Desde Cero

8 - Ataque De Pánico

Los próximos días pasaron. Sin ningún tipo de acontecimientos realmente interesantes.

Hoy es viernes, el día de la fiesta. Me levanto temprano para poder preparar algo para llevar a la fiesta. No estoy seguro de si es algo que la gente normalmente hace, pero creo que no podría doler hacerlo. Decido hacer magdalenas. Me tomó alrededor de una hora terminarlas y salieron muy bien. Son muffins de vainilla esponjosos con arándanos que se funden en la parte superior de color crema brillante creando un bonito tinte azul celeste alrededor de las bayas. Hice veinticuatro y los metí en la nevera para que se enfriaran mientras estoy fuera.

Me fuí a la escuela después de preparar un desayuno extra. Esta vez hice cazuelas de huevo. Llegué a la escuela y encontré a Cortney esperándome en la entrada, parecía estar muy emocionada por el desayuno.

"Me salté el desayuno de hoy solo para probar el tuyo en todo su esplendor". Ella dice mirando mi bolsa. Los dos nos reímos y seguimos caminando hacia nuestros casilleros. Una vez que vi el mío noté algo en él. Tenía pintadas las palabras "Maricon" en aerosol. Cuando todos me vieron mirándolo, todos comenzaron a reírse. Si las miradas pudieran matar, juro que Cortney sería un maníaco homicida. Ella los fulminó con la mirada hasta que todos se callaron. Bajé la cabeza avergonzado. Saqué mis cosas del armario y me alejé rumbo a Cortney.

"No les prestes atención". Ella dijo tranquilizadoramente. Asiento y ella saca sus cosas del casillero. Nos dirigimos a la cafetería para comer el desayuno que preparé. Saco el contenedor de mi bolsa y lo coloco sobre la mesa. Corney ahora está saltando de manera anticipada. Tomo la tapa y ella hace un chillido emocionado.

"¡No importa si lo hago ya!" Ella dice mientras agarra rápidamente un rollo de huevo. Cuando se lo puso en la boca parecía como si estuviera en el cielo.

"¡Cásate conmigo!" Ella dice en un tono ligero. Me reí.

Después de que pasó el día, Cortney me llevó a casa como lo hace todos los días.

"Te recogeré en dos horas si es que todavía iras". Asiento y me dirijo a mi casa. Subo las escaleras y entro a mi habitación. Tengo que vestirme para la fiesta. Entro en mi baño y enciendo el agua esperando que se caliente. Después de desvestirme, entro y dejo que el agua me ataque. Empecé a pensar en mi casillero, quién lo hizo, por qué lo hicieron. ¿Pudo haber sido Liam y sus amigos?.

Después de dejar que el agua fluya por mi cuerpo durante unos minutos, me dirijo a mi armario y me visto. Me decidí por un botón negro y blanco con los dos botones superiores desabrochados, mangas enrolladas, un par de pantalones vaqueros pitillo morados oscuros y unas zapatillas moradas. Te dije que podría ser elegante. Con eso hecho, bajé las escaleras para quitar los muffins de la nevera. Los coloqué en dos bolsitas de cupcake que mi madre obtuvo del trabajo hace un tiempo, encajan perfectamente. Y finalmente coloco los panecillos en los recipientes de magdalenas en dos recipientes de plástico. Se ven muy apetitosos.

"Realmente espero que los disfruten". Dicho esto, dejo en lugar algunas cosas en casa. Espero a Cortney unos minutos mientras toco la guitarra de mi padre. La escucho detenerse e inmediatamente salgo por la puerta trayendo los muffins conmigo. Me doy cuenta de que ella los está mirando.

"Hice algo para la fiesta ... Espero que esté bien". Digo un poco avergonzado.

"Estoy segura de que no eres el único que trae comida así que aligerarte". Ella se ríe. Subo al auto y ella se aleja de casa.

"Si tengo una pelea esta noche, voy a necesitar que sostengas mis pendientes para mí". Ella dice en broma.

"No llevas nada". Me doy cuenta. Hubo un extraño silencio antes de que ambos estalláramos en carcajadas.

Después de un viaje de quince minutos llegamos a una casa. Hay alrededor de dieciséis autos estacionados al otro lado de la acera. Cortney se detiene y apaga el auto. Respiro hondo para prepararme para lo que está a punto de pasar. Ella sale del auto y yo hago lo mismo. No pude distinguir lo que estaba usando en el auto, pero la luz de la calle cerca de la casa brilló sobre ella, haciéndola lucir angelical. Ella me sorprendió mirándola aturdido y solo se rió.

"T-tú ... Estas ... increíble". Digo detrás de mis palabras mientras salgo de mi aturdimiento.

"Deberías mirarte en el espejo lindo". Ella continúa riendo entre dientes haciendo que mi cara se ponga roja.

Comenzamos a subir las escaleras hacia la casa. Parece que somos los últimos en llegar. Cuando entramos por la puerta, la gente guardó silencio, probablemente porque Cortney brillaba como un ángel. Escuchamos algunas aullidos como si fueran lobos y ella solo puso los ojos en blanco. La gente le felicitó por su aspecto. Aproveché toda la conmoción y dejé un contenedor de muffins en la mesa de café en el centro de la habitación. No quería que nadie me viera colocándolos de otra forma, probablemente no los comerían. Apenas había espacio en la mesa de café, así que caminé un poco por la casa de Liam en busca de la cocina. la encontré poco después. Planeé colocar el otro contenedor de magdalenas en el mostrador pero había gente sentada sobre ella besándose. Solo decido conformarme con la nevera. Había un buen espacio allí. Tenía todos los contenidos normales que tendría una nevera, pero también tenía un par de cajas de cerveza. No sabía que habría alcohol aquí, pero no debería haber esperado nada menos que eso.

Salgo de la cocina y continúo hacia la sala de estar buscando a Cortney. La música se estaba poniendo ruidosa y la gente estaba enloqueciendo. En mi camino de regreso oí gritos y llanto. Decidí seguir el sonido. Vi a uno de los amigos de Liam afuera en la terraza del patio trasero gritando en el teléfono caminando de un lado a otro. Él estaba llorando y parecía realmente molesto. Colgó el teléfono y comenzó a temblar. Parecía que tenía problemas para respirar. Se sentó en la terraza temblando. Yo puedo notar estas señales en cualquier lugar posible, él estaba teniendo un ataque de pánico.

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