En un futuro cercano | JENSOO

dieciocho

–Brindemos por terminar el festival y los exámenes parciales, por nuestro duro esfuerzo –alzó su vaso de refresco la mayor.

–¡Salud! –imitaron su acción.

Estaban disfrutando de su tarde en un restaurante, todo el Consejo Estudiantil estaba -junto a Rosé y Lisa-

–Es una grabación de la obra, quemamos para cada uno –dijo la pelirroja mientras la rubia le entregaba los discos a los demás.

–¿Hay un reproductor de dvd?

–No, no pensamos verla. Definitivamente no –protestaron Irene y Jennie.

–¿Por qué? La parte dónde Jisoo llora está al final –aclaró.

–¡¿Qué?! ¿Por qué no cortaste esa parte? –exclamó la nombrada.

–Es la primera vez que te he visto llorar, no pude evitarlo –contestó riendo.

–Vi que le dijiste algo, Jennie, ¿qué fue? –dijo la otra pelinegra.

–Wow, gracias por hacer llorar a Jisoo.

–¿De nada?

–Te odio –hizo un puchero la pelinegra.

Mientras comían Jisoo comentó que se uniría al grupo de teatro.

–Haseul parece una persona agradable –dijo la pelinegra más baja.

–Haseul es un demonio –confesó Jisoo sintiendo un escalofrío.

Después de su reunión y merienda se retiraron a sus respectivas casa.
Y como era costumbre, una pelinegra y una castaña iban juntas.

–No sabía que te uniste al grupo de teatro.

–Disculpa, supongo que no te dije, pero no quería que acabara –dijo– ¿Recuerdas cuándo estábamos en la azotea y me dijiste todas las cosas que me pertenecen?

La morena se quedó callada tratando de recordar.

–Hasta no hace mucho, nunca hubiera considerado seguir actuando. Solamente quería poner en marca la obra que mi hermano no pudo hacer, pensaba que terminaría después del festival. –siguió caminando– Me dijiste que lo que había hecho me pertenecía pero no entendí a lo que te referías, porque yo pensaba que solo era el remplazo de Jin, aún así, quería creer lo que me dijiste porque eran tus palabras. Cuando la obra terminó, tuvimos el saludo final de la obra y los aplausos de los demás, fui invitada a unirme al grupo de teatro, todo eso y la manera en la que todos me ayudaron me hizo realmente feliz. Pensé cuán agradable sería si todas esas cosas me pertenecieran.

–Entiendo.

–Y todo es gracias a ti, Jennie –la abrazó– Gracias por ayudarme en la obra, por no enamorarte de alguien, quedarte a mi lado y no odiarme, no has cambiado y eso me gusta. –susurró cerca de la oreja de la menor.

Habían llegado a la esquina dónde tomaban caminos separados, Jisoo comenzó a irse por su lado dejando así a la morena sola.

–Jendeuk, me gustaría que te quedaras a mi lado justo como ahora. –exclamó antes de dejarla parada y sola.

Estaba entre decirlo o seguir callando, ¿era un buen momento? ¿Es lo correcto?
Y por instinto corrió hacía la pelinegra y la besó.

–Perdón, si he cambiado –dijo al separar sus labios de los de Jisoo– Te amo –se cubrió la cara con ambas manos.

«Creí que Jennie no se enamoraría de mí, estaba convencida y me aproveché de ella. ¿Me ama? ¿Desde cuándo? ¿Cuántas veces la obligué a callarse? ¿Cuántas mentiras le obligué a decir?»

–Lo siento.

–Por supuesto, "lo siento" –dio la vuelta y corrió la más rápido que pudo a su casa– Soy una estúpida.

–¡Jennie, espera! –debía ir tras ella, pero era como si sus pies estuvieran pegados al piso, no podía moverse.

Jisoo tenía miedo de ser amada, pensaba que "te amo de esta manera" significaba "ya no te amaré si cambias".
Pensaba que la morena era muy amable por aparentar no estar enamorada de la pelinegra.
Quería correr tras, pero no sabía que decirle, tenía miedo.

–Hola, Jen –la saludó su hermana cuándo llegó a su cuarto.

La castaña pasó de largo y acomodó sus cosas.

–¿Pasa algo?

–Largo, Dahyun. Quiero estar sola.

La mayor estaba preocupada por la actitud por parte de su hermanita pero se limitó a hacer lo que le pidió.

La castaña decidió quitarse el collar y guardarlo en el fondo de un cajón, y después se tumbó en su cama.

«Al final, ¿qué es el amor? Es una palabra que siempre quise decir, a pesar de que siempre quise, pero ahora que la he dicho, no entiendo lo que en verdad es. ¿Es así cómo se siente un corazón roto? No lloré -como Chaeyoung-, no sé, mi corazón se siente entumecido, es como si se hubiera ido a algún lugar sin mí, aunque sea mío. ¿Realmente fue amor?» —pensaba la morena.

–¿Qué es todo esto? –musitó.

Por otro lado una pelinegra también se estaba cuestionando y sintiéndose culpable.

«¿Pensó que la estaba rechazando cuándo me disculpé? Aunque eso no fue así, simplemente lo hice por no haber considerado sus sentimientos, pero no hay razón para decirle eso, porque no cambiará nada, no puedo corresponder a sus sentimientos. Nunca antes había considerado que podría encontrar un lugar donde pertenecer, excepto al lado de Jennie. El grupo de teatro, la escuela, la casa, estoy segura que hay muchos lugares por allí que son para mí. Jennie ya no es especial para mí, ya no es la chica que no podía enamorarse de mí » —pensó.

Se quitó su collar y lo besó.

–Te extraño –susurró.

Pero al final, ¿qué es el amor?