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Pasen por la nota de abajo.

~•~

La noche continuó, Steven y yo nos integramos un rato después de escuchar el grito triunfante de Aarón. Todos nos encontramos rodeando la fogata con una lejanía adecuada para evitar accidentes, unos sentados en troncos y otros como yo en cómodas sillas, yo estaba rodeada de mi manta mientras escuchábamos anécdotas, malos chistes por parte de Mike y cenamos.

—¡Bien! Ahora todos guarden silencio porque ¡ES MI MOMENTO DE BRILLAR! — Exclamó Dylan con sus manos haciendo un movimiento al estilo jazz y con una sonrisa en su rostro como costumbre de él. — Vaya, vaya ¿Ahora por dónde empezar?.

—¡Por el inicio, sopenco!.

—¡Silencio he dicho! Déjenme brillar par de envidiosas — les saco la lengua a todos —, bien. Recuerdo una vez en el centro comercial, estaba con unos amigos y amigas, entonces a uno de mis amigos le llamó la atención una chica y como era de esperarse de él se le acercó a hablar para coquetear le y lo que yo hice — froto sus manos con una sonrisa, — lo jodió por completo. Él anteriormente me había quitado algo muy importante, mi helado — no pude evitar reír por aquello, el rubio me fulminó y guarde nuevamente silencio —,  y al mirar su plan con la chica obviamente mi lado vengativo salió de su escondite, así que me acerque a él, salude normal a la chica y le dije a mi amigo "vuelvo en un momento amor" y le di un beso, salí caminando casualmente como si fuera lo más normal de mundo.

Hubo un momento de silencio donde solo se escuchaban los grillos y las hoja de los árboles golpearse entre sí al ritmo del viento pero no duró mucho pues las risas hicieron presencia y obvio yo no me quedaba atrás, risas nada disimuladas, parecíamos tener un ataque de epilepsia porque vamos, eso sí fue chistoso.

—¡Oh por la comida! ¡Me imagino... La reacción de tu amigo... Y de la pobre chica! — Dije entre risas mientras algunos me daban la razón y otros seguían riendo incluyendo a Juno y a mi madre.

—¡No me esperaba eso!.

—Espera... ¿Eres gay?.

—¡Nunca se me hubiera ocurrido eso!.

—¿Le juegas al otro equipo?.

—¡Me mato!.

—¿Le diste la vuelta a la tortilla?.

—Hubiera dado lo que fuera por estar ahí y ver todo en vivo y directo — le dimos la razón a Matwen entre risas.

—¿Quemaste el arroz?.

—Creo que está anécdota fue la ganadora de ganadoras — opina Mackenzie riendo.

—¿Te gustan los machos pechos peludos?.

—Gracias, gracias — se pone de pie Dylan y hace una reverencia —, esta sí es basada en hechos reales público ¡¿Y mi Oscar?!.

Sharpay se levantó rápidamente y corto una rama con muchas hojas en ella y se la paso al rubio para después volver a su lugar.

—Gracias, gracias — el chico se limpio unas lágrimas falsas con una hoja.

—Dylan... — lo llame y él me chito.

—Dejame, este es mi momento... Quiero agradecer a mi madre por tomar todas sus vitaminas y crear a este hermoso rubio — siguió limpiándose con la hoja sus lágrimas falsas —, también a mi amigo que si no fuera por él y mi venganza ¡No hubiera llegado tan lejos! — alsa la rama y los chicos aplauden.

—Dylan es una rama...

—¡No seas envidiosa pequeña rubia! Tranquila, algún día tendrás uno de estos — rodé los ojos con diversión y este empezó a rascarse las mejillas —, luego caminaremos a la tiendita de la esquina y nos pedirán autógrafos cada que nos vean, solo espera tu premio, pronto llegará... ¡Ay! — Siguió rascándose.

Una Nota Para DosWhere stories live. Discover now