CONEJILLO

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JungKook no emitía ni un solo quejido a pesar del dolor que estaba sintiendo en esos momentos, la mordida de YoonGi casi le cuesta un trozo de carne

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JungKook no emitía ni un solo quejido a pesar del dolor que estaba sintiendo en esos momentos, la mordida de YoonGi casi le cuesta un trozo de carne.

Cuando llegaron al hospital, Namjoon bajó primero para hablar con el médico que estaba involucrado con ellos y los atendía personalmente cada vez que alguno salía lastimado, aunque eran pocas veces que eso llegaba a suceder.

JungKook bajó de la camioneta y siguió al doctor junto con Namjoon.

—Vaya, ¿Qué tipo de animal te mordió?— preguntó el médico una vez que revisó el hombro del menor.

—No fue un animal, fue un chico.— aclaró en un murmuro y apretó la mandíbula debido al dolor.

El hombre lo miró sorprendido y se rascó la cabeza un poco incrédulo. Jamás ha la visto algo igual.

—Bueno, casi te arranca un trozo de carne, me sorprende el tamaño de la mordida también, no parece ser una boca humana la que hizo esto.

—Si bueno, haga lo que tenga que hacer rápido y déjeme ir.— gruñó JungKook.

El médico tuvo que limpiar la herida para que no se infetara y después de eso coser el trozo casi despredido, Jungkook lo estaba apresurando porque ya quería irse de ese lugar.

Al salir, volvieron a la camioneta y se encontraron con los demás miembros fuera del vehículo.

—¿Qué se supone que hacen aquí?— preguntó Namjoon frunciendo el entrecejo.

—E-Esque.— tomó la palabra SeokJin, quien parecía bastante nervioso e incluso podía decirse que se veía asustado.— E-El chico se estaba moviendo y la verdad nos dió un poco de miedo.

Namjoon suspiró y negó con la cabeza.

—Son unos cobardes.

El líder se acercó para abrir la puerta del vehículo y en ese momento YoonGi saltó de la nada y lo tiró al piso, estaban en la misma situación que con JungKook.

—¡Quitenmelo!— gritó Namjoon forcejeando con el peli blanco de ojos negros.

Todos actuaron de inmediato y trataron de quitárselo pero lo tenía bien sujeto.

De pronto la vista de YoonGi observó a cada uno de los presentes y al toparse con Taehyung, el joven peli blanco aflojó su agarre, lo quedó viendo y poco a poco sus ojos volvían a ponerse de color azul.

Soltó a Namjoon y corrió hacia el chico de cabellos castaños para esconderse tras él.

—¿Q-Quiénes son?— preguntó asustado y señalandolos.

—Calma muchacho.— habló Taehyung tratando de no mostrar su miedo ante el agarre del menor sobre él.–Todo está bien, confía en nosotros, no te haremos daño.

Taehyung sabía que estaba mintiendo, querían a YoonGi para experimentar con él, sacar cualquier cosa que tuviera en su ADN y clonarlo.

El menor asintió y tímidamente se acercó a los demás chicos, hizo una pequeña reverencia y sonrió, todos se quedaron callados mirándolo pues parecía tan inocente que nadie les creería lo salvaje y fuerte que era.

...

Al llegar a su base, Namjoon hizo discretamente una seña a Hoseok y éste de inmediato comprendió lo que quería.

Caminó hasta colocarse detrás del peli blanco, quien estaba distraído mirando todo a su al rededor y entonces golpeó fuerte su nuca con la parte trasera de su arma. El menor estaba desprevenido, por lo que apenas recibió aquel impacto, cayó inconsciente.

Taehyung lo cargó y lo llevó hasta una especie de laboratorio donde lo recostó sobre una camilla de metal en la que solían torturar a su enemigos, luego lo aseguraron con cadenas de pies y manos para que no pudiera zafarse.

—Bien, Hoseok, SeokJin, es todo suyo.— dijo Namjoon saliendo del lugar junto con JungKook y Taehyung.

Los dos chicos que se quedaron dentro, empezaron a tomar muestras de sangre y se sorprendieron al ver que una vez su sangre tuvo contacto con el exterior se volvió completamente negra.

...

La experimentación duró casi dos meses. Hubo varios fallos, pero parecía que por fin habían creado lo que querían, el VL3. Sin embargo, no contaban con que la sangre ya mutada de YoonGi y los demás compuestos mezclados harían algo mucho más poderoso y que a la larga se arrepentirían de haber creado.

También dependería del portador, si la persona era débil como lo era YoonGi antes, le daría todo lo que a él, pero si la persona era fuerte, crearían una bestia totalmente fuera de control.

—Aquí está jefe.— dijo Hoseok mostrando un pequeño tubo de vidrio con una sustancia de color negro.

—Perfecto, ahora solo necesitamos un conejillo de indias.— frunció el ceño tratando de pensar en quien sería prudente probarlo.

—Yo me ofrezco.— dijo JungKook alzando la mano y captando la mirada de todos en el lugar.

—Sabes que esto podría matarte ¿verdad?— respondió Namjoon entrecerrando los ojos.

—Si, pero no hay nadie más fuerte que yo.— presumió y eso era totalmente cierto.

—Bien JungKook, pero si mueres...

—No moriré, lo resistiré.

Experimento JK3 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora