Capitulo 21: Cita.

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Mandy Williams.-

¿Soy la única que se da cuenta de la bipolaridad de Malik? ¿Qué no es raro que un día intente besarme y al siguiente, me invite a salir con su… cuñado? Honestamente no lo entiendo, ni quiero entenderlo, tampoco quiero dejar que pase, que juegue con mi cabeza y confunda mi corazón ¿Quién se cree que es? Es más ¿Quién cree que soy? ¿Cómo es que he permitido que todo esto me pase? Harry me lo advirtió y como siempre no le hago caso, por primera vez en mi vida he dejado que mi corazón me guíe y nada bueno está pasando.

Ya era hora, me arreglé un poco antes de ir al hospital a ver a Amy. Con unos simples jeans, mis Vans celestes, una polera larga blanca y el abrigo gris encima, salí al encuentro. Tomé el autobús que me deja enfrente del Hospital Central y fui hasta la sala de espera, entré con vergüenza caminando lento hasta donde estaba la recepcionista, una señora de mediana edad, vestida de blanco y cabello tomado. La saludé y di el nombre de mi hermana, buscó entre sus registros y me miró.

-Lo siento, la paciente Payne, ya no está –dijo con total normalidad dejándome en shock.

-¡Qué! ¿Qué quiere decir con que no está? ¿Amy murió? –Grité histérica- ¿esta bromeando? No puede ser verdad…

-Cálmese señorita –se puso de pie preocupada. Corrí hasta la habitación de Amanda y al ver la cama vacía y a dos hombres pintando de blanco todo, me derrumbé- Se la llevaron a casa.

-Dios mío –puse una mano en mi pecho, realmente me había llevado un susto tremendo.

-El doctor decidió que pasara los ultimo días en casa, por el desastre que causaron sus amigos ayer era la mejor opción –me explicó ella con calma- ¿sabe usted quienes eran eso chiquillos? El hospital pondrá una denuncia…

-Eh… no, no los conozco –dije nerviosa- ¿sabe? Debo irme, gracias por todo –toqué su hombro y me miró sorprendida. Salí corriendo.

Me dirigí a la parada de autobús -¿Amanda estará en su casa?- Me senté a la espera de dichoso transporte público. Algo se movía en mi bolsillo y saqué mi celular. Miré la pantalla por un segundo y contesté.

-¿Por qué diablos no me dijiste? –hable furiosa.

-Perdón –se apresuró a decir- se me olvidó…

-Es que no te imaginas como me sentí, eres… -apreté los labios para no terminar la oración e insultarlo- ¡Zayn!

-¿Qué? Fue un error, listo, Amy está en casa, estoy con ella –sonaba molesto, odiaba sus cambios de humor- Liam fue a buscarte, nos vemos.

-Genial –finalicé cortando la llamada.

Al menos Liam no me hizo esperar mucho, apareció al ratito en un auto, creo que es el del papá. Subí y me senté de copiloto, besé su mejilla pero él se movió al intentar alcanzar unos papeles para acomodarlos y casi nos besamos… en la boca. Me alejé en un abrir y cerrar de ojos y miré directo al frente, Liam rió nerviosos y se puso a manejar. Creo que ambos preferimos concentrarnos en el camino más que en lo incomodo que nos sentíamos.

-Entonces, supongo que le gritaste a Zayn –habló de repente mientras doblaba en una esquina- eres mala.

- Si, lo hice –sonreí sin mirarlo- ¿Cómo ninguno me avisó? Pensé que ya había pasado…

-Aun le quedan fuerzas, creo –murmuró- Amy no nos dejará aun.

-¿Cómo puedes estar seguro?

-El Doctor lo dijo, esto va por etapas –empezó a explicarme- Primero empieza a adelgazar, luego aparecen manchas en su piel ¿las has visto, verdad? –asentí al recordar- bien, luego da la impresión que vuelve a estar mejor, como ayer, para de nuevo recaer y empiezan las últimas etapas de la enfermedad.

Changed my fuckin' life - #FanFicWhere stories live. Discover now