Wataru y Mitsune: un plan exitoso.

11 1 0
                                    

Wataru ya había descubierto el paradero del primer hermano: Makoto, y estaba dispuesto a derrotarlo, la  ventaja que tenía Makoto sobre Wataru era demasiada aunque tenía varias debilidades.

Wataru se ocultaba entre las sombras, Makoto no parecía sospechar nada, en eso Wataru atacó a Makoto con sus tentáculos, pero este lo esquivó.

–Wataru... Veo que no eran rumores, eres un asesino veloz pero no tienes ventaja sobre mí.

–Ja no presumas esto lo hago para deshacerme de ti –dijo atacándolo varías, sin embargo Makoto esquivaba todos sus movimientos.

–Se puede saber porque quieres deshacerte de mí.

–Mi amo te quiere muerto –Dijo y atacó a Makoto que también lo atacaba con su espada, sin embargo Wataru logró atravesar el vientre de Makoto.

–Eres veloz, pero un fracaso, solo me falta matar a tu estupido hermano.

–Mioru... No lo... Permitiré...

–Moriras antes de que puedas vencerme. –Dijo quitando su brazo dejando a Makoto agonizando, sin embargo tomando su espada antes de que Wataru hiciera otro ataque le corto la mano derecha, sin más Wataru se marchó pues si se quedaba Makoto aún sería capaz de matarlo, Sin embargo las fuerzas de Makoto se iban desvaneciendo, con sus últimas fuerzas mando un mensaje a Mioru mediante un halcón mensajero.
Mientras Wataru había ido a la mansión de Mitsune, quien lo esperaba impaciente sin embargo se sorprendió al ver que Wataru sangraba de un brazo.

–Wataru que te sucedió.

–Ese maldito me corto la mano, pero descuida se repondrá pronto –dijo aguantando el dolor que le provocaba la pérdida de su mano.

–Solo falta terminar con Mioru por lo que veo.

–Si, pero para eso primero debo recuperarme.

–de dónde sacaste esos tentáculos.

–Son una maldición, no recuperaré mis manos normales hasta que alguien en verdad pueda sentir algo por mí –dijo con lágrimas en sus ojos, Mitsune le tomo de la barbilla.

–No pareces un monstruo, no eres una abominación.

– pero la gente teme que los toque con mis tentáculos.

–Odio los pulpos pero tu no eres uno tu rostro no muestra que seas una criatura tan fea como tu te describes. –dijo Mitsune acariciando su rostro.

–Entra, cuando estés mejor podrás ir a cumplir tu misión.

–Pero si aún no a completo la misión.

–estas herido, además ya hiciste bien la mitad del trabajo –dijo Mitsune sonriendo maliciosamente, sin embargo para Wataru esa sonrisa era una sonrisa de amabilidad, no conocía bien el mundo ni a nadie pero quería averiguarlo mediante Mitsune, sin embargo  cuando entró vio toda la hermosa decoración de la mansión.

–Bien Wataru, no necesitas que cure tu brazo cierto.

–No descuida pronto crecerá otro.

–en serió.

–Mi maldición es que no puedo perder fácilmente mis tentáculos, la única forma de hacerlo sería que alguien llegara a amarme.

–Verdaderamente supongo.

–Si, así es –dijo Wataru, mientras Mitsune tomaba su mano izquierda pues los tentáculos le daban curiosidad.

–Pero que haces, no te dan asco.

–sólo quería ver como eran tus manos. –dijo sin asco alguno, dejando su mano.

–no dijiste que les tenías asco a los pulpos.

Umi No Ōji Horu: Akahi Hikari Where stories live. Discover now