Corazón Rendido® (AG 3)

Capítulo 34

Tener a tantas personas en casa era motivo de sobra para que Ariana se sintiera más que feliz.

Todos se encontraban desayunando mientras charlaban y bromeaban animadamente.

La castaña comió su avena junto a un par de panqueques con jugo de naranja mientras reía debido a un chiste que James había dicho. Incluso a Liam le había parecido gracioso.

Kylie por su parte observaba maravillada a su marido, encantada con su peculiar personalidad.

Sin embargo las risas cesaron cuando vieron aparecer a Ansel, quien no llevaba buena cara.

–Eh, Ansel, ¿te caíste de la cama?– le preguntó James.

Liam negó.

–Del sofá querrás decir–

Ansel gruñó mientras tomaba asiento. Era poco habitual verlo de mal humor pero en esos momentos estaba sucediendo.

Ariana le cubrió la mano con la suya en señal de apoyo.

–¿Quieres contarnos por qué discutiste con Bridgit?–

El hermano de en medio abrió la boca para hablar, sin embargo antes de que pudiese hacerlo, la rubia apareció por ahí.

Ella tampoco parecía haber dormido muy bien. Llevaba expresión de pocos amigos.

Misma expresión que cambió cuando miró a los presentes, ignorando por completo a Ansel.

–Buenos días a todos– sonrió, aunque pareció ser más una sonrisa triste.

–¿Estás bien, Bridgit?– le preguntó Ariana un tanto preocupada.

La chica continuó con su rostro apagado, pero negó inmediatamente para despreocuparla.

–Yo estoy bien, Ari– le aseguró. –Por favor, este día no pienses en nada que no sea tu bebé. Sé que hoy tienes tu consulta, así que eso tiene que ser lo más importante en estos momentos–

Ansel comenzó a servirse su desayunó en silencio, con la mirada al frente, sin siquiera dignarse a mirar a su novia.

Todos notaron la actitud de ambos, y los miraron con confusión.

–¿Estás segura, Brid?– le preguntó Ariana.

Bridgit exhaló.

–Sí, sí, te lo digo en serio. No te preocupes. Yo... yo estaré bien. Justo ahora iré a visitar a mi tía que vive en Toluca Lake–

–¿No te quedas a almorzar?– le preguntó Kylie.

La rubia negó.

–Quedé de almorzar con mi tía. Los veo más tarde a todos– se despidió agitando una de sus manos, y enseguida se marchó.

Ansel continuó sin decir una sola palabra.

En la mesa se miraron unos a otros, y entonces decidieron cambiar de tema para no hacerlo sentir peor.

–Entonces, ¿hoy te dirán el sexo del bebé, Ariana?– preguntó James prontamente.

La castaña sonrió con verdadera ilusión.

–Sí, sí, y eso me tiene muy emocionada– ella en el fondo sabía que se trataba de un niño, sin embargo quería que se lo confirmaran.

–Yo creo que será niña– dijo Liam.

–También yo– secundó James con emoción. –El rudo de Emmet tendrá que lidiar con una hija que pintará su mundo de color rosa–

–Yo igual creo que será una mini Ariana– Kylie sonó muy convencida.