CORRESPONDENCIA PARA UN CORAZÓN ROTO

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Agosto 20

Estimada Julia:

    Debo admitir que me alegre mucho al leer un tono animado en su ultima carta, saber que todo queda igual entre nosotros sin importar cuanto tiempo pase me alivia el corazón.

    Sus ganas de saber más de mi me han dejado avergonzado (un poco sonrojado también), ya que no hay mucho por contar... soy tremendamente aburrido, es una de las razones por las que Laura me abandonó. Por cierto, pude hablar con ella... mientras estaba en la clínica los doctores la localizaron y le pidieron ir a verme, ya que era ella la principal razón de mi estado... me siento descaradamente feliz al confesarte que volverla a ver no fue tan gratificante como imaginaba, todas aquellas emociones que una vez trajo con su presencia no asistieron a nuestro encuentro... al verla entrar no sentí más que un poco de rencor y alivio a la vez de ver que estuviese bien.

- Te ves fatal - dijo con burla, típico de ella

- Ojalá pudiese decir lo mismo - conteste sin ánimos

- Alejo, eres un hombre grande, estos berrinches no te quedan, solo te estas arruinando, deberías seguir adelante no importa que, no solo porque ya no estoy significa que debas deprimirte - hablaba tan segura de si misma, con un tono engreído

- Tienes razón Laura, lamento que te hayan molestado... procuraré que no vuelva a pasar - comenzaba a sentirme irritado con su voz

- Alejo... creo que debes saber que estoy con alguien más - dijo como si nada - ya no puedo venir a tu rescate como si nada, él fue muy amable al traerme pero quiero que sepas que es la ultima vez... ya tengo una nueva vida

- De acuerdo - ¿Qué mas podría decir? Por dentro quería estallar en lágrimas por lo estúpido que fui al creer que aun pudiese haber oportunidad entre nosotros

- ¿Solo eso? - parecía decepcionada- No me sorprende, eres un hombre simple Alejo, al menos podrías decirme algo dramático, es la ultima vez que nos veremos cariño... mi Alejo tan aburrido como siempre - acarició mi mejilla y su tacto quemaba.

    Luego de dedicarme aquellas palabras acompañadas con lastima e indiferencia se fue, aun recuerdo el contoneo de sus hermosas caderas y aquel vestido blanco que le quedaba tan bien... pero me di cuenta que aquel gran y loco amor ya no existía... ahora solo había recuerdos de los que me resultaba difícil deshacerme.

    Me hace feliz poder contarle, Julia, que Laura es cosa del pasado y aunque todavía me duela su ausencia, se que es solo mi corazón aferrándose a lo ultimo que queda de ella...

    Ahora me estoy tomando un descanso del trabajo (fueron muy amables de dejarme descansar por tanto tiempo) aprovecho para remodelar la casa, vendí todo... absolutamente todo mueble y cuadro que había elegido ella para nuestro hogar y ahora lo estoy convirtiendo en MI hogar... gracias Julia, aunque tal vez para usted no signifique mucho, saber que usted a lo lejos me apoya y me aprecia, me ha dado ánimos de seguir adelante.

Ahora es su turno, quiero saber de usted.

                                                                                       Con cariño: Alejo