Mayo de Marichat

Día 7. Compañeros de Habitación

Día 7: compañeros de habitación.

[Continuación del día 6]

El chico subió a la habitación de la azabache, con las mantas que Sabine le había entregado, agradecido con su nueva familia, tenía unas ganas inmensas de sonreír, pero era más grande el peso de la verdad.

—Tú Kwami debe de estar cansado, Chat.

—Lo sé, pero entonces me verías y no te podrías resistir a mis encantos, aunque pensándolo bien, y ya que somos roomies, comenzaremos a saber más cosas del otro, ¿No crees princesse? —levanto sus cejas de arriba a abajo, después de todo, si podía sonreír, y era gracias a Marinette, ella era esa chispa de alegría en su vida.

Marinette sonrió, aunque había algo en particular que no quería que él chico supiera.

—Correré el riesgo, no, algo se me puede ocurrir... ¡Oh! ¡Ya sé! —Se levantó del diván, había estado sentada junto a él y corrió hasta llegar a su tocador, del primer cajón sacó un antifaz rojo con puntos negros que había hecho para cuando le encargaban a Manon. —no es de Chat Noir, pero te servirá de Herr Bug, después puedo hacer uno de Chat Noir que quede a tu medida.

—No hay prisa princesse—sonrió tomando el antifaz.

La chica de dio la vuelta, y escuchó cómo el chico decía «Garras fuera», seguido de un destello verde que cubrió su habitación.

—¡Me muero de hambre! —Se quejó la criatura negra.

—Ya puedes voltear Marinette.

Cuándo la chica se dio la vuelta, se percató que el chico llevaba un suéter color melocotón y unos pantalones color negro con la parte de las rodillas rotas, además de unos tenis azules. No sabía que esperar de él, posiblemente pensaba que su vestimenta le diría quien era, pero no fue así. Marinette ya había conocido al kwami de Chat Noir con anterioridad, en persona y porque Chat Noir le hablaba de lo molesto que era con su queso camembert.

—No te preocupes Plagg, ya lo tenía calculado—dijo mostrando el plato con gran variedad de quesos sobre su tocador, el kwami voló rápidamente hacia su lugar de ensueño.

—Esta chica es asombrosa, definitivamente tiene que ser tu novia A... —y unas burbujas verdes salieron de su boca.

«A» pensó la chica. « Su nombre comienza con A»

Cuando se sentó frente al chico, tomó sus manos y lo miro a los ojos. Se sentía tan bien tomarlo de las manos, no se sentía extraño y por increíble que pareciera, sus manos tenían una gran suavidad.

—Chaton, no te quiero presionar, pero si necesitas hablar con alguien, sabes que puedo ser tu confidente y buena consejera, prometo no juzgar.

Suspiró el chico, después de todo, sí que necesitaba hablar con alguien, lo correcto sería hablarlo con su Lady, pero aún no se sentía preparado para hacerlo, pero también había una gran probabilidad de que si le contaba a su princesse lo que estaba sucediendo, era muy probable que la estuviera poniendo en peligro. Podría contarle una parte, pero ¿y luego? ¿Cómo le explicaría que Adrien no asistiría en esos próximos días al colegio, sin que ella o los demás se preocupasen?

Lo correcto sería contarle TODO, no podía quedarse callado pero se aseguraría de que nada le pasara a la chica que comenzaba a despertar sentimientos en su interior.

—Nette, no te quiero poner en peligro, por eso, todo lo que te voy a decir, no tiene que salir de tu habitación, sería el fin para mi si algo malo te llegase a pasar, o incluso a tus padres.

—¿Tan mala estuvo la pelea familiar? —de inmediato se arrepintió de su pregunta, era tonto de su parte siquiera haber pensado en eso. El chico sonrió de lado y pudo apreciar en los ojos zafiro de la chica, lo arrepentida que estaba por las palabras recién dichas.

—Hummm mi familia había sido muy unida hasta la desaparición de mi madre, hace tres años, yo siempre había llevado educación en casa y solo tenía una amiga, yo iba a su casa y ella a la mía, pero un día, ella dejó de venir, fue a las pocas semana de que maman desapareciera, luego los permiso por parte de mi padre comenzaron a ser denegados y mis actividades comenzaron a aumentar, mas secciones fotográficas y esgrima, también pére comenzó a distanciarse —suspiró—Un año después, fue cuando recibí mi prodigio y siempre me había sentido solo y sin salida, pero Plagg a pesar de ser molesto con su pasión por el queso, era el único que me hacía compañía en esa habitación y a la hora de almorzar, ¿puedes creer que tenía que agendar una cita para alguna comida con pére? —negó con la cabeza, la chica se mantenía atenta a las palabras que él decía, casi le recordaban a Adrien—Pero tratándose del diseñador más famoso de parís, ¿Quién puede culparlo? —dijo con sarcasmo, cerrando sus manos en puños.

La franco-china estaba atónita, esa última revelación no podía ser una coincidencia, su nombre comenzaba con "A". Pero su gatito no podía ser Adrien, se negaba a querer creerlo.

—Hace dos años Ladybug me dijo que ya sabía quién era Le Papillon, dijo que era...

—Gabriel Agreste.

—Sí y yo...espera ¿cómo lo sabes?

—Este eh yo, sólo lo supuse Chat.

El chico asintió, prosiguiendo con su relato.

—Yo me negaba a creerlo, pero había pruebas y todo indicaba a que él era nuestro villano, pero después lo vimos akumizado porque perdí su libro—bufó molesto—y esta tarde, supe que Ladybug no estaba equivocada, él es Le Papillon, pero también descubrió que su hijo es Chat Noir. Si antes quería saber la identidad de mi compañera, ahora no quiero saber nada y tampoco me importa tener una amistad si así la puede poner en peligro, de hecho el que yo esté aquí, hace que también te ponga en peligro.

—Oh no, Adrien...—lo abrazó al escucharlo sollozar, muchas cosas estaban pasando por su cabeza en esos momentos, nunca se imaginó que la revelación de identidades sería de esa forma—No hay manera de que con esto me pongas en peligro.

—Pero Marintte —se separó unos centímetros de ella para poder verla a los ojos— si él se llegase a enterar...

—¿Me va a akumizar? —Arqueo una ceja —Eso no pasará chaton.

Principalmente porque las veces que estuvo a punto de ser akumizada, fueron por celos, ahora que sabía quién era su gatito, dudaba mucho que eso volviera a suceder.

—Puede que haga que uno de los villanos vayan tras de ti.

La chica volvió a sonreír.

—Para eso tengo a mi caballero de armadura de cuero— Y a Tikki, pero eso no tenía por qué saberlo, Él no se lo perdonaría—Sé que no dejarías que nada me pase.

—¿Y si se sale de mis manos?—agachó la cabeza. Le apenaba mucho mostrarse vulnerable frente a esa hermosa chica, pero también confiaba demasiado en ella.

—Encontrarás la forma para solucionarlo—colocó una mano sobre su mejilla—Súper Adrien. Tú y Ladybug lograrán quitar su prodigio. Pero para eso necesitas hablar con ella.

—No quiero hablar con ella de esto, no me gusto su amenaza de que yo terminaría entregando su prodigio y el mío, algo está tramando.

—Será cómo el día de los héroes, ya todo lo tenía planeado. Pero creo que Ladybug debe saberlo.

—Tal vez tú me puedas ayudar, Multimouse, tu poder puede clonar el Lucky Charm.

—Sí, pero insisto en que....

—Tranquila Mari—Se quitó la máscara, ya no había más que ocultar—Sólo le diré que sé quién es Le Papillon y no qué relación tiene conmigo.

—¿Entonces porque a mi si me dijiste todo?

—Porque te tengo mucha confianza, me estas abriendo las puertas de tu casa y porque eres mi amiga.

Y ahí estaba esa frase de nuevo. Inconscientemente cerró los ojos.

—Aunque...—lo escuchó decir—hace mucho que te deje de ver sólo como una amiga, Princesse.

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Sí, Adrikins y yo acordamos que sería la continuación del día 6 que Él escribió, y mi plan no era terminar el día 7 así, pero bueno, si lo continuaba, ya era merecedor de un fanfic propio.

๑✧Cнαтσυиεттε•ೋ