•• Capítulo 8••

9.4K 679 69
                                    

— Entonces

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

— Entonces...¿Ustedes comparten a Margrethe? — pregunté incrédula.

Nos encontrábamos a punto de partir hacia la Inglaterra. Antes de subir, me encontraba junto a la embarcación de los Ragnarsson a pedido de Bjorn, quien hasta hace un momento había terminado de explicarme el plan y ahora sólo estaba con el resto de sus hermanos.

— No es algo tan grave. — dijo Ubbe sonriendo.

— Los tres la pasamos bien.

— Si, claro. Pero tú, Ubbe. Es tu mujer... ¿No sientes celos que otro hombre le de placer justo frente a tí?

Nunca había entendido el sentido de sexo con más de una persona. Soy celosa y algo posesiva. Si un hombre está conmigo, es mío. Y si yo estoy con alguien, bueno, soy de él.

— No es algo tan raro, Lena. Muchos hombres comparten mujeres. Incluso... Tú podrías visitarnos cuando quieras.

Ups, Ubbe no tendrías que haber dicho eso

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Ups, Ubbe no tendrías que haber dicho eso.

— ¿Por qué? ¿Acaso la esclava que elegiste como esposa no te satisface, hermano? — cada palabra que salía de la boca de Ivar contenía rabia y posesión. No estaba segura que ellos sepan de "lo nuestro" pero creo que Ivar ya quería marcar terreno.

Antes que Ubbe pudiera contestarte, me adelanté. — Gracias por la invitación, pero...no es mi estilo. — dije sonriente.— No me gusta compartir. Ni comparto ni soy compartida.

— ¡Quién diría que la bella Lena sería una mujer celosa! — Hvitserk exclama sonriendo.

Carcajeé ante su comentario. — No son celos, sólo no soy el tipo de mujer que compartiría a un hombre. Lo que es mío, es mío. Si eso no le alcanza, bueno... Buscaría otro hombre al que darle mi amor.

Me había ganado la sonrisa de todos los Ragnarsson, pero la de Ivar sin dudas, era la más intimidante. Me sonreía pícaro, seguramente recordando lo que hasta hace unas horas volvimos a hacer en el bosque, después de su práctica con el carro.

**

El viaje fue largo y no sé veía más que agua a nuestro alrededor. Aprovechamos el tiempo para seguir hablando sobre nuestros movimientos en la batalla con mi gente.

La Hija De Freyja • Ivar The Boneless •Where stories live. Discover now