~ C a p í t u l o Final ~

2.2K 289 72
                                    

Me marché con el corazón encogido, no soporto el sufrimiento ajeno, siempre me acompaña una sombra de infortúnio

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Me marché con el corazón encogido, no soporto el sufrimiento ajeno, siempre me acompaña una sombra de infortúnio. Nunca podré perdonarme mi incapacidad para poder apartarla y lograr encarar mi vida con fé y esperanza.
Sigo creyendo que ando al margen de todo, pero realmente no se dónde empieza y acaba mi duda todavía estoy buscándome.. ese es mi mayor reto.

Me he pasado la vida intentando encontrarme a mi mismo, intentando encontrarme en los demás, intentando encontrarme en un amor. La vida es una búsqueda inscesante de los unos con los otros. Pero ha sido inútil, Siempre acabo volviendo al estado natural del hombre.. la soledad.
A veces ese estado nos disuelve porque nos hace recordar el pasado, añorandolo con excesiva nostalgia.

Se enfilaba los aviones que salían, llegaban y otros que recibían mantenimiento, las maletas de los pasajeros en la sala de espera.
A travéz de los cristales de la sala de espera el sol cegaba la vista de aquel pasajero que resaltaba debido a su rojiza cabellera, quien sentado esperaba aborda el avión, que los llevaria aproximadamente en dos horas a Canadá.

«Hace años que no te veía que haces aquí...»

—¿Hoseok?—

— ¿Si?—

Ambos de frente mirándose el uno al otro, uno con un rostro sonriente, mientras otro simplemente intenta no evidenciar ninguna expresión.

—¿Podemos hablar?—

—Tengo poco tiempo, ¿En qué puedo ayudarte?

—¿Te vas?— el pálido preguntaba mirando con rostro preocupado a su contrario.

—Si, así es—  murmuró Hoseok deseando que el hombre no pretendiera seguir charlando, se sentía demasiado triste, demasiado agotado como hablar con nadie. Necesitaba toda su energía para responder amablemente. Pero parecía imposible apartarlo.

—Perdón por romperte el corazón— Hoseok se quedó helado, no podría estar más  sorprendido, no podían darse cuenta que acababa de detonar una bomba .

Hoseok dejó su café a medio tomar al escuchar aquellas palabras, levantó su chaqueta de cuero y salió a la calle, su rostro de altos pómulos presentaba un aspecto sombrío, como si estuviera elaborando sus propios planes de batalla.
Pisando la nieve con sus botas quedó de pie preguntándose, como nunca antes había escuchado esas palabras.
Desde luego había perdido las esperanzas de volver a verlo. Entonces ¿Que hacia allí?

—No me jodas Yoongi— Hoseok pensó que su presión arterial se iría por las nubes si no sé calmaba pronto. —¿Que haces aquí maldita sea?— Yoongi está ahí frente a él y el dolor que sentía en el pecho casi lo partía o la mitad, es como si no hubieran pasado dos años y medio ¿No sé suponía que el tiempo lo curaba todo.? ¡JA, que gran broma.!

—Vine a pedirte perdón Hoseok, solo por eso, no puedo se que eso no arreglará el daño causado, pero....—

—Pero nada... Tu presencia no arregla las cosas—

𝘔𝘪𝘨𝘢𝘫𝘢𝘴 𝘋𝘦 𝘈𝘮𝘰𝘳. Where stories live. Discover now