecho como a mí me hubiese gustado pero solo sonreía y decía un leve gracias, después Eduardo se acercó aplaudiendo me y yo negué y le di un abrazo y el lo acepto y me aferró a él.

—¿Te encuentras bien Sari?. — Pregunto preocupado.

—A la perfección. — Le sonreí y el negando dejo un beso en mi frente, lo considero mi familia, él era el mejor amigo de mi padre y como un tío para mí.

~•~

¡Hola Chic@s! La verdad es que ando muy inspirada últimamente que me tomo mi tiempo para hacer de cada capítulo algo maravilloso.

La melodía que toco Sarah en multimedia. 😉♥

¿Que les pareció?
¿Les gusto la melodía?

**Arco: Palo que se usa para tocar el violín.**

¡Hasta el siguiente capítulo lectores!💖💖