~15 ~

1.8K 287 19
                                    

El fin de semana había terminado, y las clases estaban por hacerlo también a tan solo tres semanas de recibir grado, todos estában contentos, algunos nostálgicos por qué dejarían la escuela y con ello una que otra amistad

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El fin de semana había terminado, y las clases estaban por hacerlo también a tan solo tres semanas de recibir grado, todos estában contentos, algunos nostálgicos por qué dejarían la escuela y con ello una que otra amistad. Pero yo,  yo sentía todo lo que acompaña a la palabra dolor. Mi corazón latía porque así tenía que ser, porque aún respiraba, pero mis ganas de volver a sonreír comenzaban a desaparecer desde el momento que acepté que todo se había acabado.

—Bueno Hoseok, a veces es lo mejor cortar todo de raíz, y qué duela por un momento. Pero no te dolerá toda la vida—

Los chicos se habían enterado de mi más reciente fracaso y de la dolorosa decisión que elegí al final. Traté de ocultarlo, pero cada ves más.eea imposible para mí retener las lágrimas y el llanto silencioso que me consumía al recordarlo, mucho más dolía ver su asiento vacío.
Si porque no apareció ese día y el día siguiente y mucho menos las últimas semanas.

—¿Alguien sabe que pasa con YoonGi? Es como si nos hubiera dejado de lado, somos sus amigos.—

Era verdad, ellos han sido sus amigos desde la primaria. Y yo solo era un aparecido de último año, era normal que no quisiera hablar conmigo, pero los chicos, ellos simplemente eran una cosa diferente.

—No lo sé Jimin, pero no debe estar lejos la perra de Suran no está ladrando—

—Taehyung tiene razón, eh.. si YoonGi no estuviera aquí, quizás ella ya estuviera diciendo que es culpa de nosotros o alguno de sus argumentos de mierda.—

Por momentos los escuchaba hablar, pero lo que menos quería era ser participe de aquella conversación, quería evitar el tema a toda costa y así fué.
Extrañamente YoonGi solo desapareció sin dejar una pista de su paradero, Chanyeol no decía nada y mucho menos lo haría Suran, así que solo fué un tema que  intenté olvidar.

Y con mucho esfuerzo todos nos graduamos, estaba sonriendo, bajo la atenta mirada de mis padres, pero cuando todo acabó lloré, lloré porque dejaría buenos amigos, derramé lágrimas porque  no pude pasar este momento con él, un momento del cuál nos gustaba hablar. Pero las lágrimas de dolor cesaron dando paso a la amargura, porque ahora debía cumplir con mi  padre. Estudiar economía y contabilidad, volver y trabajar para Jackson .

Cómo hijo pródigo había aceptado todas las condiciones dadas, pues aunque no es lo que quería hacer lo haría solo para llevarme bien con la familia quee tocó tener. Y sobre todo intentar amar a Jackson, tanto como él dice amarme a mi.

...

La navidad había llegado y como era de costumbre mis padres habían salido a cenar a su restaurante favorito, yo por mi parte me quedé en casa para ver películas o cualquier otra cosa que me ayudara a distraerme  antes de dormir.

En aquella silenciosa y deis noche el ruido del timbre se dejó escuchar,  interrumpiendo la aricatura. Cubrí mi cuerpo con un abrigo extra, pues dudo que solo la.pijama pudiera protegerme del frío al abrir la puerta. Suspiré y me asomé por el mirador de la puerta dándome cuenta de la presencia de Jackson.

Sorprendido abrí la puerta encontrándome con un tierno, raro, pero tierno Jackson. Pues estaba tan abrigado que se veía adorable, sacudiendo la nieve que caía en su cabeza y hombros. Mientras que en la otra mano traía un ramo de hermosas rosas color amarillas.

—¿Jackson?—  lo miré desconcertado sin saber exactamente qué decir —¿Que es lo que sucede? Pensé que estabas en Hong Kong— Dije mientras terminaba de abrir la puerta haciéndolo pasar.

—Si, amor lo sé, yo pensé que igual pasaría navidad lejos de tí, pero mírame aquí. Gracias a un percance con los socios Chinos— este sonrió mostrando una linda sonrisa aparentemente  llena de sinceridad.

Luego de aceptar su detalle ambos pasamos a la sala de estar, dónde con anterioridad me encontraba hundido entre varias mantas abrigando me del frío.

—Bueno yo...— balbucé indeciso pues realmente no tenía palabras para Jackson no cuando ya estábamos nuevamente comprometidos —Disculpa, no sabía que vendrías así que no me arreglé para ti.— dijeorsndome en el espejo de arriba a abajo mi pijama, la cual consistía en un conjunto de pantalones largos y camisa igual mangas largas blanco con azul a rayas y un pequeño caballo púrpura en ello.

—Descuida, te ves hermoso— Jackson se acercó a mí, plantando un suave beso sobre mis secos labios -Eh, mira he traído esto también para ti — sacó de su chaqueta un lindo collar dorado con un pequeño sol brillante  —Lo ví, y y no pude pensar en otra cosa más que en ti Hoseok, por qué me recuerdan tu brillo ese brillo que emanas, ese que te hace parecer un sol.—

sonreí aceptando aquél detalle, dándome media vuelta sintiendo como sus frías manos pasaban por mi cuello, era realmente un lindo sol, pero estaba confundido. ¿Qué le hicieron a Jackson?

—Gracias, pero no debiste mole..—

—¿Molestarme? Amor por favor, quiero hacer las cosas bien, quiero que me perdones totalmente quiero que me ames cómo yo te amo a ti—

-Esta bien Jackson—

Supongo que todos merecemos segundas oportunidades ¿No? Incluso si no quiero estar con Jackson es la única forma que déjense pensar en la razón de mi corazón roto.

Sonreí para darme la vuelta quedando frente a frente, sintiendo rápidamente sus labios nuevamente sobre los míos, estaba siendo besado por alguien que me amaba. Sus, besos ya no eran salvajes como los solía dar en el pasado, estaba bien, solo eran lentos. Pero no era YoonGi, no eran adictivos como los de él, simplemente estaba saboreando un pequeño músculo que se movía a la par con los míos, si solo eso eran.

—Te amo—

—Jackson yo...—

—Lo entiendo—

Sin más ambos nos quedamos viendo las caricaturas que anteriormente veía, esta vez acompañado por un delicioso chocolate caliente qué preparé para ambos y unas cuántas galletas de vainilla, esas que me solía enviar Jin ocasionalmente.

—Hey, ¿Es enserio?- rió él mientras tapaba con una de sus  manos su boca para evitar que migas de galletas salieran disparadas de ella. —¿Te gustan los Simpsons?, No sé cómo es que me gusta alguien que ve eso-

—¿Qué? A mucha gente le gusta, a mí me encantan y se acabó -.

La noche estaba fría por lo que ambos estábamos arropados en aquel cálido sofá.
refugiándome en el pecho de mi novio, quien se quedó dormido después de terminar la segunda taza de chocolate. Era tierno, pero por mi parte me era imposible conciliar el sueño, quizás los latidos del corazón nde jackson me entretenían y me hacían pensar sobre mi futuro.

—voy a olvidarte Min YoonGi—

Así después de un tiempo ambos nos quedamos dormidos uno cerca a el otro mientras eramos cubiertos por una cómoda cobija e iluminados por el televisor .

—intentaré amar nuevo—

Gracias por apoyar está bobadita, por sus estrellitas y sus lindos comentarios. Realmente los amo.


𝘔𝘪𝘨𝘢𝘫𝘢𝘴 𝘋𝘦 𝘈𝘮𝘰𝘳. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora