En un futuro cercano | JENSOO

once

El Consejo estudiantil se estaba preparando para la carrera de relevos, todo iba bien de Hoseok a Jimin, pero el problema comenzó en la parte de Jennie y Joohyun.

–¿Por qué Joohyun-Noona y tú no se llevan bien? –preguntó el rubio.

–Claro que nos llevamos bien –contestó la castaña.

–Sugiero que tú y Baechu se queden practicando ese pase –dijo la pelinegra.

Los dos chicos ya se habían ido a sus hogares, mientras Jisoo se fue porque los profesores la andaban buscando por unos papeles.

–Y bien... ¿Quieres practicar?

–Realmente me da igual, se supone que la carrera de relevos se hace por diversión –respondió la pelinegra que la acompañaba.

–Pensé que eras una persona seria, Unnie.

–Hay cosas que se deben tomar en serio y otras que no –aclaró.

–¿Te gustaría comer conmigo? –propuso.

Llegaron a un restaurante de comida rápida y se sentaron a hablar.

–¿Es tu primera vez en un lugar de comida rápida? –bromeó la castaña.

–¿Quién crees que soy?

–Una persona de clase alta y adinerada –contestó– Ya que fuiste a una escuela privada de niñas.

–Esa escuela no era tan... Para tu información, yo siempre iba a estos lugares y karaokes con mis antiguas compañeras.

Jennie rió al ver la cara que puso su mayor al explicarle.

–Hay un poco de hostilidad entre nosotros, así que estabas tratando de mejorar nuestra relación, ¿no es así?

¿Hostilidad?

–Pensé que eras una novata dócil, aunque al parecer eres una niña maleducada –soltó.

–Yo pensé que serías una Unnie tonta debido a como luces, pero parece que me equivoqué.

Ambas rieron tras sus comentarios y siguieron su plática, ambas estaban dispuestas a hacer la obra sólo por Jisoo.

–¿Tanto te gusta Jisoo? –preguntó la morena.

–Claro, es mi mejor amiga –contestó– Jennie, ¿te gusta Jisoo?

–¿Eh? Bueno, ella es mi Unnie, pero...

–Tienes razón, ella es mi mejor amiga y tu Unnie, ¿qué otro tipo de relación podríamos tener con ella?

–Me pregunto si al terminar la obra ella ya no se verá obligada a actuar, quisiera que ella fuera quien realmente quiere ser –suspiró la castaña.

–No creo que eso sea lo que Jisoo quiere.

• • •

–Jennie, ve por las pancartas que usamos el curso pasado, por favor, deben estar en el almacén –pidió Irene.

La nombrada se apresuró a llegar al almacén y tomar lo que le habían pedido. Cuando estaba a punto de salir, una pelinegra se topó con ella y entró, cerrando con seguro.

–¿Qué haces? –preguntó nerviosa la castaña.

Jisoo acorraló a Jennie en la pared y la abrazó.

–Solo recargo mi energía –tomó el mentón de la menor y la miró– ¿Puedo? –refiriéndose a un beso.

La castaña se limitó a asentir.
Jisoo juntó sus labios en un pequeño y dulce beso.