Capítulo 47

776 56 6
                                    

Desperté gracias a una fuerte luz que se encontraba frente a mí. Traté de abrir los ojos, pero se me hacía difícil.

-Beyoncé, ayúdame...-susurré.

-Así que por fin despertaste.

Miré a Nate a mi lado algo asustada. ¿Qué hacía aquí? ¿Por qué me hablaba?

-¿Nate? ¿Qué pasó? Sólo recuerdo haber comprado alcohol...

-Y te lo tomaste casi todo.-rió.-Cuando llegué, estabas borracha. Diciéndome de que yo te odiaba y cosas así.

-¿No lo haces?

-Claro que no, Vi.

Se sentó a mi lado y acarició mi cabello.

-¿De verdad?

-No podría ni en un millón de años. Te amo demasiado y quiero que lo nuestro funcione. Quiero que exista la suficiente confianza como para decirnos lo que nos ocurre.-murmuró.-Las relaciones se tratan de lealtad, confianza, amor, fidelidad y honestidad. Quiero que los dos tengamos entre nosotros todo eso junto. Y sé que lo lograremos. Porque ambos nos amamos y trabajaremos en ello, ¿estás de acuerdo?

-Muchas gracias.-susurré para luego lanzarme a sus brazos.-Haría lo que fuera por ti, Nate.

-Y para que quede claro, eres jodidamente graciosa borracha.

Bajé la mirada avergonzada y reí.

-No recuerdo nada, Nate. Trato de hacerlo, pero es inútil.

-A eso, mi querida novia, se le llama resaca.

Solté una leve carcajada. Miré el reloj de la pared y exclamé. Marcaba que eran las doce del día. Sentí morirme. No podía lo irresponsable que había sido.

-¿Qué sucede?

-¡Mi manuscrito! ¡La editorial! ¡Joder!

Me levanté de la cama con rapidez, sentía mis piernas algo dormidas. Nate comenzó a reír, lo miré enfadada.

-No me mires así.

-¿Entonces por qué te ríes?

-Pedí que te cambiaran la cita a las cinco. Así podrías reponerte bien.

-Oh, Beyoncé. ¡Gracias, gracias!

Lo abracé fuertemente. Me di cuenta de que no nos habíamos besado hace mucho tiempo, demasiado para mi gusto. Así que me separé y lo observé detenidamente.

-He visto esa mirada antes...-advirtió.

-¿Puedo... Puedo besarte?

Nate asintió con una sonrisa asomada en sus labios, para luego unir éstos últimos con los míos. Y derrepente, se me vino una imagen a la cabeza. Nate y yo, en la cocina, él diciéndome que era una chica extraordinaria, justo después de haberme hecho un test de embarazo. Habíamos vuelto en el tiempo, sin haberlo querido.

Nos besamos por un rato.

-Te extrañé. Era difícil verte y no poder hacer esto...-lo abracé fuertemente.

-Joder, estaba igual. Quería abrazarte o besarte pero no podía. Mi orgullo salía y era horrible. Una lucha constante.

Reí. Me separé lentamente de su cuerpo, con algo de pereza, si fuera por mí, pasaría entre sus brazos durante todo el día, pero aquello no era posible. Luego de conversar cosas del pasado con mi novio, me di una ducha. Aún tenía sueño y un dolor de cabeza impresionantemente gigante. Una vez que salí me tomé una pastilla. Nate sirvió dos platos de spaghetti con salsa. Lo devoré en cuestión de pocos minutos. Moría de hambre.

Who Says; Shawn MendesWhere stories live. Discover now