Changed my fuckin' life - #FanFic

Capitulo 9: Solo un beso.

Mandy Williams.-

-  Harry Styles –apreté la mandíbula para evitar reír pero el pestañeó varias veces y no pude evitarlo- no será bueno.

-  No pasará nada, vamos, nadie sabrá –sonó relajado, definitivamente esto era solo un juego, uno en que temía jugar.

-  Es de locos…

- Tú estás loca, yo lo estoy –hizo un gesto con la mano aludiendo a lo obvio- solo uno.

- ¿Estás rogando Hazza? –Me sorprendí- está bien. Solo UNO.

Estábamos frente a frente, sin pudores, no sabía qué hacer, sus ojos me miraban fijo luego a mis labios y sonreí contagiándolo, realmente no sabía lo que estábamos haciendo pero no tenía importancia, era solo un juego, uno de curiosidad. Me tomó por el cuello para que evitara escapar, no pensaba hacerlo de todas maneras, ya estaba metida hasta las patas en esto y no tenía escapatoria.

 Debo confesarlo, siempre quise besar a Harry, tenía unos labios apetecibles, sensuales y más si estaba sonriendo, justo como lo hacía ahora, coqueto, divertido. Pero ya no podía mirarlo con otros ojos, me obligué a mi misma a verlo solo como amigo y funcionó de lo mas bien, no me quejo, si pasó así fue por algo ¿no?

- Tonta –susurró justo antes de que nuestros labios se unieran. No me moví lo observé, si porque no cerramos los ojos, no habían sentimientos involucrados, solo roces, tacto, esto era solo de piel.

Acarició mi mejilla con su pulgar, acercándome más a él. Sentí el suave tacto te su lengua en mis labios, estaba pidiendo permiso para profundizar, y no lo dejé, quise inspeccionar primero yo, el exterior, dulce por la palomitas de maíz, tenía un sabor rico. Capturé su labio inferior y succioné antes de morderlo, mi amigo se alejó y rió.

-  Listo –saboreé por inercia mi boca- ¿feliz?

-  Y adolorido ¡eres tan bruta! –Tocaba varias veces su labio en busca de sangre- me debes dos, Mandy… y me las pagarás caro –fue a la cocina en busca de hielo.

-  Asume las consecuencias, tú querías besarme –me encogí de hombros y luego me acomodé en el sillón, recostándome y tapándome con una manta.

-   Me vengaré –volvió con un cubito de hielo y un paño- no me veré sexy.

-   No eres sexy, Styles –cerré los ojos- ya duérmete.

-  Hazme un espacio –rogó.

-  No, vete a la tina –reí y extendí mis extremidades abarcando todo el espacio para que no cupiéramos los dos- hablo en serio.

-   Me debes tres, entonces –escuché sus pasos alejándose.

.

El olor a tomate me despertó, había música a bajo volumen y risas venían desde la cocine, Me dispuse a pararme e ir a asomarme por la habitación de Aby y la de sus padres y no encontré a nadie, me fui descalza a la cocina. El almuerzo estaba listo, con ensaladas y jugo natural incluido. Un momento ¿el almuerzo? Me salté el desayuno…

- ¿Qué hora es? –Todos giraron a verme- Buen día.

- Son… –Niall miró su reloj y entre risas dijo- las 16:15.

- Dios, ¿tanto dormí? ¿Por qué no me despertaron? –Tomé una manzana verde y la masqué- ¿Quién cocinó?

- Te veías tan linda durmiendo –dijo con un tono de ironía el chascón de los rizos- ya me debes dos.

- ¿De qué hablas? –Torcí el gesto entendiendo algo lento a lo que se refería- Styles…

Corrí al baño y al mirar mi reflejo en el espejo me asusté, tenía la cara rayada, llena de manchas y groserías de todo tipo –tapé mi boca asombrada y queriendo reír- Harry era un tonto, por suerte solo ellos me vieron. Lavé mi cara con agua abundante y jabón y, salí a encararlo. Lo atrapé desprevenido un hundí mes dedos en sus costillas haciendo que saltara, giró y lo primero que vi fue su boca, con el labio dañado y un poco morado –inevitablemente recordé lo que habíamos hecho- y no pude decirle nada. Niall y Abigail nos observaban confundidos mientras ponían la mesa para comer.

-  Complicidad –dijo interrumpiendo el grato silencio que había, Aby estaba sentada en el suelo, en su habitación, solas, y yo en su cama con el notebook- eso es lo que hay entre ustedes…

- ¿Quiénes? –me demoré en procesar, le prestaba más atención a mi conversación por chat- ¿Hazza y yo?

- Si, envidio eso… -tomó un frasco color púrpura y empezó a pintarse las uñas- ¿crees que alguna vez se fije en mi?

-  Claro –me dio una puntada en el pecho, anoche había olvidado por completo lo que mi amiga sentía por el muchacho, lo del beso no podría contárselo nunca- Hablaré con él si quieres.

- Sería lindo –se sonrojó, en serio le gustaba y me sentí la peor amiga en la Tierra.

Dejé de lado el computador y la observé, ella sonrío nerviosa, no sospechaba nada y así se mantendría –solo fue un beso, pasó y no volveré a pensar ni hablar de ello- Nos quedamos un rato mas así hasta que empezó a oscurecer, ya tenía que regresar a casa, me despedí de ella y al abrir la puerta de su departamento me encontré con fotos pegadas por todas las paredes, de mi con esa horrible cara que mi amiguito me había pintado, a medida que avanzaba las iba quitando de la pared, una pareja de abuelitos las vio y luego me observó para ponerse a reír sin disimular. Llegué hasta el ascensor y había una nota “Me debes UNA, con humor: H” –me las pagarás, Hache- pensé.

          La noche estaba fría. No andaba mucha gente en la calle, es domingo, y todos deben estar en sus casas disfrutando de algo caliente mientras ven televisión en familia, leen algún libro, chatean o simplemente no hacen nada, como yo. Tiré a la basura las muchas fotos que había recolectado a lo largo del pasillo en casa de Aby y con las manos escondidas en los bolsillos de mi chaqueta empecé a correr para llegar más rápido a mi casa. Mis pulmones apretaban mi pecho y tuve que parar a respirar. Lo veía caminar, no tan abrigado como yo, un coquetón largo, pantalones y zapatillas, como solía vestirse. Intenté sonreírle y no debí hacerlo bien pues el también me sonrió.  

-  ¿Dónde vas? –pregunté con curiosidad, sin siquiera saludarlo.

-   Con Amy, te veo luego – Zayn besó mi mejilla y siguió caminando.

Volteé para verlo entrar en uno de los pasajes, me quedé parada unos segundos y seguí caminando –suspiré y apreté los puños- Me sentí extraña.