Por Favor, ¡No! Me Olvides [DamiJon]

Capítulo 6

Los cuatro caían al vacío. El portal los había expulsado en el medio del cielo. Fue Jason quien abrió los ojos al sentir la fuerza gravitacional atrayéndolo al suelo. Los cuatro iban en caída libre sin remedio hacia una muerte segura. Jason aún abrazaba a su Babybird, se aferraba ahora más que nunca.

-Tim, Timmy, bebé, despierta... -Jason le susurró al oído-. ¡Tim, despierta! ¡Tim!

Jason lo abrazó aún más fuerte. Viró a su alrededor buscando a Damian y a Jon. Los miró en las mismas circunstancias que Tim. Sólo que Jon se alejaba cada vez más de ellos, perdiéndose en la obscuridad del cielo.

-¡Damian! ¡Damian! ¡Damian, despierta! –Jason llamó por el comunicador, pero sólo escuchó estática-. ¡Damian!

El suelo estaba cada vez más cerca. O eso parecía, pues la tenue luz de la Luna sólo le alcanzaba para apenas visualizar el paisaje. Jason no lo pensó dos veces y trató de acercarse a Damian. Cuando lo hubo alcanzado, le dio una patada en el estómago. Sólo así, el chico reaccionó. Lo sostuvo de su uniforme y lo jaló hacia él. Damian apenas comenzaba a comprender la situación en la que estaban. Jason avisó de Jon quien ya estaba muy alejado de ellos. Damian empujó a Jason, pero éste no lo soltó. Jason señaló hacia una montaña con la cima cubierta de nieve. Damian forcejeó para hacerse liberar, pero Jason le dio un cabezazo para hacerlo entrar en razón.

Tim comenzó a abrir los ojos. Se percató del peligro inminente y trató de apartarse de quien lo mantenía abrazado. Jason lo soltó pero sin dejar de sostener su mano. Tim intentaba despabilarse. Miró como Jason le sonreía y trataba de mostrarse calmado ante la situación. Tim se alegró de ver su rostro y le devolvió la sonrisa. Jason le enseñó la montaña. Hizo un par de señas que Tim aceptó con un gesto. Damian aún trataba de soltarse. Jason señaló en dirección de Jon para que Tim comprendiera y el ex Robin asintió con un pequeño ademán. Tomó la mano de Damian. Éste forcejeó un poco mientras miraba a Jon alejarse por completo y perderse en la obscuridad. Cerró los ojos con fuerza en señal de resignación, luego miró a sus hermanos y asintió a los planes de Jason.

Los tres asumieron una posición de caída que les permitiera formar un ángulo y no sólo caer verticalmente. Se acercaron lo más que pudieron a la montaña. No sabían si su plan funcionaría, pero no quedaba de otra, al menos la suerte les había dado esa salida, porque si cayeran en un valle o en el desierto llano, no habría escapatoria a la muerte.

La nieve en la cima de la montaña se acercaba velozmente. Prontamente, los tres se posicionaron paralelamente al costado de la pendiente. No hubo más que acercarse a la nieve y esperar que la física hiciera el resto.

Al tocar tierra fue inevitable que se soltaran. Aunque no impactaron de lleno, la gravedad y la velocidad no les dieron tregua. Su caída no fue tan violenta como si hubieran impactado en un ángulo de noventa grados, pero eso no la hacía menos traumática y dolorosa.

Los tres arrastraron varios metros hasta detenerse con ayuda de la espesa nieve. Afortunadamente, sólo tuvieron encontronazos con algunos guijarros no mayores que sus cabezas, o lo hubieran lamentado.

Tardaron varias decenas de minutos en restablecerse. Fue Jason quien primero se encontró de pie. Se sostenía el brazo izquierdo y trataba de avanzar hacia dónde creía estaba Tim. La tenue luz de luna en el cielo despejado les ayudaba un poco a no perderse entre las tinieblas. Además, la nieve blanca reflejaba bastante bien la luz apenas visible.

-Tim, ¿Tim, me oyes? –Intentaba comunicarse a través del aparato-.

La estática continuaba. Siguió caminando. Visualizó una pequeña luz brillante. Aún más brillante que la nieve.