Umi No Ōji Horu: Akahi Hikari

Sombra: el padre de Dark.

En lo más profundo de un bosque a miles de kilómetros del mar, una enorme bestia oscura rugía espantando a los viajeros, los ataques por esas bestias iban en aumento, varias personas morían y a menudo se encontraban sus cadáveres por todo el bosque, el responsable de esto no era nadie más que Sombra una enorme criatura de pelaje oscuro, enormes colmillos y ojos rojos, era parecido a un perro gigante sin embargo solía transformarse en humano sólo cuando trataban de perseguirlo o seguirle el rastro, su apariencia humana era parecida a un humano común a excepción de sus ojos rojos, era perteneciente a la jauría de los perros de las tinieblas y sobre todo era el líder, esas criaturas todas eran oscuras tanto en transformación como en forma humana, sin embargo todas eran criaturas que comían carne humana, era su comida favorita rara vez socializaban con humanos y eran escasos los casos de híbridos de humanos y perros de las tinieblas, el único caso conocido era el hijo de sombra: Dark sin embargo, había nacido albino a diferencia de las demás bestias por lo que era discriminado al igual que por su procedencia humana, para su padre Dark era muy importante más que su hermano, pero debido a un altercado debió desterrarlo, se arrepentía de esto, así que tenía una misión que cumplir buscar a su hijo.

Mientras en el puerto, se veían a diario un extraño caso de personas muertas por bestias, a lo cuál el rey ya sabía a quien culpar. Horu y Dark siempre iban juntos en esos momentos, cuando vieron a varias personas que cargaban a muchos cadáveres que no tenían extremidades y algunos sólo eran huesos.

–Vaya porque hay tantos cadáveres, es como si hubiera demasiadas bestias atacando.

–Si pero no es normal que estén, atacando en el mar sólo al bosque ellos no se adaptan al mar o si.

–No, pero igual, esto no es normal –dijo Dark sin embargo pudo llegar a oler algo en el aire.

–Fueron perros de las tinieblas.

–No se supone que esas bestias viven muy lejos de aquí.

–Si, pero no entiendo, porque han venido, además no huele a que sean muchos.

–entonces cuantos son.

–Al menos 1, pero debe ser colosal, para que tenga un apetito así.

–Espera comen humanos.

–Algunas veces, de echó si es la comida favorita de los perros de las tinieblas.

–Tu no has comido carne humana o si.

–¡¡Claro que no!!... No lo haría después de todo soy casi humano.

–Ya veo –dijo Horu pero en eso un rugido se escuchó y varías personas corrieron despavoridas, y en medio de eso una enorme bestia de pelaje oscuro apareció, y se atrevió a tragar a varios aldeanos vivos.

–Padre.

–¿Esa enorme bestia es tu padre?

–Ven, vámonos, no debe verme –dijo Dark jaloneando a Horu y se escondieron en un callejón.

–Ya dime en serio esa bestia es tu padre.

–Si, así es, pero no se a que vino, si se entera que me enamoré de ti, todo habrá terminado –dijo Dark sentadose y abrazándose así mismo mientras lloraba.

–Tranquilo no dejaré que nos separé. –dijo Horu abrazando a Dark, cuando en eso un rugido se escuchó y esa bestia los encontró.

–Creo que es demasiado tarde, nos descubrió –dijo Horu sacando su guadaña, mientras la bestia se preparaba para atacar, sin embargo Dark se interpuso y la bestia tomó su forma humana.

–Dark, ¿Que estas haciendo aquí?

–Padre yo...

–Te crié como una bestia no como una mascota, deberías haber acabado con estos humanos.