salvando a Dark.

18 0 0
                                    

Como todas las mañanas después del paseo llegaba la parte favorita de Ren: ayudar a Horu con su aseo personal apenas llegaron a la habitación de Horu, Ren le preparó el baño y empezó a desvestirlo, sin embargo Ren olvido la regla primordial: "jamás se te ocurra manosear al trap herido"

–¡¡Idiota!! –dijo Horu mientras le golpeaba a Ren con un bastón.

–¡¡Oye que te pasa!!... Sólo estaba...  –dijo viendo la camisa de Horu semiabierta, y su respiración lenta, haciendo que Ren se resbalara y cayera sobre el pecho de Horu, Jun entró corriendo y malinterpretó todo.

–Ustedes están locos... ¿Que estaban haciendo? –preguntó Jun.

–Espera... Estas equivocado no es nada de lo que piensas –Ren se apresuró a contestar.

–Bueno no importa necesito a Horu es una situación de vida o muerte...

–¿A mí?... ¿Para que?

–Es Dark, esta enfermo y si no lo ayudas morirá... –dijo Jun convenciendo a Horu.

–Sólo necesita que te vea... Por favor Horu...

–Ire...

–¡¿Que?!... Pero si aún estas débil tus piernas no pueden soportar mucho aún...

–Quien dijo que caminaría... No estoy tonto, se que aún estoy herido pero ahora la prioridad es Dark... Así que ayudame... –dijo mientras Ren lo cargaba y lo sentaba en la silla de ruedas.

Mientras con Dark este estaba cada vez peor, su temperatura estaba muy alta y se le dificultaba respirar, lloraba en silencio mientras esperaba su muerte inmediata.

–Rayos esta cada vez peor... –dijo mientras colocaba un paño en la cabeza de Dark, cuando en eso por fin llegaron, Horu no lo dudó y se levantó de dónde estaba, le dolía el cuerpo en parte pero logró abrazar a Dark que trataba de luchar por sobrevivir aún con su cuerpo débil sentir el olor de Horu fue suficiente para que reaccionará.

–Dark... –Horu lo abrazo con fuerza y lo miró a los ojos, terminando en un beso muy apasionado.

–¡¿Que?!... Jun porque no me dijiste que el príncipe era...

–Porque no lo preguntaste... Ya deja de preocuparte tanto...

–¿Jun porque no me dijiste que era conocido tuyo?– cuestionó Ren.

–¿Quien?

–Esta lindura de amigo que tienes –dijo mientras se ponía en frente de él... –¿No quisieras ir a cenar conmigo algún día?

–Callate... Depravado... –dijo alejándolo.

Mientras Dark y Horu apenas y se separaban, viéndose a los ojos.

–Viniste a verme...

–Supe que te sentías mal y que me necesitabas sino ibas a morir –Dark abrazó de nueva cuenta a Horu hundiendo su cabeza en su pecho.

–Sera mejor que pase algunos días a tu lado... Si no puede ponerse así de nuevo... –aconsejo el joven bibliotecario mientras trataba de alejar a Ren.

–Bueno... Será mejor que vengas conmigo al castillo...

–¡¿Que?! ¡¿Al castillo?!... ¡Jamás!... Me van a matar apenas ponga un pie ahí...

–No lo permitiré...

–Y si tu padre me corre...

–No lo permitiré... Deja de preocuparte y ven conmigo... –dijo mientras le colocaba una correa.

Umi No Ōji Horu: Akahi Hikari Donde viven las historias. Descúbrelo ahora