❝ Cuando un alfa rechaza a su omega, cientos de situaciones son desencadenadas.❞
❄ Primera parte de dos, incluye los dos primeros arcos de la historia.
🌺 Trama policial / thriller
🌿 YoonMin // Omegaverse
🍁 Drama, romance, angst, happy...
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—Yoongi Sunbaenim no dudará en echarte a patadas en cuanto sepa de esto.
Ann, la omega de melena rubia que había estado espiando la oficina del dueño de la tienda departamental durante toda la mañana, dio un respingo hacia el asistente parado de brazos cruzados en el marco de la puerta. Acababa de ser descubierta con las manos en la masa, a la orilla del escritorio donde su jefe estaba durmiendo.
—¡No he hecho nada malo! —murmuró la omega, urgida mientras se levantaba del suelo y daba pasos hacia atrás—. Sólo... estaba viendo, ya sabes, si seguía respirando.
—A otro perro con ese hueso —gruñó Kihyun, acercándose en silencio a su jefe—. ¿Qué hace él aquí? Nunca llega antes de las nueve.
Ann se encogió de hombros. —Le pregunté al guardia lo mismo. Dijo que llegó a medianoche y que no ha salido de aquí desde entonces —La omega miró al asistente revisar los papeles amontonados sobre el escritorio, para luego volver a observar el atractivo rostro del alfa.
—Está adelantando trabajo —murmuró el hombre que estaba despierto, mirando las hojas y los números—. ¿Por qué lo estará haciendo?
La omega lo ignoró.
—Por cierto, Kihyun, ¿puedes no mencionarle de esto?
—¿Hmm? —El pelicastaño seguía atento a lo que leía.
—Que estuve en su oficina... viéndole dormir. Creo que su primera impresión de mí no fue bonita, así que intentaré comportarme de ahora en adelante —Juntó sus manos y sus pestañas aletearon—. Por favor. Quiero tener una oportunidad con él.
Kihyun frunció el cejo. —¿Me pediste que te diera empleo aquí sólo por Yoongi? Ann, no jodas. Eres mi amiga, pero él es mi jefe. Gracias a él puedo comprar comida y cosas bonitas para el apartamento. ¿Sabes cuánto tiempo tuve que trabajar para poder ser su asistente? —La omega rodeó los ojos, y el alfa tuvo que controlarse para no elevar la voz—. No me hagas señas, granjera. Apoyar tu infantil capricho de cliché romántico no compensará los dos años que me rompí la espalda trabajando.
—¿Y por qué debería afectarte a ti?
—Porque sabe que yo fui quien te consiguió el empleo, y en cuanto termines de sacarlo de quicio y te despida, quizás también de paso me termine despidiendo a mí —El alfa gruñó, alejándose del escritorio y llevándose a la omega hacia el marco de la puerta—. Además, Ann, Yoongi Sunbaenim ya tiene omega.
Una risa sarcástica salió de la rubia, quien avanzó hacia el alfa para seguir susurrando. —Que no tome en cuenta el coqueteo de otros omegas no significa que ya tenga pareja. Además..., entre nosotros, acabo de estar lo suficientemente cerca de él. Oppa no tiene el aroma de nadie encima del suyo.
—¿Op..? ¡Aissh, Ann! ¡No llames Oppa a mi jefe!
—Le llamaré como yo quiera. ¡Estamos destinados a estar juntos! Él es guapo, y yo soy guapa. ¡Seremos una pareja bonita!
