Capitulo 4

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-¿Cómo te sientes?- pregunté cuando se unió a la mesa.

-Nerviosa. No niego que me siento feliz de haber entrado a la Universidad pero me siento nerviosa. ¿Quién cuidara de ustedes cuando las clases comiencen?-

-¿Quién me recordará que dormir en la iglesia es pecado?- se burló Mathew.

-Por favor, Keana.- suplico la pequeña mirando a la chica.- Cuida que tu hermano no se duerma en medio de los sermones-

Intenté suprimir una risa por la seriedad con la que hablaba.

-No prometo nada, Ally.-

-Sé que sabrá comportarse.- hablé tomando mi café mientras miraba a Mathew.- Y estoy segura que todo irá bien contigo, Ally.-

-Gracias, Laur.- habló mientras me abrazaba. Era la única que no me llamaba por ese ridículo apodo. -Sé que falta mucho tiempo para que te gradúes, pero ¿has pensando en que lo quieres estudiar?-

-Si.- respondí segura.- Estudiaré negocios internacionales y una segunda carrera en finanzas. Deseo tomar el control de la empresa de mi padre en algún momento.-

-Ambicioso.- murmuró Mathew. -Podría ser el abogado de tu empresa cuando termine la carrera.-

-Si dejas de dormirte en los sermones lo consideraré.- todos rieron mientras miraban la cara de decepción del chico.

-Si necesitas un auditor, no dudes en buscarme.- habló Miller.

-Lástima que mi futura carrera como neurocirujana no sea beneficiosa para tu empresa.-

Los tres saldrían del país en muy poco tiempo para ir a la Universidad.

-¿De qué hablas? Te necesitaré para descubrir que carajos hay en la cabeza de Mathew.- todos volvieron a reír.

-Vamos, nena.- habló con su sonrisa de galán.- admite que me extrañaras.-

-No, claro que no.- respondí de inmediato.- en cuanto llegues a Londres serás el problema de alguien más.- dije con toda la maldad posible.

-Me extrañaras y lo sabes.- aseguró guiñándome el ojo.

Claro que lo extrañaría, pero odiaba admitirlo.

-¿Empezaron sin mí?- preguntó Dinah finalmente llegando.

-Tardaste tanto que Mathew estaba a punto de dormirse.- se burló Miller.

-¿Eso debería sorprenderme?- preguntó Dinah robando un poco de mi café. -Math podría dormir incluso en el baño.-

-¿En qué raro concepto me tienen?- preguntó Mathew indignado. Todos volvimos a reír.

-¿Qué tal la fiesta de tu hermanito?- preguntó Keana interesada. -¿Le gusto nuestro regalo?-

-¿Hablas en serio? No todos los días recibe un enorme auto a control remoto. Él realmente lo amó. Gracias por eso, chicos.-

-Nada que agradecer, DJ. Sabes que no tenemos hermanos menores y amamos a tus hermanitos como si fueran nuestros.- comentó Miller.

Eso era cierto. Ellos aman demasiado a los hermanos de Dinah, incluso mis hermanos eran consentidos por ellos. Creo que Taylor y Chris quieren más a Miller, Mathew y Keana que a mí.

Nada que hacer.

-Hablando de fiestas... ¿Cómo estuvo el evento de anoche?- preguntó Dinah.

-Aburrido.- respondió Miller por mí.- No pasó ni una hora antes de que nos llamara.-

Te deje ir (Camren)Where stories live. Discover now