Por Favor, ¡No! Me Olvides [DamiJon]

Capítulo 29

Jason caminó lo más rápido que pudo, zigzagueando y doblando su ruta para perderse lo más pronto posible. Luego corrió alejándose. Y cuando creyó estar lo más apartado de los ojos y oídos de Tim, asegurándose no lo seguiría, o lo encontraría, se ocultó detrás de un árbol, se sentó y liberó su estrés llorando.

-¿Por qué...? ¿Por qué a Tim...? ¡No puedo, no puedo con esto! ¡No sé qué hacer! ¡Tim, mi Tim...! ¡Destrozaron a mi Tim! –Jason decía entre sollozos, golpeando la tierra húmeda-.

"-¿Jason...? -El menor susurró aflojando su resistencia-.

Las lágrimas del segundo Robin se intensificaron al escuchar a Tim hablar.

-Sí... so...

-Por... por favor... -Tim habló torpemente, todavía llorando e interrumpiendo al renegado-. No dejes que Jason me mire... No lo dejes... mirarme así...

El mayor no entendió en primera instancia. Soltó a Tim un breve instante.

-¿Tim...? –Inquirió mirando al tercer petirrojo preocupadamente-.

-Por favor... No dejes que me vea... -Tim finiquitó llevándose las manos al rostro-. No, no dejes que me mire... -Murmuró todavía llorando-.

Jason no comprendió de inmediato, no hasta que percibió el olor tan característico del vino.

-Tim... Soy yo... Soy Jason...

-¡No, Jason no! ¡No me puede ver así!

-¡Tim!

-¡No, suéltame!

Tim forcejeó, incluso manoteó golpeando la cara de Jason.

-¡Tengo que huir, él no me puede ver así...!

-¡Tim, soy yo! ¿No me reconoces?

-¡No puedes ser Jason, él nunca llevaría esa ropa...! ¡No veo el murciélago rojo...! ¡Tú no eres Jason!

El renegado comprendió sus palabras inconscientes. Tocó su dorso. Inmediatamente se quitó el uniforme que había robado.

-¡Mírame, soy yo!

Tim clavó su mirada entrecerrada sobre aquel cuerpo que conocía de más. Se sonrojó reconociendo el rostro afilado que sobresalía entre la luz tenue de la fogata. Sus ojos turquesa parecían tener vida propia, impregnados de fuego dentro de un mar de constelaciones y destellos.

-Es un sueño... -Tim expresó embobado-.

-No lo soy, bebé...

-No... no puedes...

Jason sonrió.

-Dime algo que sólo él y yo sepamos...

El mayor se sonrojó sonriendo maliciosamente.

-Fui tu primera vez... -Jason respondió tomando el rostro del menor entre sus manos-.

Se acercó besándolo. Aunque la prioridad era salir de ahí, no le importó tomarse un par de segundos para sentir sus labios una vez más. Sin embargo, la magia duró muy poco, pues Tim gritó alterado, empujando a Jason y cayendo de espaldas sobre la yerba.

-¡NOOOOOO! ¡Vete! ¡Vete, Jason!

-¿Tim?

-¡Lárgate!

-¿Tim, qué tienes?

-Ellos me obligaron, te juro que luché hasta lo último, pero no pude... ¡No pude!