Capitulo 24: Segundos.

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Mandy Williams.-

La reacción de Zayn me había tomado por sorpresa ¿en serio me había dicho eso? Solo lo miré, creo que con la boca abierta y tratando formar una O con mis labios en vez de una D que se asomaba por evitar sonreír. Hizo que entráramos al supermercado en busca de algo para comer, pero al ir caminando por los pasillo no me podía sacar de la cabeza sus palabras “te llevaría a… donde estuviéramos solos –su voz sonaba ronca- y te demostraría que soy mil veces más hombre que cualquier imbécil aquí”  La primera forma en que se me ocurrió que podría demostrar lo que decía, no tenía que ver con cosas para comer, ni golosinas, ni galletas, ni ninguna cosa parecida a lo que había en los pasillos por los que caminábamos, tenía más bien que ver con… - no te sonrojes, Mandy, no ahora, no aquí. Que no te vea Zayn- con una cama.

-Estás seria ¿te sientes mal? –perturbó mis pensamientos sacándome del trance en que sus palabras me habían dejado.

-No, todo bien –quise sonreír pero opté por mirar la vitrina que tenía enfrente. Por ahora prefería no mirarlo o mi mente empezaría a imaginar cosas que… es mejor no imaginar por ahora.

Luego de pagar en la caja un par de jugos, galletas y barras de chocolate, salimos para seguir caminando ¿hasta dónde llegaríamos? Los pies empezaban a dolerme y solo quería tirarme a descansar. No fue mucho lo que avanzamos, los rayos de un sol que se asomaba tímidamente para capear una no muy abrigadora mañana cosquilleaban mi cara, se sentía agradable, necesitaba esa rica sensación de calor mañanero. Doblamos en una esquina y lo que necesitaba apareció. Una plaza, no era grande pero se veía agradable para tirarse en el pasto y disfrutar de esto.

Caminé un poco aprisa y Zayn se quedó atrás, casi corrí a buscar el lugar perfecto para que el sol me abrazara, me recosté en el pasto, estaba algo frío pero no me importó. Apoyé mi cara en mis brazos y cerré los ojos hasta que sentí que Zayn se sentó junto a mí. Le miré un rato mientras él abría el paquete de galletas y me ofrecía, si tenía hambre así que me senté para degustar de eso.

-Es lindo aquí –se puso a observar a su alrededor, hice lo mismo, parecía un lugar tranquilo.

Al parecer ese fue nuestro desayuno, comimos en silencio, cada quien sumido en sus pensamientos, no era incomodo, creo que lo necesitábamos y agradecí que Zayn no preguntara por qué estaba tan callada. Aun me pone nerviosa su mirada y me vuelve loca su sonrisa, no terminaré nunca de creer que él estaba conmigo, que habíamos pasado toda la noche juntos, sin dormir, sin llegar a un lugar donde tendríamos que dar explicaciones. Esto ha resultado demasiado perfecto, increíblemente perfecto. Hace 5 meces mi vida era totalmente rutinaria y hoy, miren, pasando la noche fuera de casa, sin avisarle a mis padres, sin importar que pasará, sin pensar las cosas. Hace 5 meces no tenía vida, bueno si la tenía pero era aburrida y eso no cuenta.

Él me hacía correr riesgos, me sorprendía, es totalmente impredecible todo lo que hace o dice… chicos con este no encuentras con facilidad, como Zayn Malik no hay dos, ni algo que se le parezca.

Me recosté nuevamente en el pasto, pero esta vez, mirando el cielo, estaba despejado, los pájaros volaban libremente por encima de nosotros, la gente que pasaba cerca nos quedaba mirando ¿Qué tiene de raro? Quizás porque dos chicos en una plaza a las –miré la hora en mi celular- 8:30 de la mañana no es TAN común, pero tampoco es algo de otro planeta.

-¿Quieres chocolate? –ya había abierto una barra y estaba comiendo solo, asentí porque se me hacia agua la boca verlo saborear mi dulce favorito- Que pena, me lo comí todo.

-¡mentira! –exageré inclinándome y buscando a su alrededor con las manos algún rastro de donde se había metido las otras barras- Zayn no puedes ser tan egoísta ¡dame un trozo!

-Si no me lo he comido –sacó el chocolate de su espalda y me lo tendió- llorona –y lo vuelve a esconder cuando estaba a punto de tomarlo.

Lo pone por sobre su cabeza, como él era más alto que yo, sentada no lo alcanzaba, no quería ponerme de pie así que solo me arrodillé pero su agilidad me superaba. Movía con rapidez las manos, jugando con el chocolate de un lado para otro, volvió a ponerlo sobre su cabeza y me lancé empujándolo hacia atrás, quizás se golpeó la cabeza por lo brusco que cayó y yo sobre él. La barra saltó un poco lejos y tenía pensado ponerme de pie para cogerla.

-Ahora, eres mía –me sujetó por la cintura impidiendo que me levantara. Sentí un cosquilleo en el estomagó haciendo que sonriera, con curiosidad lo iré volviendo a analizar sus palabras, dijo que yo era suya-.

-Quiero chocolate –me acomodé en su pecho y agarré con rudeza el cuello de su chaqueta- dame chocolate, Malik.

-¿Qué me das a cambio? –habló y su aliento olía a lo que más quería en este minuto, o parte de ello.

-¿Qué pides, forastero?

-¿Qué serías capaz de darme?

Sin pensar en lo que hacía, acomodé una de mis piernas entre las suyas y ataqué su cuello –no pude controlar mi risa ¿Qué diablos estoy haciendo?- empecé a morderlo delicadamente y él se puso tenso. Inhalé profundamente su fragancia, esa que desprendía su cuerpo, aquella que podría reconocer en el viento, porque era única y adictiva, tan suya.

-Mandy… -suspiró, no le presté atención- estamos… en... una… plaza –aclaró su voz, hablaba un poco ronco.

-Entonces –lo miré y tenía los ojos cerrados y la boca entre abierta- debiste darme el chocolate, ahora asume las consecuencias.

Honestamente, nunca he tenido novio por ende no he estado en una situación así, pero si se que, por la cara que tenía el hombre debajo de mi, sus hormonas estaban en modo ON ¿se entiende, verdad? Siempre me pregunté cómo sería provocar algo así en esa persona que te gusta, quieres o amas, depende del caso, y acabo de darme cuenta que al ponernos de pie, Zayn intenta ocultar algo entre sus piernas –no hice comentario para no incomodarlo- pero me ira difícil estar seria. Hay que temerle a un hombre como este.

El tono de su celular llamo nuestra atención, sonó without you del que aparentemente era el ídolo de Zayn, si, Chris Brown, contestó y atento escuchaba lo que alguien le decía.

-¿esta… bien? –Empezaba a caminar lento de un lado a otro- ¿Qué dijo el Doctor?... Mañana, es poco tiempo. –Zayn estiró el brazo para alcanzar mi mano y tomarla, tomos la misma dirección por la que habíamos llegado. Supuse que nos iríamos a casa- Estoy en… -el moreno me miró unos segundos y sin dudar respondió- Voy en camino con Mandy, Liam. Adiós.

-¿Le pasó algo a Amy? –él afirmó.

-Su corazón casi no palpita –su voz fue neutral, agachó la cabeza y apretó mi mamo- quizás no alcancemos a…

Su voz se cortó y lo giré para abrazarlo fuerte tal como Zayn respondió el gesto, lleno de impotencia, tristeza y rabia tal vez. Entonces soltó un llanto ahogado...

Corrimos, quizás volábamos de lo rápido que pudimos ser, estábamos a dos cuadras de la casa de Amanda y Zayn estaba nuevamente al teléfono con Liam, decía que lo que tanto queríamos aplazar estaba sucediendo, ella nos estaba dejando.

-Ve –habíamos entado y Zayn se detuvo en la entrada, soltó mi mano y no se movió-no puedo con esto.

-Zayn –susurré y el negó. Me acerqué y noté la presencia de Liam y su cara con sus ojos tristes me observaron, señaló las escaleras y corrí.

No me importó tropezar con los escalones y golpearme las rodillas, no me importó que me faltara el aire cuando llegué a la habitación de Amanda, no me importó que estuviese su padre despidiéndose, solo me arrodille junto a ella, tomé su mano y besé sus delgados nudillos ¿es que enserio ya era hora? ¿Tan rápido? ¿Ya había sucedido lo que Liam me contó?

La maquina junto a mi pitaba cada 5 segundos, contados mentalmente, segundos que se alargaban y teniendo miedo de no querer escuchar el agonizante sonido, queriendo ensordecer justo ahora.

Changed my fuckin' life - #FanFicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora