Novios de mentira 🍥Jikook🍥

40.- Comenzar otra vez

Lunes por la mañana y yo estaba despierto desde antes de que sonara mi alarma, estaba ansioso y nervioso desde la noche anterior, debido a que Jimin me había dicho que pasaría por mí, ya que según él, era lo que todo buen y lindo novio hacia.

Si bien no necesitaba que me viniera a buscar, porque lo menos que quería era que se sintiera forzado, si que me hacia ilusión llegar a la escuela con él. Cada vez me sorprendía más las emociones que me hacia experimentar mi novio, porque para ser sincero, sabía que podía sentir todo un zoológico en mi vientre, pero jamás pensé que iba a ser tan intenso, aunque yo creo que es por lo mucho que me ha llegado a gustar Jimin.

Me metí a bañar sin prisa, y de paso me dispuse a dar un concierto con la voz de Justin bierber haciéndome coro. Me vestí cómodamente una vez que hube terminado, con una camisa holgada de manga larga blanca, con un pantalón de mezclilla recto, junto con mis tenis. El clima era fresco, por lo que tenía la esperanza que durante el avance del día no se hiciera caluroso, sino me estaría arrepintiendo todo el día.

Me serví un poco de cereal con leche ya que no tenía hambre, mientras revisaba los mensajes. Me metí al chat de Jimin y una sonrisa boba se pintó en mis labios al leer los últimos mensajes. Muchos emoticones de besos, corazones y uno que otro con guiño por parte de él, fueron nuestros últimos mensajes intercambiados, ya que no nos pudimos despedir después del "Hasta mañana, descansa".

Me mordí el labio cuando me encontré indeciso en si mandarle un mensaje o no, ya que de todos modos lo iba a ver en unos minutos. Me metí otro bocado de cereales a la boca aún con el chat abierto cuando el celular empezó a sonar y a vibrar en mi mano cuando el nombre de Jimin apareció en la pantalla, enseguida me erguí y tragué lo que tenía en la boca. Carraspeé y descolgué el celular.

—"Hola".— respondí y casi quise darme contra la mesa cuando mi voz sonó agitada.

—" ¿Qué estabas haciendo tan temprano, Jungkookie?"— lo oí del otro lado de la línea, y por su tono de voz, supe que tenía una sonrisa luchando por aparecer en sus labios.

—"No estaba haciendo nada, por qué tienes que ser tan mal pensado"— recriminé, pero a pesar de mis palabras, mi tono juguetón se hizo presente.

Su risa resonó por la bocina del teléfono, sorbí del plato acabándome la leche restante y puse el plato en el lavatrastes.

— "Yo no dije nada, té fuiste el que pensó mal."

—" Pero lo insinuaste"

—"Yo solo le pregunte a mi novio qué hacia tan temprano, si tú me preguntaras, yo diría que estaba terminando de alistarme para ir por ti"

—"Claro, Jimin. Hazte el inocente, aunque tu y yo sabemos que de inocente no tienes nada"

Otra risa sonó.— "Oh vamos, que tu tampoco te salvas. Y menos con ese bonito chupetón adornando tu cuello."

Enseguida mis labios se fruncieron en vergüenza y mi mano voló directo a mi cuello.

—" Yo no fui participe de esto".

— "Pero tampoco te negaste...mucho".

Hice un mohín mientras emprendía camino hacia el baño para lavarme los dientes .— "Fui parte de un plan macabro".

—"Bueno, tenía que hacer algo".— unas llaves sonando y una puerta siendo cerrada me indicó que estaba saliendo de casa, sonreí nervioso.— "Escucha, estaré ahí en diez o tal vez quince. Pero tendré que colgarte ya que nunca he sido bueno manejando y hablando por teléfono al mismo tiempo, y si quiero que todo salga bien, entonces tendré que colgarte".