uno

2K 126 79
                                    

"Las palabras de amor en el manga shoujo y las canciones de amor son tan brillantes, pero puedo entenderlas sin necesidad de buscarlas en algún diccionario, aunque sólo quiero sentirlas" —esos eran los pensamientos que pasaban por la mente de la joven Jennie.

Los cerezos estaban volviéndose verdes, todo era diferente y no sólo la estación, también la escuela, el uniforme, todo, aunque ya se había acostumbrado al ambiente, aun así habían varias cosas nuevas, pero eso es lo normal al entrar a un colegio nuevo.

—Jennie –la llamó Lisa, seguida de Rosé– ¿Con quién estás mensajeando tanto?

—Con nadie, ¿ya se han inscrito a algún club? –preguntó la morena.

—Sí –respondieron en unísono.

—¿Todavía no te has decidido?

—No, aún no estoy segura que elegir –contestó la morena– Estoy entre el club de Atletismo o el de cocina.

—Wow, sí que no te has decidido –dijo Rosé– Deberías apresurarte, que pronto dejarán de aceptar solicitudes para algún club.

—Únete al club de baloncesto –soltó la tailandesa mientras revolvía el cabello de su amiga.

—¿No crees que soy demasiado baja para jugar? –dijo desinteresada.

—Hay personas mucho más bajas que tú y juegan demasiado bien.

—Jennie Kim –una tercera voz la llamó.

—Mande –respondió ante el profesor Cho.

—Así que no has elegido algún club, ¿qué te parece unirte al consejo estudiantil? –preguntó.

—Suena aburrido –protestó Lisa.

—Nuestro consejo estudiantil organiza muchas actividades y es igual de divertido que cualquier otro club –el señor Cho trataba de convencerla.

—¿Podría ir a echarle un vistazo?

—¿Estás interesada? Eso es genial –dijo con una sonrisa el profesor– El consejo pronto realizará las elecciones y buscaban a alguien dispuesto a ayudar.

La morena caminaba tratando de encontrar la sala del consejo estudiantil, parecía que se había perdido. Pasó por varios árboles y no encontró señal de algo, hasta que escuchó unas voces. Su curiosidad la llevó a acercarse al lugar y averiguar lo que sucedía.

—Jisoo, por favor –decía un chico alto y de cabello claro– Sal conmigo.

Estaba presenciando una declaración, se escondió detrás se un arbusto.

—Lo siento, no puedo aceptar –respondió la pelinegra.

—Ya veo, Jisoo y yo somos muy diferentes –el chico parecía algo decepcionado– Seguramente no hubiese funcionado si lo intentáramos.

—No digas eso... Es sólo que no quiero tener una relación amorosa con cualquiera.

Dicho esto, el chico se retiró del lugar.

—¿Aún sigues ahí? –había sido descubierta.

—Lo siento, no quería espiar ni nada por el estilo, sólo se me cayó algo y lo estaba buscando –mostró lo primero que vio, un lápiz– De verdad, lo siento tanto.

—¿Podrías guardar todo lo que escuchaste como nuestro pequeño secreto? –dijo y puso en sus labios su dedo en señal de silencio.

—Claro –contestó. Aquella pelinegra era un grado mayor, su cinta lo decía todo, segundo probablemente. La cinta de primero era roja, la de segundo azul y la de tercero morado.

En un futuro cercano | JENSOODonde viven las historias. Descúbrelo ahora