Solo Dame 9 Meses ©

Capítulo VI |Conociéndote

Capítulo 6. Conociéndote.

Sólo Dame Nueve Meses

Cuando por fin Josh se aparcó frente a mi edificio sentí que pude respirar bien por primera vez en todo el recorrido en aquel viaje.

Ni siquiera trajimos nuestros audífonos...

— ¿Llegamos? — Ashley preguntó, mientras al mismo tiempo analizaba el alrededor con un ceño fruncido.

—No. Aquí vive Lía. Debo asegurarme de que llegue bien a su apartamento —responde Josh.

Estaba apunto de tomar la palabra para despedirme cordialmente, sin embargo, Ashley siguió:

—Claro —ella se carcajeó nerviosa —. Por un momento pensé que vivías en un apartamento, bebé.

Aquello me pareció un comentario innecesario y era muy clara la razón por la cual lo había mencionado. Menuda clasista. Me limité a tensar mi rostro para evitar la obviedad de mi molestia; ella no merecía mi atención, se portaba de manera infantil y probablemente yo terminaría haciendo lo mismo si no me controlaba.

—Adiós, Josh — me despedí con un toque en su hombro—, adiós, Ashley. Estoy feliz de que al fin estén juntos.

Mi amigo se limitó a sonreírme por el retrovisor y su novia se despidió de la misma manera en que yo lo hice.

Probablemente no era muy fanática del acento australiano, o probablemente simplemente me molestaba Ashley. Ella había sido muy grosera conmigo, trataba de comprender, pero era imposible; sin duda alguna, la aborrecí.

—Lía... ¿Cansada? —. El botones del edificio donde vivía me dirigió la palabra, llevando mi atención a él y sacándome de mis pensamientos rápidamente.

—Hola, James —respondí, casi arrastrando la palabras —. Irritada, en realidad.

— ¿Quién era la chica que estaba con Josh?

James conocía a Josh, y básicamente, toda mi vida social, pues él siempre estaba ahí y teníamos cierta cercanía.

—Su novia.

Él parpadea sorprendido y me ve con sorpresa: — ¿Novia?

—Sí, su novia —repetí.

—Pero yo pensaba que tú y Josh..., que tú y Josh tenían algo. —James hablaba en serio, pues su semblante parecía realmente sorprendido.

—Bueno, creo que ahí está la respuesta —bromeé.

Nos despedimos y finalmente, me dirigí al ascensor rumbo a mi habitación. Piso 7. En lo único que pensaba era en mi maravillosa cama, en dormir, en disfrutar de unos chocolates y relajarme, sin más Josh en mi cabeza, sin más Ashley... Solamente yo.

(...)

—Me casaré con Josh y tú te irás lejos de aquí. Tu estúpido bebé no será una excusa para que estés cerca de mi futuro esposo. Ustedes dos, no son más que un estorbo en mi vida.

—Mi bebé ¿Estorbo? Oh, créeme que te arrepentirás de haber dicho eso ¡Maldita...!

— ¡Rubia postiza!

Luz. De pronto, mis ojos fueron quemados por el golpe de luz que recibí de mi ventana. Dios. ¿Qué hora es? ¿Cuánto tiempo dormí? Y, ¿por qué estaba soñando con la novia de Josh?

Los golpes seguidos en mi puerta me dicen que Sophia está de visita.

— ¡Voy!—Grité desde mi cuarto, consciente de que ella no me escucharía y seguiría tamborileando. Así que me encaminé y abrí la puerta.