8.

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Hoy por fin ya era lunes, después de que terminase las clases tome mi rutina de siempre, había asistido a ballet pero Juno me había dicho que no habrían clases para el estudio A ya que estaría viendo a nuevos integrantes para el estudio en general, desde el grupo minis hasta el estudio A, así que ahora me estoy dirigiendo a el estudio de violín.

Pero antes de eso primero hize una parada a Starbucks.

—Hola Sarah, ¿que tal tu semana?. — Dijo Steven sentándose enfrente mío.

—Lo mismo de siempre, pero el lunes llego un chico Roma, Juan, Nyal, Carl, Ryan. — Chasqueo mis dedos tanto que se sobresalto. — Lo único que hace es sacarme de quicio y acercarse a mi.

—Primero que nada rubia, Roma no es un nombre es un país y segundo ay Sar aprende a no ser tan fría con personas nuevas, tienes que olvidar tus malos momentos y vivir el ahora sino luego será tarde.

«No vez que la niña es alérgica a los humanos.»

—Lo intentare, pero no quiero personas nuevas en mi vida con Shar, Asher y tu me basta. — Dije y acto seguido se hizo el ofendido y pude divisar una triste sonrisa. — No, no quise decir eso, osea con ustedes es más que suficiente, con ustedes es mucho. — Okay lo estoy empeorando. — Quiero decir, estoy mejor con menos personas, siento que si dejo que más personas estén en mi vida al final les tomaré mucho cariño y luego se irán de mi vida, como lo hicieron ellos y realmente me siento cómoda con ustedes tres — le sonreí y luego mordí mi labio —. Y por cierto, ¿tú qué sabes? Roma podría ser también un nombre.

—Pequeña te entiendo y tú lo sabes, cuando perdí a mi hermana realmente fue devastador pero simplemente seguí, ella no hubiese querido que cambiase, que fuéramos distintos por su partida. — Tomo mis manos. — No soy nadie para obligarte, pero deberías hacer lo mismo, dejar todo en el pasado y concentrarte en disfrutar el ahora, dejarte conocer nuevas personas, vivir la vida, ella no hubiese querido que estuviésemos así, ella se fue,¿la sigo extrañando? Si, pero sabemos que no le gustaría que desperdiciemos nuestras vidas al igual que tu padre, él hubiese querido que siguieras siendo aquella Sarah llena de colores hermosos en su vida.

Decía Steven acariciando mis manos con suavidad y cada palabra que decía le prestaba sumamente atención, pero él no comprendía que realmente quería seguir siendo la misma Sarah que alguna vez fue feliz, pero para mi era complicado, tal vez soy muy dura con él a pesar que ambos habiamos pasado por lo mismo pero simplemente no podía hacer volver a aquella Sarah.

Sin darme cuenta ambos teníamos los ojos cristalizados, entonces fue ahí cuando varias lágrimas de cocodrilo habían caído de mis ojos y resbalado por mi mejillas rojizas, él seguía mirándome fijamente y con delicadeza limpio las lágrimas que se me habían escapado con las yemas de sus dedos, después unas leves lágrimas resbalaron por sus tiernas mejillas color carmesí, y sabía el porque, le había hecho recordar a su hermana al igual hize que algunos recuerdos volviese de ella a nosotros, ahora era yo quien acaricia su manos, después lo solté para limpiar aquellas gotas que se habían escapado con mis delicados dedos.

Después de eso ambos respiramos profundamente, se que él es débil al igual que yo pero simplemente no le gusta que lo vean de esta manera, solamente yo lo había visto así al igual que él me había visto a mi, lo había visto en sus cuando realmente se derrumbo, como estaba tan roto aquél día, lo vi hasta en sus peores momentos, al igual que él me había visto a mi, él estuvo mi padre se fue, cuando yo lo necesite y después de la partida de su hermana lo apoye, nos apoyos, le di consejos los cuales para mi eran difíciles de cumplirlos, siempre nos hemos apoyado mutuamente.

Después de un silencio decidimos levantarnos para después darnos un gran abrazo, esos abrazos que tanto hemos necesitado ambos, nos limpiamos nuestras mejillas para después reír levemente.

—Muchas lágrimas por el día de hoy o por todo el mes. — Reímos. — Muy bien señorita, ¿que va a pedir?.

—El Starbucks de siempre, con mucha crema y jarabe de chocolate, en pocas palabras como tu sabes prepararme lo.

—Que exigente que me saliste muchacha. — Reímos. — Muy bien en un momento le traigo su pedido.

—Okay, limpia te esa cara que espantaras a los calientes — ríe levemente —, mientras yo iré a lavarme mi cara.

—Que te pasa, tu eres la que asustara a mis calientes. — Le di un leve golpe para después estallar en una carcajada, aquellas risas sinceras y con alegria.

Después él se fue a preparar mi pedido y yo al baño a lavarme mi cara, él siempre sabia como cambiar rápidamente un momento triste a uno alegre, siempre sabía como sacarme una sonrisa a pesar del momento que estuviésemos viviendo.

(...)

Después de un rato él vuelve y con mi Starbucks.

—Tome señorita su Starbucks. — Tome mi Starbucks y le di un sorbo.

—¿Cuanto va hacer Steven?.

—No te preocupes la casa invita. — Me guiño el ojo y yo negué.

—¿Hablas enserio Steven?, no me niego siempre es lo mismo, toma. — Le mostré el dinero pero el nego. — Demonios Steven, como se supone que ganes dinero si siempre me dices la casa invita. — Hago una rara imitación de el.

—No lo aceptaré, el jefe esta de acuerdo. — Bufo.

—Tu y tus telarañas, toma, esto es propina no paga así que tienes que aceptarlo. — Bufa y a regañadientes toma el dinero. — Ya se me hara tarde, tengo que irme adiós.

—Adiós Sar. — Le doy un beso en la mejilla como forma de despedida y el hace lo mismo, después de eso salgo del lugar para retomar mi camino hacia el estudio.

~•~

¡Hola babys! Otro capitulo ante ustedes ¡¡wuuu!!. 🙆🎉🎊

¿Les ha gustado el capitulo?
¿Creen que Sarah deje de ser tan fría con las personas?
¿Que piensan sobre Steven?

¡Nos vemos en el siguiente capitulo lectores!💖💖

¡Nos vemos en el siguiente capitulo lectores!💖💖

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Una Nota Para DosWhere stories live. Discover now