Ella simplemente llegó para volverme loco. Con su tonto cabello y actitud condescendiente vino para hacerme caer.
Más que héroe parece una villana metiendose en la mente de la gente y jugando ahí arriba.
Convirtiéndose en un capricho. Un maldito c...
Hanahi suspiró antes de poner el alcohol en sus heridas junto a Touya. Ambos estaban en la casa de la chica cada uno en un extremo diferente de la cama. Hanahi lo miraba de reojo.
Touya estaba ahí, en su habitación curándose heridas Justo como en su infancia, como si el tiempo no hubiese pasado. Pero si que había pasado y ahora el era un villano buscado por múltiples crímenes y ella era una huérfana en busca de su gemelo mientras intentaba convertirse en heroína.
- No me mires de esa forma. - murmuró el levantando la mirada. Esos ojos azules que a ella le gustaron tanto en su infancia.
- Miró normal...
- Me juzgas, me miras esperando que yo vuelva a irme... eso duele Haru.
- A mi me dolió que te fueras.
Ambos guardaron silencio. Uno muy incómodo para ambas partes. Cuando se escuchó un toqueteo en la ventana de la chica.
- ¡Escóndete! Es Hawks.
- Dile que se vaya.- respondió el Todoroki perdido mientras que seguía con el algodón en la herida.
- Ponte debajo de la cama.
Dabi obedeció metiendose debajo de la cama. Le parecía algo completamente estupido arruinar dos operaciones de la liga al mismo tiempo.
- No vayas a tener sexo o incendiaré la cama.
Hanahi giró los ojos con molestia por aquella infantil amenaza. Abrió las cortinas y tal como imagino Hawks estaba del otro lado del cristal.
- ¿Que quieres? - cuestionó cruzándose de brazos. Entrecerró los ojos imaginando que así podía expulsar dagas de ellos y apuñalarlo.
- Pasar tiempo contigo.
- Pasa tiempo con Fuyumi.
Hawks frunció el ceño y Dabi suprimió una carcajada. Haru estaba celosa de la albina y no lo disimulaba ni un poco, ni siquiera lo intentaba.
- Abre la ventana. - repitió Hawks y Ella hizo caso por el tono que le pareció sexy.
Haru retrocedió unos pasos permitiéndole entrar, el alado se acercó a ella y esto provocó que su cabello se encendiera. Las llamas iluminaron la habitación.
"Quizás ella queme su propia cama" pensó Dabi al ver la iluminación por el fuego.
- ¿que sucede? - cuestionó el rubio viéndola a los ojos.
- Nada.
Se acercó a ella y ya no hubo lugar al que retroceder porque había una pared. El acarició la mejilla de la chica haciendo que tragara grueso.
- Aléjate.
- ¡Fosforito! ¿Que diablos te pasa? No puedo creer que te hayas puesto así porque me confesé. - Hanahi lo empujó a la vez que encendía su cabello produciendo calor en toda la habitación.
- ¡Pollo idiota! ¿Quieres que te incinere? Eres idiota. Te vi besando a la Todoroki mujer una hora después de decirme que me amabas. ¡Cuanto amor! Gracias a los dioses que alguien me ama tan sinceramente. - había fuego en sus manos, rabiosa y queriendo quemarlo hasta reducirlo a cenizas.
Hanahi respiro profundo y aunque tenía fuego en sus manos se frotó el rostro frustrada, su Kosei no la dañaba a ella.
- ¡Puedo explicarlo! Ella me besó a mi.
- ¡Seguro! Porque cada mujer que te ve solo quiere saltar sobre ti y arrancarte la maldita ropa.
- ¿estás celosa? - sonrió de lado como idiota por la emoción de causarle celos a esa chica.
Y aquella pregunta desató el infierno en la tierra. Hanahi le propinó un puñetazo a Hawks que lo hizo caer encima de la cama. Ella se subió sobre el a horcajadas y le golpeó el pecho varias veces hasta que el la sostuvo de los brazos y la obligó a que lo mirara.
- ¡Escúchame! - gritó el viendo como a ella se le llenaban los ojos de lágrimas. Hawks la soltó ya que supuso que había lastimado los golpes de sus brazos.
- Dirás una excusa tonta... que yo me creeré porque soy más tonta.
- No, yo te diré la verdad. - Hawks acaricio el cabello que ya no está en llamas - solo, escúchame.
-Mejor vete... - perdió colocándose de pie para que el saliera de su hogar.
- Haru...
La de ojos violeta no dijo nada y el rubio suspiró, giró a la ventana y salió volcando de alli. Haru cerró la ventana y vio a Dabi salir de abajo de su cama.
- ¿Quieres hablar de eso? - preguntó, acariciando el cabello de la chica.
- Me encapriché de un idiota. - sollozó.
-.-.-.-.-.-
Hanahi comía la paleta que Natsuo le había entregado, ese día tendrían un maratón de películas de marvel otra vez.
- No subas tanto el aire acondicionado. - pidió tranquila y se escucharon pasos.
- creo que papá llegó temprano.
Entonces el albino y la de cabello negro vieron a quienes emitían los pasos. Fuyumi y Hawks habían entrado a la cocina cargados de bolsas con alimentos.
- ¡Hola! - dijo Natsuo feliz.
Hawks estaba frente a Hanahi que lo miraba con rabia.
- ¿que haces aquí?
- Eso no te incumbe. - respondió. - ocúpate de tus asuntos. - dijo señalando a Fuyumi sin que los hermanos se dieron cuenta.
- ¿Desde cuando prefieres el frío?
- Desde que aprendí que el frío también quema... y lo hace menos que tus engaños.
