Desde Cero

2 - Mentiroso Celoso

Estaba haciéndome camino a mi casillero tratando de ser tan sigiloso como sea posible. Lamentablemente, para mi pobre fortuna, me descubrieron. Uno de los amigos de Liam estaba en el pasillo cuando me vio. Me lanzó hacia mi casillero tan rápido como fue humanamente posible. Afortunadamente, dado que soy bastante rápido, logré agarrar mis cosas y salir corriendo antes de que él me alcanzara. Será mejor que mantenga los ojos abiertos por el resto del día. Me gustaría evitar la mayor cantidad de contacto posible. Esto iba a ser un desafío para mí porque tengo algunas clases com Liam y algunos de sus amigos.

Ya que soy inteligente o lo que sea; logré adelantar un grado o dos. Sin embargo, esto fue muy desafortunado para mí. Simplemente hizo que fuera mucho más fácil para Liam rastrearme. Probablemente sea delatado por alguien más, aunque yo no estuviera en la misma clase que él. Toda la escuela está en mi contra.

Sí conozco algunos lugares en la escuela a los que nunca nadie se fija realmente. Uno es el techo, sorprendentemente. Y ahí es exactamente a donde me dirijo. Después de subir muchas escaleras, finalmente llegué a la puerta del tejado. Lo abro y empiezo a caminar solo para ver a alguien parado en la barandilla. Me detengo en seco y la persona se da vuelta.

"Oh odio mi suerte ..." digo en voz baja. Es Liam.

La expresión de mi cara es parecida a la de un ciervo atrapado por cazadores. Él parece darse cuenta y comienza a reírse. Después de mirar un rato, comenzó a acercarse a mí. Me siento como si estuviera en una película de terror. Mis piernas no se mueven. Me quedo allí y tiemblo de miedo. Después de intentar varias veces moverme, finalmente acumulé la fuerza suficiente para poder correr. Despego a toda velocidad justo antes de que él pueda alcanzarme y comenzar a correr hacia la puerta, también como un ciervo.

De nuevo, ya que soy rápido logré escapar. Mi velocidad parece ser realmente útil hoy.

Decido omitir la cafetería y quedarme en uno de los baños de la escuela con la puerta cerrada hasta que suene la campana para evitar cualquier problema.

Después de esperar un rato, suena la última campana que me indica que vaya a clase. Desafortunadamente para mí, Liam y uno de sus amigos están allí. Saldré corriendo por la puerta tan pronto como termine, podría lograrlo. Desbloqueo la puerta del baño y entro a los pasillos. Afortunadamente está lleno de estudiantes que se dirigen a sus clases finales para que yo pueda mezclarme. Después de llegar a mi asiento habitual, la maestra comienza a hablar.

Antes de darme cuenta oí la campana. La clase terminó en un instante, probablemente debido al hecho de que estaba perdido en mis pensamientos sobre mi escape. La maestra se había ido antes de que el primer alumno pudiera siquiera pararse de su silla. Eso no fue muy útil para mí, aunque probablemente no haría mucha diferencia porque a ellos no les importa si algo me sucede. Empiezo a correr hacia la salida, tratando de caminar junto a algunos de los otros adolescentes o correr más bien. Pero parece que ya han visto mi plan. Siento una fuerza en mi brazo. Es la mano de alguien. Me las arreglo para quitarme la camiseta mientras salgo de la clase. Escapo de las manos, pero pierdo mi camisa. No es una gran pérdida, es definitivamente mejor que ser golpeado en el estómago. Salgo corriendo por el pasillo hacia mi casillero. Me llevo todos mis suministros antes de continuar hacia la salida de la escuela. Llegué al estacionamiento de la escuela y veo que soy el primero allí. Corro por la calle hacia mi casa. No tomo el autobús porque no quiero encontrar a nadie que quiera tener su puño en mi estómago.

He estado corriendo a casa todos los días desde que tengo memoria. Probablemente así haya obtenido mi velocidad. Mis padres nunca sabían esto porque cada vez que me iba o llegaba a la casa no estaban allí. Así que nunca me regañaron que caminara dos millas a la escuela y corriera dos millas cada día. La distancia a la escuela desde mi nueva casa es mucho más larga que la anterior. Son alrededor de cuatro millas para llegar y regresar. Es un buen ejercicio, especialmente porque es toda la actividad que hago durante el día, además de correr en la escuela.